"La conciencia, esa gran desconocida y, paradójicamente, tan presente en nosotros como ausente en el mundo"
(Amador Martos)

TESIS DOCTORAL DE NOEMÍ SIVERIO (VENEZUELA) - CAPÍTULO 3: ACERCAMIENTO AL HOMO COMPLEXUS

PENSAMIENTO

Título de la Tesis Doctoral:

PSICOLOGÍA DEL HOMO COMPLEXUS PARA UNA EDUCACIÓN DESDE LA COMPRENSIÓN

Capítulo III: METÓDICA - ACERCAMIENTO AL HOMO COMPLEXUS


“es la falta de amor en el mundo lo que está llevando a esta civilización al caos social, intelectual, de identidad y espiritual” Amador Martos

Intencionalidad del Capítulo

En relación a este Capítulo III, lo hemos denominado “Acercamiento al Homo Complexus”, queriendo significar con ello un acercamiento a ese hombre donde habitan, coexisten o convergen factores antagónicos y complementarios constituyendo esto un entretejido de lo propiamente humano. En tal sentido, cada ser humano es un cosmos, un hormigueo de personalidades virtuales, múltiples pero actualizables, que adopta actitudes diferentes según su humor, y de acuerdo con quien se encuentre (hijo, padre, madre, esposo (a), jefe, amante); siendo posible que en una misma persona se manifiesten dos personalidades radicalmente antinómicas, representadas por la cólera o por el amor (Morin, 1993).

Asimismo, cada psiquismo segrega una proliferación de fantasías, sueños, cada uno lleva en sí tesoros, carencias, fallas, abismos, cada uno lleva en sí la posibilidad del amor .Deduciéndose de lo antes dicho que esa multiplicidad, diversidad, complejidad son las que también hacen la unidad del hombre, ésta visión nos permite pasar de una concepción reduccionista, simplificada del mismo a una concepción compleja, de allí que nos aboquemos al homo Complexus (racional-irracional-espiritual), orientándonos a establecer un acercamiento hacia él.

A la par de lo que se viene comentando se hará referencia a que la investigación se movió alrededor de tres dimensiones: la Ontológica, la Epistemológica y la Axiológica las que se explicitarán en páginas subsiguientes. Junto a lo expresado, son tres los momentos que perfilan el estudio, a saber: Andamiaje Hermenéutico, Reencuentros y Tejido Hermenéutico Complejo.

Un aspecto más a considerar aquí, es que la investigación carece de un contexto específico, porque la misma no se llevó a cabo en una Institución determinada o con personas pertenecientes a una Organización dada, en su defecto, se trabajó con una gama de informantes que aportaron información a través de una entrevista, destacándose entre ellos: un psicólogo, un antropólogo, un estudiante (Milenial), un docente/ político.

En otro orden de ideas se indicará que a la dimensión metodológica subyacen dos aspectos de interés, en este sentido, lo Cualitativo y la Hermeneúsis, por lo que se hará énfasis en el carácter eminentemente hermenéutico que la acompaña.

Momentos de la Investigación

Los momentos de la investigación constituyen los instantes que configuraron a la misma, puede decirse que nos indicaron la ruta a seguir, son la bitácora que marcó el horizonte de lo que llevamos a cabo. En torno a esto, fueron tres los momentos a considerar: Andamiaje Hermenéutico, Reencuentros y Tejido Hermenéutico Complejo, tal como se mencionó en las líneas que anteceden.

Andamiaje Hermenéutico

Este momento consistió en la articulación de la estructura teórica que sirvió de apoyo para el proceso hermenéutico a realizarse durante toda la investigación. A tal efecto, se tomaron en cuenta los siguientes aspectos teóricos: Complejidad, Postmodernidad, Alteridad, Psicología Transpersonal o Compleja, Espiritualidad, Educación Transracional, Comprensión del otro. Desde la perspectiva de lo planteado ese fue el momento donde como investigadora me apropié del corpus teórico de las siete categorías antes referenciadas, es decir, debí equiparme de un conocimiento que me permitió hacer mío su lenguaje, comprender su discurso, sumergiéndome en él, porque para que el nivel de interpretación fuera excelente se me exigió partir de teorías existentes, las que traigo conmigo y con las que me identifiqué.

Perfilándose de este modo la importancia de la teoría para el proceso interpretativo, al respecto hay estimaciones que así lo sugieren, haciendo énfasis en que “toda observación por muy científica que sea, está cargada de teorías” (Hansen en Martínez, 2006), de igual forma “la teoría domina el trabajo experimental desde su planificación inicial hasta los toques finales” (Popper, 1963), haciendo compañía a tales afirmaciones, hay quien argumenta que “no existen hechos, solo interpretaciones” (Nietzsche en Hoyos, 2005), esto último expresa la relación entre ausencia de objetividad y la esencia interpretativa de la experiencia. De manera que lo importante sería contar con una teoría suficientemente amplia y abierta que nos lleve a interpretaciones pertinentes.

Reencuentros

Representaron los momentos en los cuales la investigadora se reencontró con la complejidad humana y también consigo misma. Esto es entendible porque al tratarse de un trabajo de corte Cualitativo, se está rescatando la subjetividad, como forma de conocimiento, ya que la investigación es filtrada desde las coordenadas de las personas investigadas y desde las del investigador, quien se convierte en principal instrumento de investigación (Meza, 2005). Por esto me reencontré con la complejidad de los informantes pero al mismo tiempo ví de frente mi propia complejidad.

Para esta travesía se efectuaron una serie de entrevistas a determinados personas entre los que resaltan un psicólogo, un antropólogo, un estudiante (Milenial), un docente/ político, pudiéndose observar que se trató de una variedad de informantes, esto se compagina con la índole del estudio que realizamos, el cual entre otras cosas fue en procura del Homo Complexus, y como partimos de la idea que todo ser humano “dispone de una panoplia de personalidades, virtuales, múltiples pero actualizables” (Morin, 1993), resultó provechoso contar con la presencia de una diversidad de sujetos que se insertaron en la unidad múltiple, desde lo cultural, profesional, biológico, espiritual e individual.

Contextualizando lo expuesto, se tendrá presente que las entrevistas a las que se hizo mención estuvieron bien pensadas, por lo tanto, se trató de un guión específico para cada informante, es decir, no hubo uniformidad en las preguntas. Cabe destacar que tales entrevistas, me orientaron a conocer a esa persona que estaba frente a mí, saber qué pensaba de la vida, sobre el ser humano, sobre lo que éste significa hoy día, y qué considera lo ha llevado a ser como es. Por otro lado, me enrumbé hacia un proceso dialógico, donde la comunicación fue la vía que me dio la oportunidad de convertirme en participante de la investigación, tendiendo puentes hacia un proceso permanente de mi implicación intelectual como investigadora y soltando las amarras me animé a voltear la mirada hacia los procesos subjetivos implicados en la creatividad del investigador como sujeto.

Tejido Hermenéutico Complejo

En este transitar por la metódica el tejido hermenéutico complejo se trató de una interacción entre teorías, relatos de los informantes, subjetividad de la investigadora, así como también de los aportes obtenidos a través del círculo hermenéutico que se conformó durante todas las asesorías de la tesis. En el mismo participamos mi tutor, dos compañeras de estudio, y yo, cabe mencionar que este círculo hermenéutico fue fértil, permitiendo el intercambio de saberes, además del establecimiento de una dialógica que trajo consigo el enriquecimiento de la investigación. Estos aspectos se vincularon para efectuar el tejido interpretativo, representando ésto la senda que nos llevó a la teorización.

En otro sentido, la interacción con la teoría se dio en todo momento, dado que durante el transcurrir de la tesis se contó con la compañía de teóricos que aportaron ideas significativas en la realización de la misma. Es así como nos valimos del ideario de la complejidad, de la psicología transpersonal o compleja, de la educación transracional, la inteligencia espiritual, la comprensión del ser humano, la complejidad del hombre (Homo Complexus).

Asimismo tuvimos la compañía de los informantes quienes nos suministraron sus diferentes visiones sobre el tema objeto de estudio en esta tesis doctoral, para ello realizamos una serie de entrevistas. La información obtenida del encuentro con nuestros colaboradores permitió llevar a cabo la interpretación de la misma lo que condujo a estructurar las categorías, con sus respectivas megacategorías para proceder posteriormente a darle contenido a cada una de ellas.

En el proceso de darle significado a las megacategorías, no perdimos de vista las categorías que la conformaban así como tampoco el sentido de la propia megacategoría, además de esto, nos apoyamos no solo en la información recabada, sino también en los teóricos o autores que convergieron con el criterio adoptado por cada informante.

En resumen, los relatos de los informantes, el conjunto de teorías empleadas en la investigación, la producción que se originó del circulo hermenéutico desplegado, la subjetividad de la investigadora, así como los aportes del tutor se entretejieron para efectuar la interpretación, representando esto la vía que nos llevó a la teoría que denominamos “Perspectiva Pentadimensional para una Psicología que revela la Comprensión del Homo Complexus desde la Educación”. Nuestra teoría es pentadimensional porque emerge de cinco dimensiones: Antropológica, Psicológica, Docente/Política, Estudiante (Milenial), así como desde la perspectiva de la psicología transpersonal o compleja. Todo esto dio lugar a la conformación de diez constructos que le otorgaron significado a la teoría de esta investigación, seis de ellos proceden de la perspectiva de los informantes: Homo Complexus, Comprensión del ser Humano, Educación para Comprensión, Inacabamiento del Ser, Psicología para la Comprensión y Resemantización de la Comprensión. Los cuatro constructos restantes tienen su origen en la Psicología Transpersonal: Inteligencia Espiritual, Educación Transracional, Dimensión Espiritual: un despertar de consciencia y Psicología Compleja.

En atención a lo anterior la teoría que emergió en esta tesis doctoral puede ser considerada un ideario macro, asimismo, representa un conjunto de orientaciones teóricas que nos permiten tener presente la complejidad del ser humano, al Homo Complexus, a la Psicología Transpersonal, así como también a una educación que sea permeada por tales consideraciones como lo es la Educación Transracional. Por esto, aspiramos a que las ideas que se generaron en nuestra tesis se conviertan en un camino posibilitador de propuestas que nos lleven a seguir estudiando el devenir eterno del hombre. Estas ideas nos conducen a pensar en el inacabamiento del conocimiento, es así porque estamos dejando una puerta de acceso a otras investigaciones que deseen ahondar en el tema, por cuanto nuestra teoría no es cerrada, finita, acabada.

Dimensiones Ontológica, Epistemológica y Axiológica de la Investigación

A continuación se expondrán los supuestos Ontológicos, Epistemológicos y Axiológicos sobre los cuales se posó la investigación. A este tenor, los aspectos ontológicos se refieren a la naturaleza de la realidad investigada, o sea, cuál es la creencia que mantiene el investigador con respecto a la verdad que investiga. Específicamente alude a: la visión del mundo que tiene la investigadora o el investigador sobre el concepto realidad-realidades, a su dinámica y complejidad en la que subyace el proceso investigativo y del que dependerá el tipo de problemas que se plantean, la perspectiva desde la cual se les aborda y la forma en la que se trata de buscar respuestas (Guardián, 2007).

Alrededor de la Dimensión Epistemológica se destaca en primer término el significado de Epistemología, que orienta hacia ciencia o teoría de la ciencia. Según Aristóteles es ciencia y tiene por objeto conocer las cosas en su esencia y en sus causas. Viene de la palabra griega Episteme que significa saber. Refiriéndose por ende a la concepción sobre el proceso de conocimiento en la que se fundamenta la relación sujeto-objeto y el contexto donde está inmersa esta relación (Guardián, 2007). Al hilo de esta exposición, la Ciencia y el saber deben poseer una fundamentación, dependiendo así de la base epistemológica que los sustenta, sobre esto se asevera que “no se comprenderá el significado o el sentido de una Ciencia, de una teoría o de una investigación, si no se expone a la luz el trasfondo epistemológico sobre el que se posiciona” (Moreno, 2005).

Discurriendo al respecto, el fundamento epistemológico constituye el modelo de relación que selecciona el investigador para establecer conexión con lo investigado. Viene a ser la forma en la que sobre la base de determinados principios se adquiere el conocimiento. Por ejemplo, la investigadora o el investigador pueden partir del supuesto de que el conocimiento es subjetivo, individual, irrepetible y, en consecuencia establecen una relación estrecha con lo investigado con la finalidad de poder penetrar con mayor profundidad en su esencia.

En este contexto, el episteme posibilita todas las condiciones de “lo que se puede pensar, conocer y decir en un momento histórico específico, además de la forma posible de un determinado hacer y de la existencia de algunos quehaceres” (ob. cit). Lo que significa que fuera del episteme se nublan todas las posibilidades de conocer y las raíces que llevan al conocimiento mismo.

De igual manera, esta Investigación tuvo un sustento en la Axiología, del verbo axios que significa valioso y logos que significa tratado, designando una rama de la Filosofía que estudia la naturaleza de los valores. En este sentido, la dimensión Axiológica de la investigación, remite al sistema de valores sustentados por el investigador y a su capacidad para percibirlos, concientizarlos, apreciarlos y aplicarlos a su actividad indagatoria cotidiana; sobre esta plataforma es que el investigador atribuye valoración a los fenómenos y, en consecuencia toma decisiones de abordarlos con intención indagadora (Ramos, 2008).

La Realidad

¿A qué hace referencia la Dimensión Ontológica en esta investigación? De cara a esta dimensión, se percibió a la Realidad como algo a interpretar, poseedora de una estructura holística, integradora y de conjunto para abordar el estudio de la realidad social. Se declara de esta forma que la información se obtendrá de una realidad sin ningún tipo de interés, de manipulación o de control de variables, partiendo del contexto con una visión de totalidad del mismo (Guardián, 2007). Nos dirigimos hacia una concepción que sugiere que somos quienes le atribuimos significación al mundo, de manera que éste no es una realidad objetiva reflejada a través de nosotros. Se sigue de lo dicho que la realidad es plural y en ese accionar de lo plural el hombre está habilitado para la construcción-deconstrucción de fundamentos, para acentuar la diferencia, para optar por una estética de la vida que le ofrezca caminos de superación de lo “simplemente dado”, para cuestionar y cuestionarse, para revisar los procesos con sentido crítico desde una posición hermenéutica (Hoyos, 2005). En consecuencia, pensamos que en nuestra investigación, la realidad es una construcción colectiva mediada por la interpretación y el lenguaje. Esta es compleja, dialógica, donde se manifiesta la dinámica de lo uno y lo múltiple, la llamada “unitas multiplex” (Morin, 1996). Consistiendo en una realidad creada, cambiante, dinámica, holística y compleja.

El Conocimiento

¿A qué hace referencia la dimensión Epistemológica en esta investigación? En este trabajo se considera al conocimiento como producto de la actividad humana y por consiguiente, se construye colectivamente, además al ser producto no puede desprenderse de su dimensión histórica. Por ende, el constituyente Epistemológico que recrea al conocimiento hará énfasis en su carácter constructivo interpretativo, con lo que se intenta superar la ilusión de la validez de un conocimiento por su correspondencia lineal con una realidad; concepción ésta que se ha convertido en una visión simplificadora y arbitraria de la misma al fragmentarla en variables susceptibles de procedimientos estadísticos y experimentales de verificación, pero que no tienen valor heurístico para producir (González Rey, 2007).

En este sentido, el conferirle al conocimiento un elemento constructivo, nos lleva a superar uno de los mayores miedos que amenazan a los investigadores: “el miedo a la especulación que no es más que el miedo a las ideas” (ob. cit), esa superación está dada porque ya no se parte de una objetividad limitante, ya la verdad absoluta no tiene asidero por ser ésta algo de perspectiva o contexto más que universal (Vattimo, 1994). Estas últimas consideraciones se adhieren también al principio de incertidumbre, el cual tiene profundas implicaciones respecto al modo de ver el mundo, pues socava uno de los supuestos fundamentales de la ciencia y la razón modernas al cuestionar el sueño cientificista de un universo determinístico (Hoyos, 2005).

Enlazando con lo tratado, se concibió al conocimiento como una producción intersubjetiva, dinámica, donde resulta fundamental la noción de pluralidad. El mismo se produce a través de la imbricación de lo racional e irracional, destacándose su multidimensionalidad, lo interaccional, lo dialógico, la complementariedad, lo sistémico, lo interdisciplinar, la infinitud.

Partiendo adicionalmente de que la construcción del conocimiento obedece a un proceso de aclaración progresiva atinente al desarrollo de cada investigación. Esto significa que el proceso se alimenta continuamente, de y en la confrontación permanente de las realidades intersubjetivas, que emergen a través de la interacción del investigador con las personas actuantes; de los procesos y realidades socio-culturales y personales objeto de análisis, así como del estudio de la documentación teórica pertinente (Guardián, 2007).

Los Valores

¿A qué hacen referencia los fundamentos o supuestos Axiológicos en esta investigación? Por tratarse de un trabajo de corte Cualitativo, esto permitió que se declararan los valores, las motivaciones y la subjetividad de la investigadora en un clima de libertad, a partir de una relación participante con el objeto de estudio. Entendiendo que los valores del investigador ejercen influencia sobre el proceso y que estos deben estar explícitos (Meza, 2005). Asimismo, se referirá que a la introducción de los valores en esta investigación se le dio relevancia desde dos perspectivas: la de los informantes que participaron y la del investigador, donde se vislumbran aquellos valores, creencias, concepciones de éste y que por tanto ejercen poder en la misma. La dimensión axiológica acompasa aquí a los valores trascendentales, entre los que se citan: la comprensión del otro, la empatía, la alteridad, la complejidad del hombre, la autenticidad e infinitud del ser humano, esto último porque fijamos postura con el criterio que señala hacia la condición de inacabamiento de ese ser, siendo infinito, por encontrarse en un proceso constante de metamorfosis.

Aspectos Metodológicos Subyacentes

A la investigación subyacen dos elementos metodológicos de importancia, lo Cualitativo y la Hermenéutica.

Lo Cualitativo

¿Por qué lo Cualitativo? La perspectiva cualitativa ha sido seleccionada para el logro de los propósitos de la investigación, porque ésta defiende el carácter constructivo-interpretativo del conocimiento, lo que implica como ya se dijo, comprenderlo como una producción y no como la aprehensión unidimensional de una realidad a descubrir. En consecuencia, la Metodología Cualitativa:

Trata del estudio de un todo integrado que forma o constituye una unidad de análisis y que hace que algo sea lo que es… trata de identificar la naturaleza profunda de las realidades, su estructura dinámica, aquella que da razón plena de su comportamiento… es un todo… no se opone a lo cuantitativo, sino que lo implica e integra. (Martínez, 2004).

Deduciéndose que a la luz de lo citado en líneas precedentes la tendencia Cualitativa descubre, e interpreta la vida social y cultural de quienes participan, por lo que el fin de este tipo de investigación es comprender en profundidad esa realidad en estudio (Gutiérrez, 1996). Un punto importante que deviene de lo anterior es que a través de la misma, se establece una relación de interdependencia e interacción entre el investigador y lo investigado. De esta manera se supera el dualismo sujeto-objeto, se busca el conocimiento como resultado de una interacción de diálogo entre el investigador y el objeto de ese conocimiento, implicando un marco de acción comunicativa.

Un aspecto más que justifica el empleo de lo Cualitativo en este estudio está representado por la forma de conocer la realidad, siendo la misma concebida como holística, integradora y abarcativa, estudiándose el fenómeno tal como se desarrolla en su ambiente natural, no alterando las condiciones en las cuales se nos presenta (Gutiérrez, 1996), rubros que hemos apreciado en la investigación que emprendimos. Concatenando con lo expuesto, se resaltarán también las condiciones más relevantes para la producción de conocimiento desde la perspectiva Cualitativa y, que representan además un aporte a lo que llevamos a cabo: recuperación de la subjetividad como espacio de construcción de la vida de la persona, reivindicación de lo cotidiano como escenario básico para comprender la realidad socio-cultural e histórica, la intersubjetividad y el consenso, como vehículo para acceder al conocimiento válido de la realidad humana.

Un aporte adicional, gira en torno a que lo Cualitativo acepta el modelo dialéctico, considerando que el conocimiento es el resultado de una dialéctica entre el sujeto (valores, creencias, intereses) y el objeto de estudio. No existirán por consiguiente, conocimientos estrictamente objetivos. Además este tipo de investigación pone de relieve la pluralidad metodológica que refiere una flexibilidad cognitiva porque “sus métodos no imponen reglas ni procedimientos rígidos al proceso de investigación, de modo que el diseño de cada una de ellas surge y se elabora a medida que avanza” (Hurtado y Toro, 2001). Otra bondad que nos ofrece la Investigación Cualitativa radica en su naturaleza multicíclica y en espiral, esto indica que los supuestos del trabajo tienen un carácter emergente y que evolucionan dentro de una dinámica heurística. Lo que conllevará a que cada hallazgo se convierta en punto de partida de un nuevo ciclo investigativo dentro del mismo proceso de investigación (Guardián, 2007).

Lo Hermenéutico

¿Por qué la Hermenéutica como ejercicio interpretativo en el estudio que estamos presentando? Porque el investigador que conoce la realidad se convierte en un ser interpretativo en la medida en la que se relaciona con ella; es por tanto, un hermeneuta al fijar una posición de intérprete de los fenómenos que estudia. Este modo de investigación y conocimiento de la realidad obedece al rango de lo Cualitativo. La hermeneúsis propia de esta perspectiva , tiene como objeto desentrañar el significado de las cosas, interpretar lo mejor posible las palabras, los gestos, así como cualquier acto, conservando, resguardando la singularidad del contexto donde se gestaron (Martínez, 2002).

Al tiempo que la hermenéutica proviene de la expresión griega hermeneucin, que significa el arte de interpretar. Desde la óptica del acceso al conocimiento, esta sostiene la no existencia de un saber objetivo, tampoco el ser humano es un espectador imparcial de los fenómenos, cualquier conocimiento de las cosas viene mediado por una serie de prejuicios y expectativas que orientan y limitan nuestra comprensión (Ruedas, 2008). De aquí que nos apropiaremos de la idea que sostiene que la hermenéutica está inspirada en la subjetividad, por lo que no existe una plena reproducción de sentido (sobre un texto o un acontecimiento), ya que el comprender se hace desde una cierta precomprensión de lo que se va a interpretar, teniendo ésta a su vez supuestos y condicionamientos debido a la historicidad del sujeto; esto es lo que origina el círculo hermenéutico (Vattimo, 1992).

Al respecto:

Quien desee comprender un texto tiene que estar dispuesto a dejar que este le diga algo. Una consciencia hermenéuticamente adecuada debe mostrarse sensible de manera preliminar a la alteridad del texto. Dicha sensibilidad no presupone una neutralidad objetiva o un olvido de sí mismo, sino una clara toma de consciencia respecto de las propias presuposiciones y los propios prejuicios (Gadamer, 1997. P66).

Resultando rescatable de los supuestos anteriormente enunciados que toda descripción del ser es transitoria, que él investigador interpreta de acuerdo a su tiempo porque somos seres históricos, tornándose inevitable hacerlo desde sus prejuicios debido a que siempre interpretará atendiendo a ellos. Igualmente, es menester recordar que el pensar metafísico lo es de lo explícito, de la razón suficiente, el hermenéutico es el pensar de lo oculto, de la reserva, de lo no dicho, de lo implícito, de lo subjetivo, conminándonos esto a pasearnos por la consideración de que una Psicología Compleja a la altura de los tiempos será más “humana”, mientras mayor espacio le conceda a esa otra dimensión tan negada por la ciencia, la irracionalidad. Es así como reivindicar lo subjetivo es reivindicar lo irracional (Palacios, 1998). Aspectos que están estrechamente vinculados con la esencia del estudio que realizamos y que han quedado explicitados a lo largo del mismo.

Vale la pena traer a colación que la fortuna de la Hermenéutica deriva de la crisis del pensamiento objetivante y demostrativo que pretende extender el conocimiento con la pura demostración y concibe a la verdad como un objeto que se presta para una mirada total, pudiéndola conocer en un sistema acabado y definitivo. (Pareyson y Givone, 1994). Este punto de vista, nos ha permitido comprender que la verdad es abierta e inconclusa, no se entrega en una formulación definitiva, sino en formulaciones determinadas, históricas, personales. Por eso: “la interpretación es múltiple, inagotable, infinita” (ob. cit).

Otro aspecto de interés a reseñar en atención a la hermenéutica y su contribución a este estudio, está relacionado con los momentos de los que consta el círculo hermenéutico: la comprensión, que representa el paso inicial del citado círculo fundamentado en construcciones, proyectos elaborados a partir de fuentes originarias, anticipadas por el hermeneuta y constatados en el mundo de la vida. La comprensión va del todo a la parte y de la parte al todo, en donde se teje el discurso a partir del entendimiento analítico (Gadamer, 1997). Ese análisis comprensivo de las fuentes y su interconexión con la problemática nos permitió ser congruentes con el hilo discursivo, con el razonamiento interpretativo y en la aplicación de los contenidos a que se obtuvieron. De esta manera se afirma que “comprender es transportarse a otra vida” (Dilthey, 1972) en tanto que “el ser que puede ser comprendido es lenguaje” (Gadamer, 1997).

Haciendo referencia al segundo momento del círculo hermenéutico nos encontramos con la interpretación que consiste en la fusión de lo aspirado por el intérprete y lo ofrecido significativamente por el texto o el acto humano. No se trata de reproducir lo que dice en realidad el interlocutor, sino que el intérprete tiene que hacer valer su opinión de la manera que le parezca necesaria, teniendo en cuenta la autenticidad de la situación dialógica en donde sólo él se encuentra como conocedor del lenguaje de las dos partes. Tal enfoque, nos facilita entender que como investigadores podremos interpretar al comprender, cuando nos aproximemos y cuando nos involucremos teóricamente, de manera explícita en las situaciones.

Un tercer momento se pronuncia sobre la validez de los enunciados hermenéuticos, que solo es posible comprobarla tomando en cuenta el correspondiente marco del saber práctico, no técnicamente utilizable sino preñado de consecuencias para la práctica de la vida (Habermas, 1984). Se trata así de la aplicación en tanto; comprensión de una generalidad, como horizonte último, y luego de comprendido el soporte teórico e interpretado sobre la faticidad del mundo de la vida, devendrá en la construcción teórica (Gadamer, 1997).

Desprendiéndose que la argumentación hasta aquí presentada fue el pilar fundamental que sirvió de sostén desde el punto de vista metodológico, al empleo de la hermenéutica como herramienta valiosa de interpretación de toda la información obtenida a partir de las entrevistas que se llevaron a cabo; a su vez abonó el terreno que conjugó el impulso hacia la construcción de teoría, o sea, la construcción de conocimiento. Esa interpretación estuvo influenciada, tal como ha quedado dicho, por nuestra condición de ser histórico: nuestros modos de ver, nuestras actitudes, nuestros conceptos ligados a la lengua, nuestros valores, normas culturales y estilos de pensamiento y de vida. Todo esto nos permitió acercarnos a cualquier expresión de vida humana no como una tabula rasa, sino con expectativas y prejuicios sobre lo que pudiera ser el objeto observado. Por ello se trata de una interpretación de horizontes, una interacción dialéctica entre las expectativas del intérprete y el significado del texto o del acto humano.