"La conciencia, esa gran desconocida y, paradójicamente, tan presente en nosotros como ausente en el mundo"
(Amador Martos)

CESAR COLL: “LOS NIÑOS NO DEJAN DE APRENDER CUANDO SALEN DE CLASE”

Evolucionarios

Entrevista a César Coll, Catedrático del Departamento de Psicología Evolutiva y Educación de la Universidad de Barcelona.

Los niños de hoy en día tienen todo un universo para explorar que César envidia. Sin embargo, no cambiaría la libertad de la que él y sus amigos gozaban para salir, jugar, aprender y equivocarse. César no tenía problema en compartirlo todo con todos ellos, pero… ¡ay del que no le devolviera los libros que le prestaba!



¿Cómo cree que se concibe en general internet, como herramienta de trabajo o como almacén de contenido?

Básicamente se ha utilizado y se sigue utilizando como almacén de contenido, pero, para mí, su mayor potencial reside en utilizarla como herramienta de trabajo, para aprender y para ayudar a otros a aprender.

¿Por qué cree que se ha tendido más a utilizarlo como continente de contenido?

Por la propia evolución de internet. Durante una época ha sido mucho más fácil depositar y recuperar documentos e información que no interactuar con las posibilidades que nos da. Esto ha cambiado con la llegada de la web 2.0, pero se sigue utilizando como almacén.

Entonces… ¿no estamos sacando todo el provecho que podemos a las TIC?

Yo creo que las TIC tienen una potencialidad enorme y que a la larga van a transformar todo el panorama de la educación formal y la no formal.

¿Las TIC tienen capacidad para cambiar el sistema educativo?

Todas las prácticas sociales han cambiado. Yo apenas voy a la biblioteca físicamente, y ya ni me acuerdo de cuando fue la última vez que fui a una agencia de viajes. La educación formal ¿que hace? Preparar a las personas para que puedan participar de manera competente en estas prácticas sociales. El currículum no es más que el reflejo de las prácticas sociales para las que hay que preparar a los niños. En la medida en la que cambian las realidades sociales, o cambiamos el currículum también o lo que aprenderán será escindido de su mundo real.

Quizá no se ha entendido bien el potencial de la tecnología en educación…

Yo creo que hay fases. En un primer momento, apareció sobretodo como contenido de aprendizaje, la llamada alfabetización digital. Luego se introdujeron como herramientas para aprender y para enseñar, como algo mediador entre aprendices y contenidos. A continuación, han empezado a utilizarse como herramientas que nos permiten aprender en cualquier momento y en cualquier lugar, saltando las barreras que hasta ahora han sido infranqueables, entre los espacios dedicados al aprendizaje, escuelas, universidades, y el mundo exterior.

¿En qué fase estamos ahora?

En la tercera, que no tiene porqué ser la última… Yo creo que aquí reside el mayor potencial. En la capacidad de establecer vínculos entre los aprendizajes, independientemente de cuándo, dónde, y cómo o con quién se aprende.

¿Qué hace falta para poder establecer este vínculo?

Poco tiempo, hace falta poco tiempo. Así como incorporar las TIC en educación depende de las políticas educativas, a nivel social ya están presentes, están cambiando el mundo, cambian la forma de aprender, de relacionarnos, de comunicar, de viajar. Al cambiar esto cambia el referente de la educación. Hay que preparar a las personas para participar en este entorno social. No se puede intentar enseñar a la gente lo mismo que antes ni de la misma manera. Esto va a obligar, se quiera o no, a un cambio radical en la educación formal.

¿Hay una brecha muy grande entre lo que saben los niños y lo que saben los profesores?

Yo creo que la brecha no es tanto de lo que saben, sino emocional y de hábito. Los niños ven un dispositivo y lo exploran, no les importa si lo rompen o no, a los 10 minutos saben como funciona. La actitud emocional es más abierta, más amable, menos defensiva. Los adultos, en general, hasta que lo tenemos claro no nos ponemos delante del dispositivo.

¿Esto por qué sucede?

Los niños utilizan la tecnología para hacer lo que les gusta hacer, y para lo que habitualmente hacen en los entornos en los que crecen, como los adultos. Desde el punto de vista del uso de las TIC para aprender no tienen más ventaja los niños que los adultos. A la sabiduría digital se puede acceder tanto si eres nativo digital como si eres inmigrante digital.

A veces damos por hecho que los niños ya saben manejar los dispositivos y que no hay que enseñarles nada. ¿Esto es un error?

Por supuesto. Los niños están familiarizados con los dispositivos y saben manejarlos para el uso que ellos le dan, para jugar, hablar con sus amigos, etc. Pero si los tienen que usar como herramientas de aprendizaje, hay que enseñarles igual que se les enseña a utilizar un libro. No es lo mismo leer un cómic que leer un libro para aprender, o escribir la compra de la semana y hacerlo para desarrollar conceptos.

¿Qué errores cree que se cometen hoy en día en las aulas?

Para empezar, utilizar las TIC para hacer lo mismo que se hacía antes, pero en color en vez de en blanco y negro. Por otro lado, que se utilicen para hacer algo sin preguntarse el interés de ese algo. En las aulas se están llevando actividades por el simple hecho de que son bonitas o porque motivan al alumno, pero no aprenden nada, no hay contenido o objetivo. Por último, utilizarlo como si fuera un elemento extraordinario en vez de hacerlo formar parte del día a día de los procesos de aprendizaje.

¿Qué papel debe jugar el alumno dentro del aula?

El alumno básicamente es aprendiz y lo que debe hacer es aprender. Pero lo es siempre, tanto dentro como fuera del aula. Sus experiencias de aprendizaje, sus conocimientos, sus vivencias, no son del aula, son del mundo en el que vive. Lo que hay que hacer en las aulas es aprovechar esto y hacer que el niño o niña se ponga en el centro del aprendizaje. Los niños no dejan de aprender cuando salen de clase.

Y lo profesores, ¿qué papel tienen?

El problema que tenemos en educación, y los profesores en particular, es que las TIC las hemos utilizado com herramientas para aprender en la escuela en vez de utilizarlas como herramientas que nos permiten transportar, transferir, los conocimientos las experiencias que tenemos en cualquier momento y lugar. Utilizarlas como herramientas de base para esa continuidad en el aprendizaje, para que el aprendiz se construya como una unidad independiente del lugar, es nuestro reto.

¿Qué deben hacer entonces los profesores?

Los profesores deben aprender a conectar las experiencias de aprendizaje, no los conocimientos de los niños, dentro y fuera de la escuela. Dicho de otra manera, el foco no debería ser los aprendizajes escolares, sino los aprendizajes del alumno, se hagan donde se hagan.

¿Qué les diría a los profesores que piensan que su papel en el aula ya no tiene sentido?

Que nunca ha tenido tanto sentido. Los niños hoy en día aprenden en muchos sitios, y muchísimas cosas que antes solo aprendían en el colegio: ahora las aprenden en cualquier parte. Ahora bien, en ningún otro sitio se puede ayudar a los niños a establecer los vínculos. Los únicos que pueden ayudar a los niños a conectar las experiencias en un todo integrado son los profesores.

Las TIC despiertan sentimientos ambivalentes entre muchos profesores. ¿Por qué cree que sucede este?

Los profesores hacen lo mismo que los niños: utilizan tanto las TIC porque las incorporan a sus actividades habituales. La tecnología les da una respuesta ideal porque hacen lo mismo pero más rápido, mejor, más divertido, etc. Los profesores hacen lo mismo: incorporan a los sistemas de actividad para hacer lo mismo que han venido haciendo estos últimos años. Los profesores deberían preguntarse, en primer lugar, qué podrían hacer mejor utilizando las TIC, y en segundo lugar, qué es todo aquello que me gustaría hacer y no he podido hacer, ¿con las TIC lo podría hacer?

¿Qué formación necesitan los profesores?

Necesitan una formación que parta de su realidad. Lo que no se puede hacer es ir y decirles a los profesores “a partir de ahora hay que hacer esto”. De ninguna manera. Es más inteligente ir y preguntar qué se está haciendo, analizar a partir de eso qué se puede mejorar con las TIC, qué les satisface, qué les funciona, etc. El punto no son las TIC, son las prácticas pedagógicas y la mejora de estas. Las TIC tienen un valor añadido enorme, pero hay que partir de lo que se hace. No hay que formar a los profesores en TIC, hay que formarlos en el uso pedagógico y didáctico de las TIC.

¿Todos los recursos digitales son aplicables en todos los casos?

Cada proceso de aprendizaje, cada herramienta, cada recurso, es bueno o útil si somos capaces de adaptarlo al contexto de cada centro, o alumno, si me apuras. No hay recetas mágicas, sino que hay que adaptar las diferentes propuestas a las necesidades que tiene cada profesor. Hay que ponerlo en contexto con los alumnos, el entorno de trabajo, etc.