"La conciencia, esa gran desconocida y, paradójicamente, tan presente en nosotros como ausente en el mundo"
(Amador Martos)

UN BUEN MAESTRO PUEDE LLEGAR A CAMBIARTE LA VIDA.

El virus de la desinformación

Un artículo de Mel, Educadora Infantil y futura pedagoga.

Con todo lo que está cayendo sobre el sistema educativo actual, con todas las broncas que están recibiendo los maestros y profesores sin tener culpa alguna, con la necesidad desesperada de hacer una reforma amplia en las aulas. Con todo eso, escribo este post para decir simplemente basta.


Sí, basta. Basta de culpar a los profesionales de la educación como si ellos fueran los malos, basta de mirar mal a los maestros, basta de oír insinuaciones tales como “los profesores no hacen prácticamente nada y tienen muchas vacaciones”, porque desgraciadamente las he escuchado. De verdad: basta ya. Ellos son los primeros que quieren un cambio, que quieren tener más libertad para aplicar sus metodologías y quieren poder tener los recursos adecuados para poder dar todo lo mejor a sus alumnos. Ellos son los primeros que salen a las calles para reclamar un sistema educativo en condiciones..

Estoy de acuerdo en que hay maestros y profesores que no tienen vocación, que únicamente se agarran a la carrera de Magisterio porque creen que es la más fácil y la que más salidas tiene. Pero seamos realistas, creo que de esas personas hay pocas. Yo, comparto la idea de que un maestro puede cambiarte completamente la vida y que puede enseñarte muchos más que conceptos académicos y asignaturas. Os hablaré de un caso personal. En mi corazón, guardo recuerdos muy buenos de cuando fui al colegio, especialmente de dos maestras. La primera la tuve en primero de primaria, y la otra, en quinto y en sexto.

Aurora, que fue la maestra que nos acogió después de infantil, fue encantadora. Tengo que decir que yo únicamente fui a la Escuela Infantil un par de horas al día. Ella se encargó de hacernos felices durante nuestro periodo en clase. Me acuerdo que explicaba las cosas a través del juego, de obras de teatro y con marionetas. Que le gustaba mucho proponer actividades entre los niños y además siempre estaba ahí por si aparecía cualquier conflicto. Fue una maestra afectuosa, emotiva y con mucha inteligencia emocional que me marcó la infancia. Teresa, fue mi tutora en quinto y en sexto de primaria. En esos momentos, poco después de empezar las clases tuvieron que ponerme gafas, y los primeros días algunos niños se rían por llevarlas. Sin dudarlo ni un momento, ella estuvo allí para arreglar las situación y no dejó ni un momento que llorara. Incluso, hizo varias reuniones con los padres de esos niños para hablarles y advertirles de la situación.

Además de eso, con sus palabras y cariño llenaba la clase de confianza y de seguridad. No le importaba quedarse media hora más para explicar alguna cosa que no se había entendido, siempre nos preguntaba uno a uno cómo estábamos, y daba mucha importancia a nuestros rasgos positivos y los fomentaba al máximo. Tengo que decir que estuvo muy implicada con nosotros y con nuestro bienestar. Seguramente, todos los que me estéis leyendo, maestros, profesores, padres, madres… tengáis bonitos recuerdos de algún maestro. De algún maestro que os enseñara algo importante en la vida. A mí, por ejemplo, Aurora y Teresa me enseñaron a respetar a los demás y a ser siempre yo misma sin avergonzarme.

Pero, ¿qué pueden enseñar los maestros a parte de conceptos académicos?
Pues una multitud de cosas. Veamos qué os parece las que yo propongo:


* Los maestros puede enseñar a su grupo de clase a tener respeto y tolerancia entre los compañeros. Puede llevar a cabo actividades en el aula que fomenten la no discriminación y la solidaridad.

* Pueden enseñar empatía y comprensión. Dos valores que hoy en día son increíblemente necesarios para el día a día de los alumnos.

* Pueden potenciar la creatividad de cada uno. Una de las intención de los maestros es sacar lo mejor de cada alumno. Puede fomentar las ideas y experiencias nuevas.

* Puede enseñar a los alumnos a ser ellos mismos. Tener una identidad propia, una personalidad y una forma de expresar las opiniones es muy importante. Un buen maestro, apoyará la diversidad y la muticultarilidad a través del respeto.

* Son capaces de enseñar a gestionar y resolver los conflictos. Muchas veces, cuando se da en el aula algún tipo de problema, los maestros escogen el rol de guía, que es simplemente el que mantiene una escucha activa y hace preguntas sobre cómo se podría solucionar el conflicto entre los compañeros.

* Y muchas veces, son capaces de mostrar una increíble paciencia y comprensión con los padres. En bastantes ocasiones se implican con las familias para que la estancia de los alumnos sea lo mejor posible. Así que sin duda alguna, pueden enseñar esfuerzo y compromiso por una vocación.

Es evidente que la lista se me queda corta, que los maestros y profesores son la llave para que futuras generaciones intenten cambiar el mundo. Es una pena, que una profesión tan bonita, se haya convertido en una de las más acusadas y más desfavorecidas. ¿Creemos entonces que sin los maestros seríamos las personas que somos? Es cierto, que la educación nos la tienen que dar los padres, pero los maestros, son seguramente las segundas personas con las que más tiempo pasan los niños. Estoy muy agradecida de la educación que me ha dado mi familia, pero también lo estoy de las conversaciones con los maestros, de haberme ayudado a formarme como la persona que soy ahora. Por enseñarme mucho más que conceptos académicos. Por eso y mucho más, gracias. Gracias de todo corazón por vuestra labor de hace unos años y por las que estáis desempeñando ahora.

Os dejo un vídeo que a mí me ha gustado mucho. Se trata de una campaña de varios actores y actrices famosos que han llevado a cabo para dar las gracias a sus maestros y profesores de antaño. Espero que también os guste a vosotros.

Gracias a todos los maestros y profesores. Video de Youtube.