La reciente crisis y su repercusión en los recortes de recursos en educación, el aumento progresivo de fenómenos sociales como el bullying o la importancia de la educación individualizada; son algunos de los motivos que guían a los padres de hoy en día, para escoger el homeschooling como método educativo para sus hijos.
Aunque no seas un lince en el dominio de la lengua inglesa, podrás haber adivinado con facilidad en qué consiste esta modalidad educativa. El homeschooling es un movimiento por lo pronto minoritario en España, pero en crecimiento considerable, y como su propio nombre indica, consiste en la educación en el hogar por parte de los progenitores en el mayor de los casos (aunque este no sea el único, existiendo ya centros educativos de homeschooling, con docentes que se diferencian de los profesores de las instituciones en su enfoque didáctico).
Por homeschooling podemos entender el prototipo educativo que está más allá del modelo institucional, aunque esto no quiere decir que siempre se realice en una casa, que lo impartan padres o madres, que esté focalizado en una única familia, etc. La educación en el hogar es una modalidad amplia, diversa y poco conocida que tiene como característica principal, el estar alejada del modelo educativo, tanto público como privado del estado.
Sin embargo, y a pesar de que pueda parecer un prototipo educativo novedoso o incluso de actualidad, éste es un modelo que surge de los inicios de la educación y su difusión. Con el surgimiento de una educación obligatoria que pretendiera aunar de manera institucionalizada a toda nuestra futura sociedad, ya se empleaba la educación en casa. De este modo, los progenitores que así podían ejercerla, se servían de manuales curriculares para impartirla a sus hijos y vecinos. Se trataba de casos de difícil acceso a la educación garantizada por el estado.
Sin embargo, en la era moderna del modelo educativo, y más concretamente en la década de los 70, esta modalidad resurge como medio para alejarse de la educación tradicionalista del momento.
En la actualidad, esta perspectiva se ve reforzada como comento en la introducción de esta entrada por el abatimiento de la escuela pública, por el desencanto de una materia curricular que está desfasada con respecto a las demandas de nuestra sociedad, por una situación, en resumen, desoladora en el mundo educativo. De hecho, el resurgimiento de este modelo, es en mi opinión, uno de tantos síntomas de la actual crisis educativa que pide a gritos un cambio sistémico.
Así que, si te estás planteando el homeschooling con tus hijos, si consideras que no quieres formar parte de un sistema que relativiza la importancia de la educación en tu país; te muestro 6 ventajas y 6 inconvenientes de esta modalidad de aprendizaje con esta infografía.
VENTAJAS
Como principal ventaja, decir que el homeschooling es evidentemente una experiencia única que acerca a las familias a una conexión especial. El fenómeno educativo es ya de por sí enriquecedor. La transmisión de conocimientos supone de un vínculo muy especial entre docente y discente, pero si esta relación es además familiar, proporciona las bases de un espíritu de crecimiento en familia. La unión en el aprendizaje y descubrir un mundo nuevo juntos, sería la síntesis de lo que supone la educación en el hogar para las familias.
Y en relación a esto, otra de sus ventajas es, igualmente obvia, el favorecimiento de la conciliación. En la actualidad la preocupación por vías que aumenten la conciliación familiar en nuestra sociedad es creciente, por suerte. Esto significa que nos importa mucho la educación de los nuestros y que después de un largo período en el que los medios de comunicación y la presión social, han centrado la figura del trabajo como prioritaria en nuestras vidas, un nuevo horizonte centrado en la conexión familiar se vislumbra. El homeschooling tiene mucho que ver con esta nueva corriente conciliadora en la familia, por eso es cada vez más demandado y menos estigmatizado como una opción antisistema o simplemente relegada a frikis.
Por otro lado, si tu opción es la educación en el hogar, una de las ventajas para mí más tentadoras es la selección de contenidos. Y no sólo esto, sino la importancia en su tratamiento y la metodología a emplear. En general, la libertad a la hora de priorizar unos contenidos u otros, es una de las ventajas más positivas del homeschooling.
Igualmente, la flexibilidad horaria, es otra ventaja que resulta evidentemente favorecedora. Proseguir con una clase en función de lo interesado que se muestre un alumno, o pasar a otra temática si este se encuentra sobrepasado, optar por un descanso, proponer actividades de gamificación para reforzar conceptos, etc. La flexibilidad nos da una llave para, una vez más, obrar con libertad en la enseñanza.
Sin embargo, para mí, la mayor de sus ventajas y probablemente el caso en el cual yo aconsejaría principalmente la educación en el hogar, es la atención individualizada. Está claro que en el modelo institucional, esta práctica está en peligro de extinción. Los sucesivos recortes en personal fomentan que la educación sea más global, y las ratios rematan una situación que es irrecuperable en este momento. Por este motivo, al tratarse de alumnado con necesidades educativa especiales, este puede ser un modelo único para una atención de calidad.
Y en resumen, las ventajas principales del homeschooling están resumidas en el espíritu de libertad, a la hora de elegir lo que es importante en la educación de los nuestros, a la hora de mostrar caminos e itinerarios, de atender con exclusividad, de centrar el aprendizaje en lo que consideramos lo mejor para nuestros hijos.
INCONVENIENTES
Pero como toda moneda tiene dos caras, te propongo también unos contras, para que conozcas toda la verdad sobre la educación en el hogar.
El primer inconveniente en el que seguro estarás pensando es el aislamiento que produce la educación en casa. Si bien es cierto que la socialización en la infancia se puede dar en otros contextos como el parque, las actividades extraescolares o la comunidad de vecinos, barrio, calle, etc.; la socialización en las instituciones tanto públicas como privadas es evidentemente mayor. Los espacios de recreo son conectores sociales que evaden al niño de sus responsabilidades para centrarse en la relación con el otro. Los colegios crean lazos que los parques no pueden procurar. Además, el homeschooling puede llegar a crear un situación de saturación familiar, pues la convivencia es excesiva. Los niños necesitan su espacio para crecer, para conformar su personalidad, para encontrarse consigo mismos.
Por otro lado, otro inconveniente que puede provenir del homeschooling, es la capacidad económica para gestionar la educación en el hogar. Si bien es cierto que se puede prescindir de mucho material, especialmente libros de texto o uniformes, uno de los progenitores deberá dejar su puesto de trabajo. Por lo cual, el gasto económico es necesario tenerlo en cuenta como un inconveniente.
En contraposición a la selección de contenidos, tenemos un grave inconveniente y es la falta de especialización. Existen determinadas materias para las que es necesaria una formación específica. Puede que los contenidos de Educación Infantil o de Educación Primaria te resulten muy asequibles, pero es necesaria una formación pedagógica para saber impartirlos. Determinadas especialidades no son del dominio de todos, especialmente las lenguas extranjeras, la música o la pedagogía terapéutica. Además, aunque poseas este tipo de formación, los años de experiencia impartiendo clases son una ventaja que no vas a tener si decides ser el profesor de tus hijos.
E igualmente en contraposición a la flexibilidad, pero también a tener en cuenta, estaría la necesidad de adaptar la familia a una serie de horarios y organización que romperían con la rutina actual del hogar. Algo que a priori parece sencillo pero no lo es en realidad, pues los niños tardan en adaptarse a rutinas, que dentro del ambiente familiar suelen ganar en flexibilidad. Encontrar el equilibrio es realmente complicado.
Toda esta serie de inconvenientes pueden provocar una inseguridad en los resultados, pues los avances de los niños no se ven de inmediato sino que sus aprendizajes se observan consensuados con el tiempo a largo plazo. Es normal que se produzcan momentos de decaimiento y frustración, pues la tarea docente no es, ni mucho menos, lo que nos cuentan en las películas.
Por último, no dejar de destacar la situación actual del homeschooling en cuanto a su legalidad. Existe un vacío legal actualmente en España, entre la obligatoriedad de la enseñanza hasta los 16 años de edad y el contexto o lugar en donde se imparta clase. Por este motivo, esta escolarización en el hogar puede suponer un interés por parte de Asuntos Sociales en cuanto a términos establecidos de "descolarización" o supuesto absentismo escolar.
Y una vez establecidas ventajas e inconvenientes dentro del homeschooling, decir que desde mi propia perspectiva dentro de la educación institucionalizada, he procurado realizar una entrada lo más objetiva que he podido; y que como amante del fenómeno educativo, creo que la libertad de elección debería ser lo principal en este caso (aunque tire piedras contra mi propio tejado). En lo personal, optaría por una educación no formal supervisada por un especialista, y un refuerzo en las materias que fuera necesario por falta de preparación. Pero sobre todo, mucha socialización con niños y adultos fuera del ámbito familiar. Por último, decir que la educación de los hijos no sólo entra dentro del dominio curricular. Educar es amar, es ayudar a crecer, es dar herramientas para progresar en sociedad; por este motivo el homeschooling estará presente en todos los hogares que vivan el día a día con sus hijos. Educar en el hogar no es exclusivo de aquellos que no estén de acuerdo con el modelo institucional. Educar, es un precepto social, y todos somos responsables.
Enseñar no es una función vital, porque no tienen el fin en sí misma; la función vital es aprender. (Aristóteles)
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Aunque no seas un lince en el dominio de la lengua inglesa, podrás haber adivinado con facilidad en qué consiste esta modalidad educativa. El homeschooling es un movimiento por lo pronto minoritario en España, pero en crecimiento considerable, y como su propio nombre indica, consiste en la educación en el hogar por parte de los progenitores en el mayor de los casos (aunque este no sea el único, existiendo ya centros educativos de homeschooling, con docentes que se diferencian de los profesores de las instituciones en su enfoque didáctico).
Por homeschooling podemos entender el prototipo educativo que está más allá del modelo institucional, aunque esto no quiere decir que siempre se realice en una casa, que lo impartan padres o madres, que esté focalizado en una única familia, etc. La educación en el hogar es una modalidad amplia, diversa y poco conocida que tiene como característica principal, el estar alejada del modelo educativo, tanto público como privado del estado.
Sin embargo, y a pesar de que pueda parecer un prototipo educativo novedoso o incluso de actualidad, éste es un modelo que surge de los inicios de la educación y su difusión. Con el surgimiento de una educación obligatoria que pretendiera aunar de manera institucionalizada a toda nuestra futura sociedad, ya se empleaba la educación en casa. De este modo, los progenitores que así podían ejercerla, se servían de manuales curriculares para impartirla a sus hijos y vecinos. Se trataba de casos de difícil acceso a la educación garantizada por el estado.
Sin embargo, en la era moderna del modelo educativo, y más concretamente en la década de los 70, esta modalidad resurge como medio para alejarse de la educación tradicionalista del momento.
En la actualidad, esta perspectiva se ve reforzada como comento en la introducción de esta entrada por el abatimiento de la escuela pública, por el desencanto de una materia curricular que está desfasada con respecto a las demandas de nuestra sociedad, por una situación, en resumen, desoladora en el mundo educativo. De hecho, el resurgimiento de este modelo, es en mi opinión, uno de tantos síntomas de la actual crisis educativa que pide a gritos un cambio sistémico.
Así que, si te estás planteando el homeschooling con tus hijos, si consideras que no quieres formar parte de un sistema que relativiza la importancia de la educación en tu país; te muestro 6 ventajas y 6 inconvenientes de esta modalidad de aprendizaje con esta infografía.
VENTAJAS
Como principal ventaja, decir que el homeschooling es evidentemente una experiencia única que acerca a las familias a una conexión especial. El fenómeno educativo es ya de por sí enriquecedor. La transmisión de conocimientos supone de un vínculo muy especial entre docente y discente, pero si esta relación es además familiar, proporciona las bases de un espíritu de crecimiento en familia. La unión en el aprendizaje y descubrir un mundo nuevo juntos, sería la síntesis de lo que supone la educación en el hogar para las familias.
Y en relación a esto, otra de sus ventajas es, igualmente obvia, el favorecimiento de la conciliación. En la actualidad la preocupación por vías que aumenten la conciliación familiar en nuestra sociedad es creciente, por suerte. Esto significa que nos importa mucho la educación de los nuestros y que después de un largo período en el que los medios de comunicación y la presión social, han centrado la figura del trabajo como prioritaria en nuestras vidas, un nuevo horizonte centrado en la conexión familiar se vislumbra. El homeschooling tiene mucho que ver con esta nueva corriente conciliadora en la familia, por eso es cada vez más demandado y menos estigmatizado como una opción antisistema o simplemente relegada a frikis.
Por otro lado, si tu opción es la educación en el hogar, una de las ventajas para mí más tentadoras es la selección de contenidos. Y no sólo esto, sino la importancia en su tratamiento y la metodología a emplear. En general, la libertad a la hora de priorizar unos contenidos u otros, es una de las ventajas más positivas del homeschooling.
Igualmente, la flexibilidad horaria, es otra ventaja que resulta evidentemente favorecedora. Proseguir con una clase en función de lo interesado que se muestre un alumno, o pasar a otra temática si este se encuentra sobrepasado, optar por un descanso, proponer actividades de gamificación para reforzar conceptos, etc. La flexibilidad nos da una llave para, una vez más, obrar con libertad en la enseñanza.
Sin embargo, para mí, la mayor de sus ventajas y probablemente el caso en el cual yo aconsejaría principalmente la educación en el hogar, es la atención individualizada. Está claro que en el modelo institucional, esta práctica está en peligro de extinción. Los sucesivos recortes en personal fomentan que la educación sea más global, y las ratios rematan una situación que es irrecuperable en este momento. Por este motivo, al tratarse de alumnado con necesidades educativa especiales, este puede ser un modelo único para una atención de calidad.
Y en resumen, las ventajas principales del homeschooling están resumidas en el espíritu de libertad, a la hora de elegir lo que es importante en la educación de los nuestros, a la hora de mostrar caminos e itinerarios, de atender con exclusividad, de centrar el aprendizaje en lo que consideramos lo mejor para nuestros hijos.
INCONVENIENTES
Pero como toda moneda tiene dos caras, te propongo también unos contras, para que conozcas toda la verdad sobre la educación en el hogar.
El primer inconveniente en el que seguro estarás pensando es el aislamiento que produce la educación en casa. Si bien es cierto que la socialización en la infancia se puede dar en otros contextos como el parque, las actividades extraescolares o la comunidad de vecinos, barrio, calle, etc.; la socialización en las instituciones tanto públicas como privadas es evidentemente mayor. Los espacios de recreo son conectores sociales que evaden al niño de sus responsabilidades para centrarse en la relación con el otro. Los colegios crean lazos que los parques no pueden procurar. Además, el homeschooling puede llegar a crear un situación de saturación familiar, pues la convivencia es excesiva. Los niños necesitan su espacio para crecer, para conformar su personalidad, para encontrarse consigo mismos.
Por otro lado, otro inconveniente que puede provenir del homeschooling, es la capacidad económica para gestionar la educación en el hogar. Si bien es cierto que se puede prescindir de mucho material, especialmente libros de texto o uniformes, uno de los progenitores deberá dejar su puesto de trabajo. Por lo cual, el gasto económico es necesario tenerlo en cuenta como un inconveniente.
En contraposición a la selección de contenidos, tenemos un grave inconveniente y es la falta de especialización. Existen determinadas materias para las que es necesaria una formación específica. Puede que los contenidos de Educación Infantil o de Educación Primaria te resulten muy asequibles, pero es necesaria una formación pedagógica para saber impartirlos. Determinadas especialidades no son del dominio de todos, especialmente las lenguas extranjeras, la música o la pedagogía terapéutica. Además, aunque poseas este tipo de formación, los años de experiencia impartiendo clases son una ventaja que no vas a tener si decides ser el profesor de tus hijos.
E igualmente en contraposición a la flexibilidad, pero también a tener en cuenta, estaría la necesidad de adaptar la familia a una serie de horarios y organización que romperían con la rutina actual del hogar. Algo que a priori parece sencillo pero no lo es en realidad, pues los niños tardan en adaptarse a rutinas, que dentro del ambiente familiar suelen ganar en flexibilidad. Encontrar el equilibrio es realmente complicado.
Toda esta serie de inconvenientes pueden provocar una inseguridad en los resultados, pues los avances de los niños no se ven de inmediato sino que sus aprendizajes se observan consensuados con el tiempo a largo plazo. Es normal que se produzcan momentos de decaimiento y frustración, pues la tarea docente no es, ni mucho menos, lo que nos cuentan en las películas.
Por último, no dejar de destacar la situación actual del homeschooling en cuanto a su legalidad. Existe un vacío legal actualmente en España, entre la obligatoriedad de la enseñanza hasta los 16 años de edad y el contexto o lugar en donde se imparta clase. Por este motivo, esta escolarización en el hogar puede suponer un interés por parte de Asuntos Sociales en cuanto a términos establecidos de "descolarización" o supuesto absentismo escolar.
Y una vez establecidas ventajas e inconvenientes dentro del homeschooling, decir que desde mi propia perspectiva dentro de la educación institucionalizada, he procurado realizar una entrada lo más objetiva que he podido; y que como amante del fenómeno educativo, creo que la libertad de elección debería ser lo principal en este caso (aunque tire piedras contra mi propio tejado). En lo personal, optaría por una educación no formal supervisada por un especialista, y un refuerzo en las materias que fuera necesario por falta de preparación. Pero sobre todo, mucha socialización con niños y adultos fuera del ámbito familiar. Por último, decir que la educación de los hijos no sólo entra dentro del dominio curricular. Educar es amar, es ayudar a crecer, es dar herramientas para progresar en sociedad; por este motivo el homeschooling estará presente en todos los hogares que vivan el día a día con sus hijos. Educar en el hogar no es exclusivo de aquellos que no estén de acuerdo con el modelo institucional. Educar, es un precepto social, y todos somos responsables.
Enseñar no es una función vital, porque no tienen el fin en sí misma; la función vital es aprender. (Aristóteles)
El Encuentro de Verano de Alternativas Educativas (EVAE 2016) reúne a estudiantes, familias, profesores, activistas, educadores, artistas, soñadores, y cualquier otra persona interesada en la exploración de alternativas educativas en un ambiente amistoso y distendido.
Un evento anual cuyo nombre ha experimentado cambios desde su arranque en 2013 como EFAEC (celebrándose como EPLE en 2014) y tomando ya el de EVAE en 2015 para reflejar de forma más precisa la sinergia en crecimiento de las personas que, encuentro tras encuentro, se van sumando. Esta celebración de la diversidad y la comunidad reunirá del 23 al 28 de agosto en Ugena (Toledo), a escuelas democráticas, familias que educan en casa, unschoolers, escuelas libres, personas que desean cambiar la escuela convencional, talleres creativos y otros actores vinculados a las alternativas educativas.
Video de EVAE 2015:
EVAE está co-organizado por miembros de la Asociación para la Libre Educación (ALE), la Red de Apoyo Mutuo de Alternativas Educativas (RAMAE), the European Democratic Education Community (EUDEC) y la Asociación Otra Escuela es Posible, y es un encuentro sin ánimo de lucro.
Otra vez hacemos un llamamiento a la participación de otros grupos, colectivos y personas vinculadas al mundo de la educación, e interesadas y preocupadas por él. Queremos así seguir tejiendo red y avanzar en la tarea de dar a conocer las distintas maneras que hay de interpretar el reto de aprender hoy en día. Sólo juntas podremos conseguir que haya un progreso visible en el camino que todos y todas estamos andando.
Para ello pasaremos unos días juntos disfrutando de talleres tradicionales, conferencias y espacios abiertos donde todo el mundo puede proponer, dialogar, trabajar y discutir sobre los asuntos que surjan de los propios espacios, en los que podremos disfrutar de la compañía de interesantes invitados y poner a funcionar nuestra inteligencia y creatividad, nuestro potencial común.
Y además, como no, habrá lugar para juegos, piscina, baile, deporte, canciones, aventuras,… todo en un lugar que tuvo un gran éxito en los dos últimos años: el Centro de Ocio La Chopera en Ugena, Toledo, del 23 al 28 de agosto. ¡Os esperamos!
Si os animáis a realizar una actividad ya sea charla, taller o de cualquier otro tipo, nos lo podéis comunicar al correo encuentroalted@gmail.com e intentaremos incluirla en el programa. Se agradece la difusión del evento entre todos aquellos con interés en las alternativas a la escuela convencional.
Información de reservas:
Contacto del encuentro:
encuentroalted@gmail.com
Teléfono y whatsapp: 722349019 (Daragh)
Blog
Pagina en facebook
Grupo de facebook
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Un evento anual cuyo nombre ha experimentado cambios desde su arranque en 2013 como EFAEC (celebrándose como EPLE en 2014) y tomando ya el de EVAE en 2015 para reflejar de forma más precisa la sinergia en crecimiento de las personas que, encuentro tras encuentro, se van sumando. Esta celebración de la diversidad y la comunidad reunirá del 23 al 28 de agosto en Ugena (Toledo), a escuelas democráticas, familias que educan en casa, unschoolers, escuelas libres, personas que desean cambiar la escuela convencional, talleres creativos y otros actores vinculados a las alternativas educativas.
Video de EVAE 2015:
EVAE está co-organizado por miembros de la Asociación para la Libre Educación (ALE), la Red de Apoyo Mutuo de Alternativas Educativas (RAMAE), the European Democratic Education Community (EUDEC) y la Asociación Otra Escuela es Posible, y es un encuentro sin ánimo de lucro.
Otra vez hacemos un llamamiento a la participación de otros grupos, colectivos y personas vinculadas al mundo de la educación, e interesadas y preocupadas por él. Queremos así seguir tejiendo red y avanzar en la tarea de dar a conocer las distintas maneras que hay de interpretar el reto de aprender hoy en día. Sólo juntas podremos conseguir que haya un progreso visible en el camino que todos y todas estamos andando.
Para ello pasaremos unos días juntos disfrutando de talleres tradicionales, conferencias y espacios abiertos donde todo el mundo puede proponer, dialogar, trabajar y discutir sobre los asuntos que surjan de los propios espacios, en los que podremos disfrutar de la compañía de interesantes invitados y poner a funcionar nuestra inteligencia y creatividad, nuestro potencial común.
Y además, como no, habrá lugar para juegos, piscina, baile, deporte, canciones, aventuras,… todo en un lugar que tuvo un gran éxito en los dos últimos años: el Centro de Ocio La Chopera en Ugena, Toledo, del 23 al 28 de agosto. ¡Os esperamos!
Si os animáis a realizar una actividad ya sea charla, taller o de cualquier otro tipo, nos lo podéis comunicar al correo encuentroalted@gmail.com e intentaremos incluirla en el programa. Se agradece la difusión del evento entre todos aquellos con interés en las alternativas a la escuela convencional.
Información de reservas:
Contacto del encuentro:
encuentroalted@gmail.com
Teléfono y whatsapp: 722349019 (Daragh)
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Docentes innovadores
ESTUDIANTES ENTRARON A CLASE EL DÍA DEL EXAMEN, Y VIERON ESTO ESCRITO EN SUS PUPITRES.
NADIE QUEDÓ INDIFERENTE CON LO QUE HIZO ESTA MAESTRA.
Cuando eres un niño, tienes muchos adultos rodeándote, y muchos de ellos te acompañarán por largo tiempo. Los primeros son tus padres, claro, pero también podrás contar con tus profesores que, cada día, estarán ahí para animarte (excepto este maestro mexicano). Con eso en mente, esta profesora estadounidense tuvo una gran idea para apoyar a sus estudiantes.
Cada año los estados elaboran sus tests estandarizados para evaluar a los estudiantes y eso es una carga de estrés para los chicos que los deben rendir.
La profesora Chandni Langford, de la Escuela Primaria de la Avenida Evergreen , en Woodbury (New Jersey), conoce muy bien los nervios que pueden llegar a tener sus estudiantes de quinto grado cuando se acercan las pruebas PARCC (nombre de estos tests en ese estado) y, tanto para relajarlos como para animarlos a dar lo mejor de sí mismos, decidió hacer algo que nadie esperaba.
Tomó el marcador que usa para dar sus clases y escribió un mensaje motivador en el escritorio de cada uno de sus estudiantes.
Aunque antes de las evaluaciones, deben cubrir todos los mensajes y posibles ayudas que haya en el salón, la Sra. Langford escribió estos mensajes que pudieron ser borrados fácilmente antes de que los chicos comenzaran a responder las preguntas.
“Kwydir, ¡Aprender es tu súper poder! Recuérdalo, nunca dejar de intentar, y nunca dejar de hacer crecer tu cerebro! Tus profesores“
Todos celebraron su iniciativa. Además, firmó cada mensaje personalizado como “tus profesores”, buscando que los niños sintieran que tienen a un montón de personas respaldándolos y no sólo a la Sra. Langford.
“Yovani, No te digo que vaya a ser fácil, pero ¡va a valer la pena!¡Haz lo mejor! Tus profesores”
“Ish, Sé que esta es la primera vez que haces este test. ¡Usa todas tus herramientas y haz que tu cerebro crezca! Tus profesores”
La acción de la profesora llegó al Sistema de Escuelas Públicas de Woodsbury, que aplaudió la idea y la compartió en su cuenta en Facebook. La publicación se volvió tan popular que llegó a más de 16 mil ‘me gusta’ y fue compartida por más de 18 mil personas en cuestión de días.
“Lis, Recuérdalo, no hay ascensor al éxito, ¡debes tomar las escaleras!¡Tienes esto! Tus profesores”
Sin duda alguna, una gran idea para hacer que los chicos se sientan apoyados.
Ver más
Cuando eres un niño, tienes muchos adultos rodeándote, y muchos de ellos te acompañarán por largo tiempo. Los primeros son tus padres, claro, pero también podrás contar con tus profesores que, cada día, estarán ahí para animarte (excepto este maestro mexicano). Con eso en mente, esta profesora estadounidense tuvo una gran idea para apoyar a sus estudiantes.
Cada año los estados elaboran sus tests estandarizados para evaluar a los estudiantes y eso es una carga de estrés para los chicos que los deben rendir.
La profesora Chandni Langford, de la Escuela Primaria de la Avenida Evergreen , en Woodbury (New Jersey), conoce muy bien los nervios que pueden llegar a tener sus estudiantes de quinto grado cuando se acercan las pruebas PARCC (nombre de estos tests en ese estado) y, tanto para relajarlos como para animarlos a dar lo mejor de sí mismos, decidió hacer algo que nadie esperaba.
Tomó el marcador que usa para dar sus clases y escribió un mensaje motivador en el escritorio de cada uno de sus estudiantes.
Aunque antes de las evaluaciones, deben cubrir todos los mensajes y posibles ayudas que haya en el salón, la Sra. Langford escribió estos mensajes que pudieron ser borrados fácilmente antes de que los chicos comenzaran a responder las preguntas.
“Kwydir, ¡Aprender es tu súper poder! Recuérdalo, nunca dejar de intentar, y nunca dejar de hacer crecer tu cerebro! Tus profesores“
Todos celebraron su iniciativa. Además, firmó cada mensaje personalizado como “tus profesores”, buscando que los niños sintieran que tienen a un montón de personas respaldándolos y no sólo a la Sra. Langford.
“Yovani, No te digo que vaya a ser fácil, pero ¡va a valer la pena!¡Haz lo mejor! Tus profesores”
“Ish, Sé que esta es la primera vez que haces este test. ¡Usa todas tus herramientas y haz que tu cerebro crezca! Tus profesores”
La acción de la profesora llegó al Sistema de Escuelas Públicas de Woodsbury, que aplaudió la idea y la compartió en su cuenta en Facebook. La publicación se volvió tan popular que llegó a más de 16 mil ‘me gusta’ y fue compartida por más de 18 mil personas en cuestión de días.
“Lis, Recuérdalo, no hay ascensor al éxito, ¡debes tomar las escaleras!¡Tienes esto! Tus profesores”
Sin duda alguna, una gran idea para hacer que los chicos se sientan apoyados.
Seguro que habéis escuchado hablar del Método Montessori ¿verdad? Este método es mucho más que una escuela pedagógica, es una filosofía de vida en lo que respecta a la educación de nuestros hijos, y podemos aplicarlo en casa siguiendo estos 10 principios para educar niños felices.
Ya sea que conozcáis las teorías de María Montessori, o que seáis nuevos en este tema y queráis informaros mejor, el artículo de hoy de la Escuela de Padres os será de gran utilidad. ¿Lo vemos?
MÉTODO MONTESSORI, 10 PRINCIPIOS PARA EDUCAR NIÑOS FELICES
Según María Montessori, el niño es el centro del aprendizaje, que debe aprender en un ambiente rico de estímulos. Son los mismos niños que pueden escoger los materiales, los juguetes y los instrumentos que prefieren en cada momento, porque sus necesidades y su curiosidad son una oportunidad para el aprendizaje. Siguiendo estos criterios, estos son 10 principios en los que podemos inspirarnos como papás o como educadores:
1- Ambiente en orden
Según el método Montessori los niños aprenden mejor en un ambiente ordenado. Por eso el consejo es crear estantes con contenedores y cestas donde ordenar libros, juegos y puzzles, que sean fácilmente accesibles para los niños. De este modo los niños adquieren el hábito del orden y comprenden que es importante volver a poner en su sitio todas las cosas que han usado durante el día. En este sentido os pueden ser útiles nuestras ideas prácticas para guardar los juguetes.
2- Aprender con el movimiento
Los niños necesitan concentrarse en actividades que requieran el movimiento de las manos. Por ejemplo los puzzles o las construcciones son mucho más que un juego, ya que además de divertirse los peques aprenden a concentrarse y a coordinar los movimientos.
3- Elegir libremente
La posibilidad de elegir libremente es uno de los pilares del método Montessori. Los niños aprenden más y mejor cuando les damos la libertad de hacer sus propias elecciones, lo que no significa hacer lo que se quiere sin reglas. Es una libertad que debe conducir a la capacidad de elegir la cosa justa para ellos, según sus necesidades del momento.
4- Estimular el interés
Los niños aprenden mejor cuando viven en un ambiente que los estimula, con objetos interesantes que llamen su atención. Una ejemplo: poner a disposición de los peques libros diferentes, materiales para manualidades, materiales para dibujar y colorear, y todo lo que pueda estimular su creatividad.
5- Recompensas
María Montessori era contraria a los métodos educativos que se basan en premios y castigos, porque creía que la verdadera recompensa para los peques debería ser la posibilidad de haber aprendido algo nuevo. Según el método Montessori, el premio verdadero es alcanzar el objetivo: completar un puzzle, lograr servirse agua solos, etc.
6- Actividades prácticas
La mayor fuente de aprendizaje según este método son las actividades prácticas, es decir las que estimulan los sentidos y ayudan a aprender sobre orden, concetración e independencia.
7- Grupos de edades mixtas
En el cole los niños suelen estar separados por edades, pero Montessori creía que los grupos mixtos con niños de diferentes edades estimulaban el aprendizaje porque los niños más pequeños sentirán curiosidad por lo que hacen los grandes, pidiendo explicaciones a los grandes que estarán contentos de poder enseñar lo que han aprendido. Es un consejo para tener en cuenta sobre todo en casa, cuando tenemos hijos de edades diferentes, que podemos hacer participar en las mismas actividades para que interactúen y aprendan unos de los otros.
8- Participación y contexto
Es más sencillo comprender ejemplos concretos, colocados en un contexto, que nociones abstractas. Esto también significa que los niños aprenden mejor haciendo que escuchando, participando que siendo meros expectadores.
9- El rol de los maestros
En el método Montessori, el educador no es una persona que da una lección hablando sobre los argumentos que quisiera enseñar, tiene un rol activo de coordinador y facilitador de las actividades de los niños. Cuando los papás ejercemos el rol de maestro debemos comportarnos del mismo modo, involucrando directamente a los niños en las actividades educativas.
10- Independencia y autonomía
En este método serán los niños, con el tiempo, a indicarnos cuáles son los estilos de aprendizaje que prefieren, cuando serán capaces de reconocer cuáles son sus propias pasiones e intereses. Algunos niños preferirán leer, otros hacer actividades prácticas, y los papás podemos acompañarlos en estas elecciones dándoles las herramientas que necesitan para seguir su recorrido educativo en independencia y autonomía.
¿Qué os parece? ¿Os interesa el tema? Seguiremos compartiendo con vosotros ideas prácticas para llevar el método Montessori a nuestra vida cotidiana.
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Ya sea que conozcáis las teorías de María Montessori, o que seáis nuevos en este tema y queráis informaros mejor, el artículo de hoy de la Escuela de Padres os será de gran utilidad. ¿Lo vemos?
MÉTODO MONTESSORI, 10 PRINCIPIOS PARA EDUCAR NIÑOS FELICES
Según María Montessori, el niño es el centro del aprendizaje, que debe aprender en un ambiente rico de estímulos. Son los mismos niños que pueden escoger los materiales, los juguetes y los instrumentos que prefieren en cada momento, porque sus necesidades y su curiosidad son una oportunidad para el aprendizaje. Siguiendo estos criterios, estos son 10 principios en los que podemos inspirarnos como papás o como educadores:
1- Ambiente en orden
Según el método Montessori los niños aprenden mejor en un ambiente ordenado. Por eso el consejo es crear estantes con contenedores y cestas donde ordenar libros, juegos y puzzles, que sean fácilmente accesibles para los niños. De este modo los niños adquieren el hábito del orden y comprenden que es importante volver a poner en su sitio todas las cosas que han usado durante el día. En este sentido os pueden ser útiles nuestras ideas prácticas para guardar los juguetes.
2- Aprender con el movimiento
Los niños necesitan concentrarse en actividades que requieran el movimiento de las manos. Por ejemplo los puzzles o las construcciones son mucho más que un juego, ya que además de divertirse los peques aprenden a concentrarse y a coordinar los movimientos.
3- Elegir libremente
La posibilidad de elegir libremente es uno de los pilares del método Montessori. Los niños aprenden más y mejor cuando les damos la libertad de hacer sus propias elecciones, lo que no significa hacer lo que se quiere sin reglas. Es una libertad que debe conducir a la capacidad de elegir la cosa justa para ellos, según sus necesidades del momento.
4- Estimular el interés
Los niños aprenden mejor cuando viven en un ambiente que los estimula, con objetos interesantes que llamen su atención. Una ejemplo: poner a disposición de los peques libros diferentes, materiales para manualidades, materiales para dibujar y colorear, y todo lo que pueda estimular su creatividad.
5- Recompensas
María Montessori era contraria a los métodos educativos que se basan en premios y castigos, porque creía que la verdadera recompensa para los peques debería ser la posibilidad de haber aprendido algo nuevo. Según el método Montessori, el premio verdadero es alcanzar el objetivo: completar un puzzle, lograr servirse agua solos, etc.
6- Actividades prácticas
La mayor fuente de aprendizaje según este método son las actividades prácticas, es decir las que estimulan los sentidos y ayudan a aprender sobre orden, concetración e independencia.
7- Grupos de edades mixtas
En el cole los niños suelen estar separados por edades, pero Montessori creía que los grupos mixtos con niños de diferentes edades estimulaban el aprendizaje porque los niños más pequeños sentirán curiosidad por lo que hacen los grandes, pidiendo explicaciones a los grandes que estarán contentos de poder enseñar lo que han aprendido. Es un consejo para tener en cuenta sobre todo en casa, cuando tenemos hijos de edades diferentes, que podemos hacer participar en las mismas actividades para que interactúen y aprendan unos de los otros.
8- Participación y contexto
Es más sencillo comprender ejemplos concretos, colocados en un contexto, que nociones abstractas. Esto también significa que los niños aprenden mejor haciendo que escuchando, participando que siendo meros expectadores.
9- El rol de los maestros
En el método Montessori, el educador no es una persona que da una lección hablando sobre los argumentos que quisiera enseñar, tiene un rol activo de coordinador y facilitador de las actividades de los niños. Cuando los papás ejercemos el rol de maestro debemos comportarnos del mismo modo, involucrando directamente a los niños en las actividades educativas.
10- Independencia y autonomía
En este método serán los niños, con el tiempo, a indicarnos cuáles son los estilos de aprendizaje que prefieren, cuando serán capaces de reconocer cuáles son sus propias pasiones e intereses. Algunos niños preferirán leer, otros hacer actividades prácticas, y los papás podemos acompañarlos en estas elecciones dándoles las herramientas que necesitan para seguir su recorrido educativo en independencia y autonomía.
¿Qué os parece? ¿Os interesa el tema? Seguiremos compartiendo con vosotros ideas prácticas para llevar el método Montessori a nuestra vida cotidiana.
El Certamen D+I ‘Docente Innovador’, convocado por la plataforma Proyecta, ha seleccionado a los diez finalistas entre los que se encuentra el profesor más innovador de España cuyo nombre se hará público el próximo 20 de mayo.
Este concurso ha registrado en su primera edición 213 candidaturas de docentes de todas las etapas y alrededor de 1.000 nominaciones realizadas por la comunidad educativa a profesores de toda España considerados innovadores animándoles a convertirse en candidatos.
LISTA DE DOCENTES FINALISTAS:
Guadalupe Castellano Pérez, profesora de Secundaria en el IES Manuel de Guzmán de Navahermosa (Toledo), ha creado un sistema para la enseñanza de Matemáticas en el que cada estudiante avanza a su propio ritmo, controla sus resultados y comprueba la aplicación práctica de la asignatura a través de videotutoriales y ejercicios online.
Juan De Vicente Abad es orientador y profesor de Educación para la Ciudadanía y Psicología en el IES Miguel Catalán de Coslada (Madrid), donde impulsa proyectos interdepartamentales dirigidos a mejorar la convivencia en el centro y a promover la cooperación entre los estudiantes y las instituciones locales.
Laura Adela Fernández Blanco es tutora de Primaria en el CPI Atios de Narón (A Coruña), en el que ha implantado un sistema de aprendizaje basado en proyectos de investigación a partir de grupos de trabajo, experimentos reales y herramientas TIC (Tecnologías para la Información y la Comunicación).
Marcos García González, profesor de Filosofía en el IES Padre Isla de León, ha gamificado por completo su asignatura a través de un juego de rol, experiencia que, además, ha recogido en su tesis universitaria.
Rosa Liarte Alcaine es especialista en el uso educativo de aplicaciones móviles y compagina sus clases de Geografía e Historia en el IES Cartima de Estación de Cártama (Málaga) con la formación que imparte para otros profesores.
María Consuelo Marazuela Zapata es profesora de Secundaria en el IES Isidra de Guzmán de Alcalá de Henares (Madrid), en el que trabaja desde la asignatura de Religión para aumentar la implicación de los alumnos en proyectos de voluntariado y posibilitar su contacto con estudiantes de centros extranjeros.
María Jesús Rubio Berenguer, maestra de Lengua en el Colegio Santo Domingo Savio de Petrer (Alicante) ha sustituido los libros por juegos que implican la utilización de elementos lingüísticos y ha puesto en marcha actividades extraescolares en las que participan los estudiantes y sus familias.
Esther Sánchez Martínez es docente de Informática, Dibujo Técnico y Plástica en el Colegio Mirasur de Madrid, donde sus alumnos programan sus propios videojuegos a partir del contenido de varias asignaturas y desarrollan proyectos audiovisuales en colaboración con una residencia de mayores.
Fernando Trujillo Aparicio es profesor de Matemáticas y Tecnologías en el Colegio Jesús, María y José de Conil de la Frontera (Cádiz). En sus clases, imparte cada bloque de contenidos a través de videojuegos con retos cuya resolución implica tanto el uso de los nuevos conocimientos como la aplicación de los ya aprendidos.
Juan José Vergara Ramírez, docente de Formación Profesional (concretamente, de Educación Infantil) del IES Barrio de Bilbao de Madrid, está trabajando en la puesta en marcha de metodologías que requieren un papel activo de sus alumnos, a la vez que facilita el contacto de estos con estudiantes de otros niveles educativos y de otros centros de enseñanza (nacionales y extranjeros).
EL JURADO
Un jurado formado por cinco expertos en Educación e Innovación (José Antonio Marina, María Acaso, Fernando Trujillo, Alejandro Tiana y Carmen Delia García-Fuentes) valorará el perfil profesional de los candidatos a partir de las metodologías utilizadas en sus clases y de la creatividad de las ideas puestas en práctica en el aula. El ganador será premiado con 10.000 euros.
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Este concurso ha registrado en su primera edición 213 candidaturas de docentes de todas las etapas y alrededor de 1.000 nominaciones realizadas por la comunidad educativa a profesores de toda España considerados innovadores animándoles a convertirse en candidatos.
LISTA DE DOCENTES FINALISTAS:
Guadalupe Castellano Pérez, profesora de Secundaria en el IES Manuel de Guzmán de Navahermosa (Toledo), ha creado un sistema para la enseñanza de Matemáticas en el que cada estudiante avanza a su propio ritmo, controla sus resultados y comprueba la aplicación práctica de la asignatura a través de videotutoriales y ejercicios online.
Juan De Vicente Abad es orientador y profesor de Educación para la Ciudadanía y Psicología en el IES Miguel Catalán de Coslada (Madrid), donde impulsa proyectos interdepartamentales dirigidos a mejorar la convivencia en el centro y a promover la cooperación entre los estudiantes y las instituciones locales.
Laura Adela Fernández Blanco es tutora de Primaria en el CPI Atios de Narón (A Coruña), en el que ha implantado un sistema de aprendizaje basado en proyectos de investigación a partir de grupos de trabajo, experimentos reales y herramientas TIC (Tecnologías para la Información y la Comunicación).
Marcos García González, profesor de Filosofía en el IES Padre Isla de León, ha gamificado por completo su asignatura a través de un juego de rol, experiencia que, además, ha recogido en su tesis universitaria.
Rosa Liarte Alcaine es especialista en el uso educativo de aplicaciones móviles y compagina sus clases de Geografía e Historia en el IES Cartima de Estación de Cártama (Málaga) con la formación que imparte para otros profesores.
María Consuelo Marazuela Zapata es profesora de Secundaria en el IES Isidra de Guzmán de Alcalá de Henares (Madrid), en el que trabaja desde la asignatura de Religión para aumentar la implicación de los alumnos en proyectos de voluntariado y posibilitar su contacto con estudiantes de centros extranjeros.
María Jesús Rubio Berenguer, maestra de Lengua en el Colegio Santo Domingo Savio de Petrer (Alicante) ha sustituido los libros por juegos que implican la utilización de elementos lingüísticos y ha puesto en marcha actividades extraescolares en las que participan los estudiantes y sus familias.
Esther Sánchez Martínez es docente de Informática, Dibujo Técnico y Plástica en el Colegio Mirasur de Madrid, donde sus alumnos programan sus propios videojuegos a partir del contenido de varias asignaturas y desarrollan proyectos audiovisuales en colaboración con una residencia de mayores.
Fernando Trujillo Aparicio es profesor de Matemáticas y Tecnologías en el Colegio Jesús, María y José de Conil de la Frontera (Cádiz). En sus clases, imparte cada bloque de contenidos a través de videojuegos con retos cuya resolución implica tanto el uso de los nuevos conocimientos como la aplicación de los ya aprendidos.
Juan José Vergara Ramírez, docente de Formación Profesional (concretamente, de Educación Infantil) del IES Barrio de Bilbao de Madrid, está trabajando en la puesta en marcha de metodologías que requieren un papel activo de sus alumnos, a la vez que facilita el contacto de estos con estudiantes de otros niveles educativos y de otros centros de enseñanza (nacionales y extranjeros).
EL JURADO
Un jurado formado por cinco expertos en Educación e Innovación (José Antonio Marina, María Acaso, Fernando Trujillo, Alejandro Tiana y Carmen Delia García-Fuentes) valorará el perfil profesional de los candidatos a partir de las metodologías utilizadas en sus clases y de la creatividad de las ideas puestas en práctica en el aula. El ganador será premiado con 10.000 euros.
Un artículo de Jennifer Delgado Suárez , psicóloga.
La educación es una cosa seria. O al menos eso pensamos. Por eso en la mayoría de las escuelas los niños deben estar debidamente sentados en sus pupitres, serios y atentos a la lección que se está impartiendo. Sin embargo, quizá nos estamos equivocando, o no lo estamos haciendo tan bien como deberíamos. Quizá el aprendizaje debe ser algo más divertido, quizá entre dato y dato no vendría mal una sonrisa.
Reír es una cosa seria, sobre todo para los niños pequeños
Hace poco un equipo de psicólogos franceses de la Université Paris Ouest Nanterre La Défense descubrieron que el humor, además de ser una excelente medicina para el alma y el cuerpo, también contribuye a que los niños pequeños aprendan nuevas tareas.
Estos psicólogos idearon un experimento muy sencillo para evaluar si el uso del humor podría beneficiar la capacidad de aprendizaje de los niños. Trabajaron con pequeños de 18 meses. Primero estos niños se limitaban a observar a un adulto que estaba intentando agarrar un juguete lejos de su alcance, valiéndose de una herramienta.
En un grupo el adulto se limitó a jugar con el juguete cuando lo tuvo en su poder pero en el otro grupo el adulto arrojó el juguete inmediatamente al suelo haciendo muecas cómicas, lo que hizo que la mitad de los niños se rieran. Luego, se instó a los niños a que alcanzaran el juguete ellos mismos.
Se pudo apreciar el 93,7% de los niños que se habían reído de las travesuras de los adultos eran capaces de repetir la acción por sí mismos, usando la herramienta adecuadamente para alcanzar el juguete. Sin embargo, solo el 25% de los pequeños que no rieron o que formaban parte del grupo de control en el que no hubo ninguna situación hilarante fueron capaces de alcanzar el juguete, lo cual demuestra que muy pocos aprendieron a usar la herramienta.
¿Por qué la risa estimula el aprendizaje?
Es probable que la explicación se encuentre en el cerebro. De hecho, las emociones positivas, como la risa, aumentan los niveles de dopamina en el cerebro, activando el sistema de recompensa. Esto significa que la risa nos ayuda a motivarnos, lo cual tiene un efecto positivo en el aprendizaje.
De hecho, también se ha apreciado que la risa potencia la memoria facilitando la integración de la nueva información ya que hace que esta sea más memorable. Los adultos solemos recordar mejor los detalles de aquellas noticias que nos han presentado de forma hilarante, en comparación con la misma noticia leída en la prensa convencional.
Un experimento realizado en la Sam Houston State University en estudiantes universitarios comprobó este hecho. Los jóvenes podían recordar mejor los datos estadísticos y el material de estudio cuando en la conferencia el profesor incluía el sentido del humor.
No obstante, más allá de su efecto a nivel cerebral, el sentido del humor también es útil para el aprendizaje ya que contribuye a crear un ambiente más distendido, restándole tensión y ansiedad al momento de la lección. Además, hay pocas cosas más eficaces para captar la atención que el sentido del humor.
Los bebés aprenden el sentido del humor de sus padres
Enseñar de manera divertida no es una tarea exclusiva de los profesores, los padres también tienen su cuota de responsabilidad. Así lo demuestra un estudio llevado a cabo en la Universidad de New Hampshire en el que se desveló que entre los seis meses y el año de vida los pequeños aprenden lo que es divertido y lo que no observando la reacción de sus padres.
En práctica, a partir de los 6 meses los bebés comienzan a mirar a sus padres en la búsqueda de pistas sobre cómo reaccionar ante diferentes situaciones, para saber si se trata de una amenaza o pueden estar tranquilos.
A partir de ese momento los padres se convierten en una fuente de información emocional para sus hijos, son una especie de asesores del sentido del humor, por lo que al año de vida, si los padres ríen a menudo y enfrentan el mal tiempo con una sonrisa en los labios, es probable que sus hijos ya hayan aprendido a reaccionar de la misma manera.
Todo con moderación
Por supuesto, no se trata de convertir las escuelas en aulas para comediantes. De hecho, el exceso de humor puede interferir con el aprendizaje convirtiéndose en una distracción innecesaria que hace que los niños pierdan el hilo del contenido y no sean capaces de separar lo esencial de lo intrascendente.
Sin embargo, cuando el humor se utiliza en su justa medida es una herramienta excelente para convertir el aprendizaje en una experiencia realmente agradable.
Ver más
La educación es una cosa seria. O al menos eso pensamos. Por eso en la mayoría de las escuelas los niños deben estar debidamente sentados en sus pupitres, serios y atentos a la lección que se está impartiendo. Sin embargo, quizá nos estamos equivocando, o no lo estamos haciendo tan bien como deberíamos. Quizá el aprendizaje debe ser algo más divertido, quizá entre dato y dato no vendría mal una sonrisa.
Reír es una cosa seria, sobre todo para los niños pequeños
Hace poco un equipo de psicólogos franceses de la Université Paris Ouest Nanterre La Défense descubrieron que el humor, además de ser una excelente medicina para el alma y el cuerpo, también contribuye a que los niños pequeños aprendan nuevas tareas.
Estos psicólogos idearon un experimento muy sencillo para evaluar si el uso del humor podría beneficiar la capacidad de aprendizaje de los niños. Trabajaron con pequeños de 18 meses. Primero estos niños se limitaban a observar a un adulto que estaba intentando agarrar un juguete lejos de su alcance, valiéndose de una herramienta.
En un grupo el adulto se limitó a jugar con el juguete cuando lo tuvo en su poder pero en el otro grupo el adulto arrojó el juguete inmediatamente al suelo haciendo muecas cómicas, lo que hizo que la mitad de los niños se rieran. Luego, se instó a los niños a que alcanzaran el juguete ellos mismos.
Se pudo apreciar el 93,7% de los niños que se habían reído de las travesuras de los adultos eran capaces de repetir la acción por sí mismos, usando la herramienta adecuadamente para alcanzar el juguete. Sin embargo, solo el 25% de los pequeños que no rieron o que formaban parte del grupo de control en el que no hubo ninguna situación hilarante fueron capaces de alcanzar el juguete, lo cual demuestra que muy pocos aprendieron a usar la herramienta.
¿Por qué la risa estimula el aprendizaje?
Es probable que la explicación se encuentre en el cerebro. De hecho, las emociones positivas, como la risa, aumentan los niveles de dopamina en el cerebro, activando el sistema de recompensa. Esto significa que la risa nos ayuda a motivarnos, lo cual tiene un efecto positivo en el aprendizaje.
De hecho, también se ha apreciado que la risa potencia la memoria facilitando la integración de la nueva información ya que hace que esta sea más memorable. Los adultos solemos recordar mejor los detalles de aquellas noticias que nos han presentado de forma hilarante, en comparación con la misma noticia leída en la prensa convencional.
Un experimento realizado en la Sam Houston State University en estudiantes universitarios comprobó este hecho. Los jóvenes podían recordar mejor los datos estadísticos y el material de estudio cuando en la conferencia el profesor incluía el sentido del humor.
No obstante, más allá de su efecto a nivel cerebral, el sentido del humor también es útil para el aprendizaje ya que contribuye a crear un ambiente más distendido, restándole tensión y ansiedad al momento de la lección. Además, hay pocas cosas más eficaces para captar la atención que el sentido del humor.
Los bebés aprenden el sentido del humor de sus padres
Enseñar de manera divertida no es una tarea exclusiva de los profesores, los padres también tienen su cuota de responsabilidad. Así lo demuestra un estudio llevado a cabo en la Universidad de New Hampshire en el que se desveló que entre los seis meses y el año de vida los pequeños aprenden lo que es divertido y lo que no observando la reacción de sus padres.
En práctica, a partir de los 6 meses los bebés comienzan a mirar a sus padres en la búsqueda de pistas sobre cómo reaccionar ante diferentes situaciones, para saber si se trata de una amenaza o pueden estar tranquilos.
A partir de ese momento los padres se convierten en una fuente de información emocional para sus hijos, son una especie de asesores del sentido del humor, por lo que al año de vida, si los padres ríen a menudo y enfrentan el mal tiempo con una sonrisa en los labios, es probable que sus hijos ya hayan aprendido a reaccionar de la misma manera.
Todo con moderación
Por supuesto, no se trata de convertir las escuelas en aulas para comediantes. De hecho, el exceso de humor puede interferir con el aprendizaje convirtiéndose en una distracción innecesaria que hace que los niños pierdan el hilo del contenido y no sean capaces de separar lo esencial de lo intrascendente.
Sin embargo, cuando el humor se utiliza en su justa medida es una herramienta excelente para convertir el aprendizaje en una experiencia realmente agradable.
Deberes
LOS DEBERES QUE LES PUSO ESTA MAESTRA A SUS ALUMNOS LA HAN HECHO FAMOSÍSIMA EN LAS REDES SOCIALES
Unos padres compartieron en una página de Facebook la foto de las peculiares tareas escolares que la profesora pidió que completaran sus alumnos de 11 y 12 años el fin de semana previo a los exámenes finales de Primaria.
Cada poco tiempo ven la luz estudios que inciden en que los niños tienen que salir más a la calle y jugar y hay un debate abierto en muchos países sobre la excesiva carga de trabajo a la que tienen que enfrentarse los pequeños, cada vez más presionados y estresados.
Una maestra llamada Mrs. Thom ha tenido todo esto en cuenta a la hora de pedirles a sus alumnos que realicen tareas en el fin de semana. El pasado viernes, unos padres compartieron la lista de deberes de esta maestra para sus alumnos y en solo tres días ya tiene más de 74.000 'Me gusta', más de 67.100 compartidos y más de 3.000 comentarios.
¿Por qué? Porque la profesora invita a los niños a disfrutar del fin de semana jugando, corriendo, descansando... Resulta que esta semana, en el Reino Unido tiene lugar un temido examen: el de 6º de Primaria, que evalúa las destrezas y conocimientos adquiridos por los alumnos durante toda esta etapa, justo antes de pasar a Secundaria.
"Faltan solo un par de días antes del examen y es vital que uséis el tiempo sabiamente este fin de semana. Estos son vuestros deberes. Por favor, completad tantas tareas como sea posible y señalad que lo habéis hecho", escribe la profesora en la nota.
A continuación, enumera: "Salir a montar en bici o en moto, leer un libro, ver vuestro programa de televisión favorito, sonreír, comer gominolas o helado, pasar tiempo con la gente a la que queréis, reír hasta que os duela la barriga, salir y disfrutar del buen tiempo, ir a nadar o a pasear, invertir tiempo en vuestro hobby preferido, descansar, ver amigos, correr hasta que no podáis más, cocinar o hacer algo, tomar más gominolas o helado, jugar en el jardín, hacer algo que no hayáis hecho nunca antes".
La foto ha recibido miles de comentarios elogiosos, ya que esta maestra, que da clase en la escuela primaria Buckleberry de Reading (Inglaterra), es considerada por muchos 'una heroína'.
Ella, en lugar de meterles a los niños presión añadida y pedirles que estudien o que repasen, les invita a que descansen y jueguen. Un encuesta reciente en el Reino Unido asegura que el 90% de los niños que se presentan al examen final de Primaria sienten presión por hacerlo bien y están estresados por ello.
Por eso, tras recomendar estos particulares deberes, Mrs. Thom concluye con el siguiente mensaje:
"Si sentís que debéis hacerlo, podéis repasar, pero solo una hora como máximo. RECORDAD: Mrs Thom se encarga de preocuparse, vosotros no tenéis que hacerlo. Todos sois increíbles y no puedo estar más orgullosa de vosotros. QUE TENGÁIS UN FIN DE SEMANA FABULOSO".
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Cada poco tiempo ven la luz estudios que inciden en que los niños tienen que salir más a la calle y jugar y hay un debate abierto en muchos países sobre la excesiva carga de trabajo a la que tienen que enfrentarse los pequeños, cada vez más presionados y estresados.
Una maestra llamada Mrs. Thom ha tenido todo esto en cuenta a la hora de pedirles a sus alumnos que realicen tareas en el fin de semana. El pasado viernes, unos padres compartieron la lista de deberes de esta maestra para sus alumnos y en solo tres días ya tiene más de 74.000 'Me gusta', más de 67.100 compartidos y más de 3.000 comentarios.
¿Por qué? Porque la profesora invita a los niños a disfrutar del fin de semana jugando, corriendo, descansando... Resulta que esta semana, en el Reino Unido tiene lugar un temido examen: el de 6º de Primaria, que evalúa las destrezas y conocimientos adquiridos por los alumnos durante toda esta etapa, justo antes de pasar a Secundaria.
"Faltan solo un par de días antes del examen y es vital que uséis el tiempo sabiamente este fin de semana. Estos son vuestros deberes. Por favor, completad tantas tareas como sea posible y señalad que lo habéis hecho", escribe la profesora en la nota.
A continuación, enumera: "Salir a montar en bici o en moto, leer un libro, ver vuestro programa de televisión favorito, sonreír, comer gominolas o helado, pasar tiempo con la gente a la que queréis, reír hasta que os duela la barriga, salir y disfrutar del buen tiempo, ir a nadar o a pasear, invertir tiempo en vuestro hobby preferido, descansar, ver amigos, correr hasta que no podáis más, cocinar o hacer algo, tomar más gominolas o helado, jugar en el jardín, hacer algo que no hayáis hecho nunca antes".
La foto ha recibido miles de comentarios elogiosos, ya que esta maestra, que da clase en la escuela primaria Buckleberry de Reading (Inglaterra), es considerada por muchos 'una heroína'.
Ella, en lugar de meterles a los niños presión añadida y pedirles que estudien o que repasen, les invita a que descansen y jueguen. Un encuesta reciente en el Reino Unido asegura que el 90% de los niños que se presentan al examen final de Primaria sienten presión por hacerlo bien y están estresados por ello.
Por eso, tras recomendar estos particulares deberes, Mrs. Thom concluye con el siguiente mensaje:
"Si sentís que debéis hacerlo, podéis repasar, pero solo una hora como máximo. RECORDAD: Mrs Thom se encarga de preocuparse, vosotros no tenéis que hacerlo. Todos sois increíbles y no puedo estar más orgullosa de vosotros. QUE TENGÁIS UN FIN DE SEMANA FABULOSO".
Un artículo de Tania Merino Macchiavello.
Seis escuelas a lo largo de Chile se atrevieron a asumir el desafío que les planteó Fundación Chile: probar en sus aulas nuevas estrategias para abordar viejos problemas, como el desinterés por la lectura o la falta de trabajo en equipo. Estos fueron sus resultados.
Pasaron de ser una escuelita desconocida, perdida en la cordillera de la Costa en Ninhue, a tener figuración en los principales desfiles provinciales y hasta en los medios de comunicación y a aumentar considerablemente su matrícula gracias a la formación de su banda militar. La escuela Talhuán fue parte de los establecimientos que aceptaron el desafío de Fundación Chile para incorporar nuevas herramientas en su enseñanza.
El desafío se enmarcó en la iniciativa Red Lab Sur – Laboratorio de Innovaciones Educativas en Red, que en 2015 acercó nuevas metodologías nacionales e internacionales a más de 100 escuelas de todo el país. Su objetivo no sólo era refrescar la mirada de directivos escolares y docentes, sino también generar impacto en sus capacidades y prácticas cotidianas. "Quisimos observar la experiencia de estas escuelas para entender cuáles innovaciones educativas cobran sentido en sus contextos, que en su mayoría son altamente vulnerables", explica Francisca Petrovich, coordinadora de Red Lab Sur.
Su experiencia y la de otras cinco escuelas en contextos de vulnerabilidad fueron seguidas y registradas durante seis meses. Sus logros y aprendizajes serán recopilados por un libro, editado por Fundación Chile, que busca promover la adopción de estas prácticas en más establecimientos.
Lilian Muñoz, directora de la escuela, explicó que para los 45 niños y niñas que integran la banda "fue una forma de mejorar en disciplina y rendimiento, que les abrió las puertas a conocer otras realidades".
OTRAS EXPERIENCIAS
La falta de interés de los estudiantes por la lectura fue el punto de partida para que los directivos y profesores de la Escuela Roberto Matta buscaran nuevas estrategias. Así fue como decidieron aplicar la metodología "Pre-Textos" que conocieron en el taller que dictó en Fundación Chile Doris Sommer, académica de la Universidad de Harvard.
Esta metodología propone utilizar la lectura como punto de partida de un proceso creativo, donde el estudiante se apropia de un texto, lo interpreta desde su mirada y da origen a una nueva expresión artística. En el colegio decidieron implementar este enfoque en la clase de Historia, una de las que despertaba menor interés en el estudiantado.
El cambio de actitud de parte de las estudiantes fue evidente: en los recreos se acercaban al profesor de Historia para preguntarle dónde podían obtener más información sobre los temas que abordaban en la clase. "Había un interés por la actividad que se estaba haciendo, no como en una clase normal que uno le manda una tarea y después al otro día llega el cuaderno en blanco, porque la estudiante ni siquiera se acordó", destaca el profesor Andrés Arancibia.
ÁLGEBRA EN EL INVERNADERO
La percepción de que los estudiantes tenía pocas instancias para aplicar los conocimientos que adquirían, motivó a docentes y directivos del Colegio Nocedal, ubicado en la Población El Castillo de La Pintana, a implementar la metodología de Aprendizaje Basado en Proyectos en la asignatura de Matemáticas con los estudiantes de primero medio.
Para esto, construyeron un invernadero, donde los estudiantes debieron aplicar sus conocimientos de álgebra y estadística para hacer proyecciones productivas de comercialización del maíz que estaba cultivando en ese espacio. El objetivo era que comprendieran que las matemáticas son necesarias para desenvolverse en la vida cotidiana.
La implementación de este piloto fue evaluada positivamente por este colegio y planean comenzar a implementarla en otros niveles.
EDUCACIÓN AMBIENTAL
Con el objetivo de vincular la educación ambiental con los objetivos de la asignatura de Tecnología, la Escuela Dr. Jorge Otter Gabler implementó la metodología de Aprendizaje Basado en Proyectos. Este establecimiento tiene la particularidad de ser una institución intercultural bilingüe que atiende a estudiantes sordos, principalmente se sectores de escasos recursos.
La metodología, que fue aplicada en los niveles de 5°, 6° y 7° básico, motivó a los estudiantes a desarrollar sus propios proyectos ambientales, contemplando las etapas de investigación, planificación e implementación. Fue así como los estudiantes reutilizaron plástico para confeccionar maceteros, hicieron reciclaje de papel y construyeron objetos alimentados con energía solar.
"La iniciativa permitió a nuestros estudiantes sordos apropiarse de una problemática, darle un sentido al aprendizaje e impactar en la propia comunidad educativa, generando conciencia y prácticas más autónomas por medio de la elaboración de productos reales y concretos", explica Jesús Gahona, profesor a cargo de la implementación de la metodología.
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Seis escuelas a lo largo de Chile se atrevieron a asumir el desafío que les planteó Fundación Chile: probar en sus aulas nuevas estrategias para abordar viejos problemas, como el desinterés por la lectura o la falta de trabajo en equipo. Estos fueron sus resultados.
Pasaron de ser una escuelita desconocida, perdida en la cordillera de la Costa en Ninhue, a tener figuración en los principales desfiles provinciales y hasta en los medios de comunicación y a aumentar considerablemente su matrícula gracias a la formación de su banda militar. La escuela Talhuán fue parte de los establecimientos que aceptaron el desafío de Fundación Chile para incorporar nuevas herramientas en su enseñanza.
El desafío se enmarcó en la iniciativa Red Lab Sur – Laboratorio de Innovaciones Educativas en Red, que en 2015 acercó nuevas metodologías nacionales e internacionales a más de 100 escuelas de todo el país. Su objetivo no sólo era refrescar la mirada de directivos escolares y docentes, sino también generar impacto en sus capacidades y prácticas cotidianas. "Quisimos observar la experiencia de estas escuelas para entender cuáles innovaciones educativas cobran sentido en sus contextos, que en su mayoría son altamente vulnerables", explica Francisca Petrovich, coordinadora de Red Lab Sur.
Su experiencia y la de otras cinco escuelas en contextos de vulnerabilidad fueron seguidas y registradas durante seis meses. Sus logros y aprendizajes serán recopilados por un libro, editado por Fundación Chile, que busca promover la adopción de estas prácticas en más establecimientos.
Lilian Muñoz, directora de la escuela, explicó que para los 45 niños y niñas que integran la banda "fue una forma de mejorar en disciplina y rendimiento, que les abrió las puertas a conocer otras realidades".
OTRAS EXPERIENCIAS
La falta de interés de los estudiantes por la lectura fue el punto de partida para que los directivos y profesores de la Escuela Roberto Matta buscaran nuevas estrategias. Así fue como decidieron aplicar la metodología "Pre-Textos" que conocieron en el taller que dictó en Fundación Chile Doris Sommer, académica de la Universidad de Harvard.
Esta metodología propone utilizar la lectura como punto de partida de un proceso creativo, donde el estudiante se apropia de un texto, lo interpreta desde su mirada y da origen a una nueva expresión artística. En el colegio decidieron implementar este enfoque en la clase de Historia, una de las que despertaba menor interés en el estudiantado.
El cambio de actitud de parte de las estudiantes fue evidente: en los recreos se acercaban al profesor de Historia para preguntarle dónde podían obtener más información sobre los temas que abordaban en la clase. "Había un interés por la actividad que se estaba haciendo, no como en una clase normal que uno le manda una tarea y después al otro día llega el cuaderno en blanco, porque la estudiante ni siquiera se acordó", destaca el profesor Andrés Arancibia.
ÁLGEBRA EN EL INVERNADERO
La percepción de que los estudiantes tenía pocas instancias para aplicar los conocimientos que adquirían, motivó a docentes y directivos del Colegio Nocedal, ubicado en la Población El Castillo de La Pintana, a implementar la metodología de Aprendizaje Basado en Proyectos en la asignatura de Matemáticas con los estudiantes de primero medio.
Para esto, construyeron un invernadero, donde los estudiantes debieron aplicar sus conocimientos de álgebra y estadística para hacer proyecciones productivas de comercialización del maíz que estaba cultivando en ese espacio. El objetivo era que comprendieran que las matemáticas son necesarias para desenvolverse en la vida cotidiana.
La implementación de este piloto fue evaluada positivamente por este colegio y planean comenzar a implementarla en otros niveles.
EDUCACIÓN AMBIENTAL
Con el objetivo de vincular la educación ambiental con los objetivos de la asignatura de Tecnología, la Escuela Dr. Jorge Otter Gabler implementó la metodología de Aprendizaje Basado en Proyectos. Este establecimiento tiene la particularidad de ser una institución intercultural bilingüe que atiende a estudiantes sordos, principalmente se sectores de escasos recursos.
La metodología, que fue aplicada en los niveles de 5°, 6° y 7° básico, motivó a los estudiantes a desarrollar sus propios proyectos ambientales, contemplando las etapas de investigación, planificación e implementación. Fue así como los estudiantes reutilizaron plástico para confeccionar maceteros, hicieron reciclaje de papel y construyeron objetos alimentados con energía solar.
"La iniciativa permitió a nuestros estudiantes sordos apropiarse de una problemática, darle un sentido al aprendizaje e impactar en la propia comunidad educativa, generando conciencia y prácticas más autónomas por medio de la elaboración de productos reales y concretos", explica Jesús Gahona, profesor a cargo de la implementación de la metodología.
Un artículo de Jennifer Delgado Suárez, psicóloga.
A menudo los adultos deseamos que los niños estén quietos, que sean pacientes, que se entretengan sin juguetes a golpe de imaginación y que se mantengan limpios cuando salen a jugar. Sin embargo, la infancia no es eso. Los niños necesitan moverse, explorar, vivir aventuras, descubrir nuevos mundos… Y mientras lo hacen es normal que alboroten y se ensucien. De hecho, no es algo negativo y mucho menos patológico, es sinónimo de un niño sano y feliz.
ENSUCIARSE ES DIVERTIDO Y ESTIMULA AL APRENDIZAJE
Cuando los adultos ven a un niño con las manos y la ropa llena de tierra o de comida, piensan que no sabe comportarse y hasta puede que se pregunten: “¿Cómo los padres permiten que su hijo haga algo así? ¡No le han enseñado modales!”
A la mayoría de las personas no les pasa por la mente que ese niño está explorando y aprendiendo, que está conociendo el mundo que le rodea a través de sus sentidos. Que los niños no solo aprenden mirando sino también tocando y oliendo, y que ese aprendizaje es una de las experiencias más enriquecedoras que pueden vivir en su infancia.
Cuando los pequeños tienen la oportunidad de jugar con agua, arena, tierra, pintura, gelatina o harina, aprenden a través del tacto, y las sensaciones que experimentan son muy agradables ya que todo representa un descubrimiento excitante que estimula sus conexiones neuronales.
Dejar que se ensucien les permite experimentar con diferentes materiales y texturas. Estos juegos, en los que no hay reglas ni una manera “correcta” de jugar, estimulan la curiosidad natural de los niños y les ayudan a desarrollar una actitud más abierta ante las experiencias.
De hecho, un estudio realizado en De Montfort University desveló que los niños pequeños a los que se les permite manipular la comida desarrollan una actitud más abierta ante los nuevos sabores, por lo que terminan siguiendo una dieta más variada.
Por otra parte, psicólogos de la Universidad de Iowa también descubrieron que "jugar" con la comida tiene un efecto positivo en el aprendizaje. Estos investigadores analizaron a 72 niños y descubrieron que a los 16 meses de edad los pequeños a los que se les permitía tocar, oler e incluso tirar la comida habían aprendido antes las palabras relacionadas con estos alimentos y sus propiedades.
De hecho, se ha apreciado que los niños pequeños pueden identificar objetos sólidos con bastante facilidad, como una taza o una manzana, debido a que su tamaño y forma no varían. Sin embargo, los líquidos y las sustancias pastosas y pegajosas son más difíciles de identificar. Sin embargo, cuando a los pequeños se les dejaba manipular esas sustancias, aprendían a reconocerlas y a nombrarlas antes.
Por tanto, dejar que los niños se ensucien no solo es divertido para ellos y estimula una actitud más abierta ante la vida sino que también potencia el aprendizaje.
LOS NIÑOS QUE CRECEN EN AMBIENTES DEMASIADO LIMPIOS ENFERMAN MÁS
Jugar con la tierra, la arena, el barro y los animales no solo es beneficioso para el desarrollo cognitivo y emocional de los niños sino que también es saludable. Los científicos han demostrado que la frase de las abuelas “deja que coma tierra para que coja defensas” es razonable, mientras que el exceso de higiene es perjudicial.
Es obvio que ningún padre quiere que sus hijos se enfermen, pero estar unos minutos más con la ropa manchada de pintura, los zapatos con tierra o las manos llenas de masa no es el fin del mundo. Al contrario, es probable que los niños se sientan más felices y que su sistema inmunitario se active.
De hecho, no es extraño que en los últimos años hayan aumentado tanto las enfermedades autoinmunes, las alergias y otras patologías relacionadas con el sistema inmunitario, sobre todo en los países occidentales. Los científicos se preguntan si estos problemas se deben a que los niños ya no están expuestos a muchos agentes patógenos, de manera que su sistema inmunitario no termina de madurar por completo y se vuelve híper reactivo.
Esta teoría se conoce como la “hipótesis higienista” y afirma que crecer en ambientes excesivamente limpios, como los hogares urbanos donde no hay animales y muy pocos microorganismos, interfiere en la maduración de los mecanismos de defensa naturales, aumentando el riesgo a enfermar. Ahora un estudio llevado a cabo por un equipo internacional de científicos ha confirmado esta hipótesis.
Estos investigadores analizaron la microbiota intestinal; es decir, las comunidades de microorganismos que viven en el tracto digestivo, de 222 niños que nacieron y viven en Finlandia, Estonia (donde las enfermedades inmunes de aparición temprana son muy frecuentes) y Karelia (una república de la Federación Rusa donde los trastornos relacionados con el sistema inmunitario son menos comunes).
Los científicos analizaron los hábitos alimenticios, la salud y las costumbres de estos niños durante sus primeros 36 meses de vida. Así descubrieron que en la microbiota de los niños de Finlandia y Estonia predominaban las bacteroides, mientras que en la de los niños rusos había más bifidobacterias.
Los investigadores afirman que la presencia de bacteroides en el tracto digestivo humano es un fenómeno reciente, vinculado al estilo de vida occidental, y que estas bacterias, lejos de activar la respuesta inmunitaria, la reduce. De hecho, apreciaron que la microbiota compuesta en su mayoría por las bacteroides era más “silenciosa”; es decir, menos activa desde el punto de vista inmunitario.
Por tanto, ese exceso de higiene, dirigido a proteger a los niños, en realidad tiene el efecto contrario y hace que enfermen con mayor frecuencia, promoviendo la aparición de patologías que pueden acompañarles durante el resto de su vida.
NIÑOS MELINDROSOS Y LÍMITES A LA HORA DE JUGAR
Vale aclarar que a algunos niños les puede resultar desagradable el contacto con algunas sustancias. Por ejemplo, algunos niños pueden sentirse incómodos al tocar el barro o la arena. No debemos obligarles sino dejar que exploren a su propio ritmo y que elijan con qué prefieren jugar.
Por supuesto, no se trata de caer en los extremos exponiendo a los pequeños a riesgos innecesarios o permitiendo que ensucien la casa cada vez que les apetece. Se puede establecer un horario y un lugar para ese tipo de juegos.
Lo más importante es que los padres comprendan que dejar que los niños corran libres y exploren su entorno es saludable para su desarrollo psicológico y físico. No debemos apresar a los niños en el mundo de los adultos sino potenciar el juego libre, su capacidad de asombro y dejarles libertad para que exploren su entorno con los cinco sentidos, si así lo desean.
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A menudo los adultos deseamos que los niños estén quietos, que sean pacientes, que se entretengan sin juguetes a golpe de imaginación y que se mantengan limpios cuando salen a jugar. Sin embargo, la infancia no es eso. Los niños necesitan moverse, explorar, vivir aventuras, descubrir nuevos mundos… Y mientras lo hacen es normal que alboroten y se ensucien. De hecho, no es algo negativo y mucho menos patológico, es sinónimo de un niño sano y feliz.
ENSUCIARSE ES DIVERTIDO Y ESTIMULA AL APRENDIZAJE
Cuando los adultos ven a un niño con las manos y la ropa llena de tierra o de comida, piensan que no sabe comportarse y hasta puede que se pregunten: “¿Cómo los padres permiten que su hijo haga algo así? ¡No le han enseñado modales!”
A la mayoría de las personas no les pasa por la mente que ese niño está explorando y aprendiendo, que está conociendo el mundo que le rodea a través de sus sentidos. Que los niños no solo aprenden mirando sino también tocando y oliendo, y que ese aprendizaje es una de las experiencias más enriquecedoras que pueden vivir en su infancia.
Cuando los pequeños tienen la oportunidad de jugar con agua, arena, tierra, pintura, gelatina o harina, aprenden a través del tacto, y las sensaciones que experimentan son muy agradables ya que todo representa un descubrimiento excitante que estimula sus conexiones neuronales.
Dejar que se ensucien les permite experimentar con diferentes materiales y texturas. Estos juegos, en los que no hay reglas ni una manera “correcta” de jugar, estimulan la curiosidad natural de los niños y les ayudan a desarrollar una actitud más abierta ante las experiencias.
De hecho, un estudio realizado en De Montfort University desveló que los niños pequeños a los que se les permite manipular la comida desarrollan una actitud más abierta ante los nuevos sabores, por lo que terminan siguiendo una dieta más variada.
Por otra parte, psicólogos de la Universidad de Iowa también descubrieron que "jugar" con la comida tiene un efecto positivo en el aprendizaje. Estos investigadores analizaron a 72 niños y descubrieron que a los 16 meses de edad los pequeños a los que se les permitía tocar, oler e incluso tirar la comida habían aprendido antes las palabras relacionadas con estos alimentos y sus propiedades.
De hecho, se ha apreciado que los niños pequeños pueden identificar objetos sólidos con bastante facilidad, como una taza o una manzana, debido a que su tamaño y forma no varían. Sin embargo, los líquidos y las sustancias pastosas y pegajosas son más difíciles de identificar. Sin embargo, cuando a los pequeños se les dejaba manipular esas sustancias, aprendían a reconocerlas y a nombrarlas antes.
Por tanto, dejar que los niños se ensucien no solo es divertido para ellos y estimula una actitud más abierta ante la vida sino que también potencia el aprendizaje.
LOS NIÑOS QUE CRECEN EN AMBIENTES DEMASIADO LIMPIOS ENFERMAN MÁS
Jugar con la tierra, la arena, el barro y los animales no solo es beneficioso para el desarrollo cognitivo y emocional de los niños sino que también es saludable. Los científicos han demostrado que la frase de las abuelas “deja que coma tierra para que coja defensas” es razonable, mientras que el exceso de higiene es perjudicial.
Es obvio que ningún padre quiere que sus hijos se enfermen, pero estar unos minutos más con la ropa manchada de pintura, los zapatos con tierra o las manos llenas de masa no es el fin del mundo. Al contrario, es probable que los niños se sientan más felices y que su sistema inmunitario se active.
De hecho, no es extraño que en los últimos años hayan aumentado tanto las enfermedades autoinmunes, las alergias y otras patologías relacionadas con el sistema inmunitario, sobre todo en los países occidentales. Los científicos se preguntan si estos problemas se deben a que los niños ya no están expuestos a muchos agentes patógenos, de manera que su sistema inmunitario no termina de madurar por completo y se vuelve híper reactivo.
Esta teoría se conoce como la “hipótesis higienista” y afirma que crecer en ambientes excesivamente limpios, como los hogares urbanos donde no hay animales y muy pocos microorganismos, interfiere en la maduración de los mecanismos de defensa naturales, aumentando el riesgo a enfermar. Ahora un estudio llevado a cabo por un equipo internacional de científicos ha confirmado esta hipótesis.
Estos investigadores analizaron la microbiota intestinal; es decir, las comunidades de microorganismos que viven en el tracto digestivo, de 222 niños que nacieron y viven en Finlandia, Estonia (donde las enfermedades inmunes de aparición temprana son muy frecuentes) y Karelia (una república de la Federación Rusa donde los trastornos relacionados con el sistema inmunitario son menos comunes).
Los científicos analizaron los hábitos alimenticios, la salud y las costumbres de estos niños durante sus primeros 36 meses de vida. Así descubrieron que en la microbiota de los niños de Finlandia y Estonia predominaban las bacteroides, mientras que en la de los niños rusos había más bifidobacterias.
Los investigadores afirman que la presencia de bacteroides en el tracto digestivo humano es un fenómeno reciente, vinculado al estilo de vida occidental, y que estas bacterias, lejos de activar la respuesta inmunitaria, la reduce. De hecho, apreciaron que la microbiota compuesta en su mayoría por las bacteroides era más “silenciosa”; es decir, menos activa desde el punto de vista inmunitario.
Por tanto, ese exceso de higiene, dirigido a proteger a los niños, en realidad tiene el efecto contrario y hace que enfermen con mayor frecuencia, promoviendo la aparición de patologías que pueden acompañarles durante el resto de su vida.
NIÑOS MELINDROSOS Y LÍMITES A LA HORA DE JUGAR
Vale aclarar que a algunos niños les puede resultar desagradable el contacto con algunas sustancias. Por ejemplo, algunos niños pueden sentirse incómodos al tocar el barro o la arena. No debemos obligarles sino dejar que exploren a su propio ritmo y que elijan con qué prefieren jugar.
Por supuesto, no se trata de caer en los extremos exponiendo a los pequeños a riesgos innecesarios o permitiendo que ensucien la casa cada vez que les apetece. Se puede establecer un horario y un lugar para ese tipo de juegos.
Lo más importante es que los padres comprendan que dejar que los niños corran libres y exploren su entorno es saludable para su desarrollo psicológico y físico. No debemos apresar a los niños en el mundo de los adultos sino potenciar el juego libre, su capacidad de asombro y dejarles libertad para que exploren su entorno con los cinco sentidos, si así lo desean.
Docentes innovadores
POR QUÉ ELEGÍ EDUCAR EN UNA CÁRCEL DE MENORES: LA HISTORIA DE LA PROFESORA DIGNA CANEO
En Elige Educar siempre estamos atentos a las opiniones y experiencias de nuestros profesores. En esta ocasión, les compartimos un caso muy especial. Se trata del testimonio de Digna Caneo, profesora de educación básica, quien actualmente es jefa de UTP del Colegio Ruka Newen, de Limache, establecimiento que funciona dentro de un centro de reclusión cerrada del Sename, comúnmente conocidos como cárceles de menores. En estas líneas, Digna nos muestra la vocación por educar en uno de los contextos más difíciles como lo es el del encierro.
“Elegí educa porque creo en el cambio de las personas. Creo en que, a través de la educación, se puede aportar para que los estudiantes tengan la posibilidad de ver nuevas oportunidades que les ayuden a tomar decisiones sobre sus vidas. Mi vocación la descubrí trabajando con niños y jóvenes en situaciones vulnerables, que venían de contextos en donde la delincuencia, los malos tratos y el abandono eran parte de sus vidas. Cuando comencé a conocer esta realidad, que a veces es ajena, sentí la necesidad de trabajar de alguna forma con ellos. Fue en ese momento que decidí educar, ser profesora de Educación Básica.
Quise trabajar en un centro de régimen cerrado del Sename para intentar que los jóvenes que se encuentran en una situación vulnerable y de exclusión social puedan ver la educación como una vía de escape, con la intención de que en algún momento pudieran tener el conocimiento y el empoderamiento para tomar las mejores decisiones con respecto a su actuar. El trabajo con jóvenes privados de libertad presenta un desafío, pero te da la posibilidad de aprender de una cultura que es totalmente distinta a la que uno conoce como ´normal`, y que te pone a prueba día a día.
Nuestro proyecto educativo tiene diversos focos que se orientan al desarrollo y fortalecimiento de habilidades y del pensamiento crítico, en donde el contenido de cada una de las asignaturas, que se basa en el curriculum de adultos, se utiliza como el medio para lograr la participación ciudadana, el pensamiento crítico, la toma de decisiones y, por último, la reinserción escolar.
Una de las cosas con la que debemos trabajar diariamente es la motivación de los estudiantes y la deserción escolar. Sabemos que muchos de los jóvenes que ingresan a centros reclusión del Sename han pasado mucho tiempo sin asistir a una institución educativa, lo que se traduce frecuentemente en frustración escolar. Es por esto que encantar y reencantar a cada uno de los estudiantes es una tarea diaria.
Como profesores, pretendemos como fin último la participación ciudadana y el desarrollo de competencias que favorezcan una adecuación a los diversos contextos a los que se enfrentan al egresar del CIP-CRC (Centro de Internación Provisoria y Centro de Régimen Cerrado) de Limache, y así propiciar la reinserción educativa.
Desde que el colegio trabaja dentro de este centro (2013), existen pocos casos de estudiantes que han podido seguir con su educación superior, esto por las dificultades económicas que en general estos jóvenes atraviesan. Existen un par de jóvenes que han podido tener la experiencia de participar de instituciones de educación superior, sin embargo, desertan de estos procesos dado a situaciones personales, y en su mayoría a razones económicas.
Por otro lado, profesionales de Sename y del colegio, hemos podido presenciar el orgullo de muchas familias y jóvenes que han logrado con mucho esfuerzo terminar con su educación media, lo que les permite poder acceder a ofertas laborales cuando están en libertad.
Los jóvenes privados de libertad son personas que, en algún momento de sus vidas, sufrieron la vulneración de sus derechos fundamentales (relacionados con familia y escuela). Por esto, es labor de nuestra sociedad que estos jóvenes, que en su mayoría son excluidos y discriminados, se reinserten social y educativamente. Los contextos de encierro son espacios que no podemos desconocer; son lugares donde es importante el trabajo educativo relacionado con el desarrollo integral del ser humano. Sin duda, son jóvenes que necesitan atención especializada y, por supuesto, que reciban -al igual que todos los niños y jóvenes de nuestro país- una educación de calidad.
Es importante que podamos propiciar una educación para todos y todas, que sea inclusiva y que no discrimine por estatus social o económico. Que sea equitativa y que promueva el desarrollo integral de las personas. Es por esto que hoy la educación en contextos de encierro adquiere importancia, porque significa comenzar a promover cambios y a generar movimiento en las personas. Es creer en los cambios y procurar no olvidar que siempre se puede”.
¿Qué opinas de la labor que hace Digna y tanto otros profesores por educar a jóvenes privados de libertad? Comenta con nosotros.
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“Elegí educa porque creo en el cambio de las personas. Creo en que, a través de la educación, se puede aportar para que los estudiantes tengan la posibilidad de ver nuevas oportunidades que les ayuden a tomar decisiones sobre sus vidas. Mi vocación la descubrí trabajando con niños y jóvenes en situaciones vulnerables, que venían de contextos en donde la delincuencia, los malos tratos y el abandono eran parte de sus vidas. Cuando comencé a conocer esta realidad, que a veces es ajena, sentí la necesidad de trabajar de alguna forma con ellos. Fue en ese momento que decidí educar, ser profesora de Educación Básica.
Quise trabajar en un centro de régimen cerrado del Sename para intentar que los jóvenes que se encuentran en una situación vulnerable y de exclusión social puedan ver la educación como una vía de escape, con la intención de que en algún momento pudieran tener el conocimiento y el empoderamiento para tomar las mejores decisiones con respecto a su actuar. El trabajo con jóvenes privados de libertad presenta un desafío, pero te da la posibilidad de aprender de una cultura que es totalmente distinta a la que uno conoce como ´normal`, y que te pone a prueba día a día.
Nuestro proyecto educativo tiene diversos focos que se orientan al desarrollo y fortalecimiento de habilidades y del pensamiento crítico, en donde el contenido de cada una de las asignaturas, que se basa en el curriculum de adultos, se utiliza como el medio para lograr la participación ciudadana, el pensamiento crítico, la toma de decisiones y, por último, la reinserción escolar.
Una de las cosas con la que debemos trabajar diariamente es la motivación de los estudiantes y la deserción escolar. Sabemos que muchos de los jóvenes que ingresan a centros reclusión del Sename han pasado mucho tiempo sin asistir a una institución educativa, lo que se traduce frecuentemente en frustración escolar. Es por esto que encantar y reencantar a cada uno de los estudiantes es una tarea diaria.
Como profesores, pretendemos como fin último la participación ciudadana y el desarrollo de competencias que favorezcan una adecuación a los diversos contextos a los que se enfrentan al egresar del CIP-CRC (Centro de Internación Provisoria y Centro de Régimen Cerrado) de Limache, y así propiciar la reinserción educativa.
Desde que el colegio trabaja dentro de este centro (2013), existen pocos casos de estudiantes que han podido seguir con su educación superior, esto por las dificultades económicas que en general estos jóvenes atraviesan. Existen un par de jóvenes que han podido tener la experiencia de participar de instituciones de educación superior, sin embargo, desertan de estos procesos dado a situaciones personales, y en su mayoría a razones económicas.
Por otro lado, profesionales de Sename y del colegio, hemos podido presenciar el orgullo de muchas familias y jóvenes que han logrado con mucho esfuerzo terminar con su educación media, lo que les permite poder acceder a ofertas laborales cuando están en libertad.
Los jóvenes privados de libertad son personas que, en algún momento de sus vidas, sufrieron la vulneración de sus derechos fundamentales (relacionados con familia y escuela). Por esto, es labor de nuestra sociedad que estos jóvenes, que en su mayoría son excluidos y discriminados, se reinserten social y educativamente. Los contextos de encierro son espacios que no podemos desconocer; son lugares donde es importante el trabajo educativo relacionado con el desarrollo integral del ser humano. Sin duda, son jóvenes que necesitan atención especializada y, por supuesto, que reciban -al igual que todos los niños y jóvenes de nuestro país- una educación de calidad.
Es importante que podamos propiciar una educación para todos y todas, que sea inclusiva y que no discrimine por estatus social o económico. Que sea equitativa y que promueva el desarrollo integral de las personas. Es por esto que hoy la educación en contextos de encierro adquiere importancia, porque significa comenzar a promover cambios y a generar movimiento en las personas. Es creer en los cambios y procurar no olvidar que siempre se puede”.
¿Qué opinas de la labor que hace Digna y tanto otros profesores por educar a jóvenes privados de libertad? Comenta con nosotros.
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Una profesora de la Universidad Nacional Arturo Jaureche (UNAJ), repartió este volante a sus alumnos antes de tomar un examen. En el mismo alienta a sus alumnos y les da tranquilidad. Un gran ejemplo.
"Tenemos tiempo de sobra", arranca diciendo. "Se pregunta solo lo trabajado, confíe en sus recursos, usted sabe", continúa.
"Está aquí por su voluntad, confíe", y el cierre es excelente.
Miralo:
"Leer antes de comenzar el parcial:
* En lo posible haga letra clara, escriba tranquilo/a y pausado/a. TENEMOS TIEMPO DE SOBRA.
* Las preguntas son teóricas, responden a lo que trabajamos en clase. SE PREGUNTA SÓLO LO TRABAJADO, CONFÍE EN SUS RECURSOS, UD. SABE.
* Los exámenes son sólo fotos de su conocimiento al momento presente. USTED DARÁ LO MEJOR DE SÍ SIN NINGUNA DUDA. ESTÁ AQUÍ POR SU VOLUNTAD, NO SE PRESIONES. CONFÍE.
* Y RECUERDE: Esto es un parcial, simplemente está escribiendo sobre lo que sabe de lo que ha elegido estudiar. TODO VA A ESTAR BIEN."
Ver más
Una profesora de la Universidad Nacional Arturo Jaureche (UNAJ), repartió este volante a sus alumnos antes de tomar un examen. En el mismo alienta a sus alumnos y les da tranquilidad. Un gran ejemplo.
"Tenemos tiempo de sobra", arranca diciendo. "Se pregunta solo lo trabajado, confíe en sus recursos, usted sabe", continúa.
"Está aquí por su voluntad, confíe", y el cierre es excelente.
Miralo:
"Leer antes de comenzar el parcial:
* En lo posible haga letra clara, escriba tranquilo/a y pausado/a. TENEMOS TIEMPO DE SOBRA.
* Las preguntas son teóricas, responden a lo que trabajamos en clase. SE PREGUNTA SÓLO LO TRABAJADO, CONFÍE EN SUS RECURSOS, UD. SABE.
* Los exámenes son sólo fotos de su conocimiento al momento presente. USTED DARÁ LO MEJOR DE SÍ SIN NINGUNA DUDA. ESTÁ AQUÍ POR SU VOLUNTAD, NO SE PRESIONES. CONFÍE.
* Y RECUERDE: Esto es un parcial, simplemente está escribiendo sobre lo que sabe de lo que ha elegido estudiar. TODO VA A ESTAR BIEN."
Unos 200 colegios públicos españoles han incorporado el 'mindfulness' al horario escolar. Es una práctica de raíces budistas pero sin sus connotaciones religiosas. Consiste en tomar consciencia del momento presente, atendiendo a las emociones. En clases con alumnos cada vez más hiperestimulados, les permite parar 15 minutos al día. Niños y profesores del colegio Ramiro Soláns de Zaragoza lo practican después del recreo.
Cuando los alumnos de 3º de Infantil del colegio público Ramiro Soláns de Zaragoza regresan del recreo, se sientan en el suelo del aula formando un círculo. Adoptan la postura del loto, cierran los ojos, respiran hondo y elevan las palmas de las manos al estilo hindú mientras cantan un mantra que dice: «Sa, re, sa, sa. Sa, re, sa, sa». Suena el sitar. En la pizarra digital, una flor abre y cierra sus pétalos desde YouTube. Nazaret, Rayan y Emilia tienen sólo cinco años, pero mantienen la concentración como yoguis experimentados.
- ¿A qué nos está ayudando esta canción? -La maestra, Noelia Pes, les pregunta con voz muy suave.
- A estar tranquilos y relajados -responde la pequeña Ainara.
- ¿Y, si estamos relajados, qué podemos hacer?
- Trabajar bien, estar calladitos, portarnos bien con la profe y con todos los demás, no pegar.
En esta escuela del humilde barrio de Oliver, todos y cada uno de los 200 niños practican mindfulness con los profesores durante 15 minutos cada día después de subir del patio. Llevan tres cursos utilizando esta herramienta que tiene su origen en la meditación budista, pero sin sus connotaciones religiosas. El mindfulness o atención plena va de tomar consciencia del tiempo presente, atendiendo a pensamientos, emociones y sensaciones corporales con una actitud de curiosidad, interés y aceptación. Sin juzgar. Disfrutando del aquí y ahora. Aceptando la realidad tal cual es.
Entre los adultos existe todo un boom en torno a esta práctica popularizada en Occidente por el médico Jon Kabat-Zinn, de la Universidad de Massachusetts, que en 1978 comenzó a aplicarla a pacientes con estrés crónico. Estudios científicos aseguran que los meditadores tienen mayor densidad neuronal, son más felices y menos propensos a sufrir depresión. Empresas como Google dan formación específica a sus empleados y hasta el director de cine David Lynch ha creado una fundación dedicada a la meditación.
Desde hace unos pocos años, el mindfulness también se pone en práctica en algunos colegios e institutos españoles, tanto públicos como privados. El Gobierno de Canarias ha sido pionero al implantar por primera vez este curso una asignatura obligatoria y evaluable que se llama Educación Emocional y que incluye un poco de mindfulness en el plan de estudios. Se da de forma integral en el instituto Arico y en el colegio público San Andrés, en Tenerife, y en el colegio Ciudad del Campo, en Gran Canaria.
En otras autonomías hay iniciativas como el Programa Aulas Felices en Aragón, el Programa Treva en Cataluña o Escuelas Conscientes en la Comunidad Valenciana. En Madrid, se han impartido talleres en algunos colegios públicos y está presente en centros privados que utilizan pedagogías alternativas. Hay también un par de escuelas rurales en Navarra que lo siguen.
Pero su grado de expansión en España es aún muy reducido. Los expertos calculan que se imparte de forma sistematizada en unos 200 centros públicos, lo que viene a suponer en torno al 1% del total. Aún estamos lejos de la expansión que ha experimentado el mindfulness en EEUU, en Holanda o Australia, donde el Gobierno quiere incluirlo en el currículo escolar para 2020.
En el colegio Ramiro Soláns de Zaragoza no forma parte del currículo, pero sí se ha introducido dentro de la jornada lectiva. Los 20 tutores han recibido formación específica y hasta hay madres y padres que lo practican en un centro en el que el 60% de las familias son de etnia gitana y el 35%, de origen inmigrante.
La directora, Rosa Llorente, cuenta que su objetivo es que «el colegio sea un espacio de calma, de sosiego» donde los críos dejen a la entrada los problemas que puedan traer de casa. Antes formaban un grupo «muy movido» en el que había niños con «un comportamiento muy difícil por sus circunstancias personales, familiares, sociales o económicas». Pero, tras la puesta en marcha de un proyecto de transformación en el que se ha introducido el mindfulness, entre otras herramientas, la situación se ha dado la vuelta de forma significativa.
Llorente muestra unas gráficas que indican que, si en el curso 2006/2007, un 30% de los críos presentaba problemas de conflictividad, en 2013/2014 el porcentaje ha caído hasta el 7%. El absentismo escolar se ha reducido en un 70%. Y la proporción de alumnos que pasa al instituto con todas las asignaturas aprobadas ha crecido del 5% al 70%.
«Los niños dicen que se sienten más a gusto y que, después de esta actividad, están más tranquilos para realizar el trabajo. El momento de la relajación se ha convertido en un momento de placidez y de mirarse a sí mismos. Aprenden a respetar al otro. Les ayuda a tomar los aspectos positivos del silencio y de la paz. Algunos trasladan lo aprendido a sus casas, y también a su vida», enumera Llorente.
Su colegio sigue el Programa Aulas Felices, un método basado en la psicología positiva que mezcla el mindfulness con la educación en las fortalezas de Peterson y Seligman. Su creador, el maestro de Pedagogía Terapéutica Ricardo Arguís, ha hecho una recopilación de la literatura científica existente acerca de los efectos cognitivos sociales y psicológicos que tiene el mindfulness en el alumnado de Primaria y Secundaria. Lo que dicen las investigaciones, en síntesis, es que los estudiantes mejoran su concentración y su atención; regulan sus emociones; disminuyen la ansiedad, el estrés y la fatiga; refuerzan su autoestima y sus habilidades sociales; potencian la empatía, y adquieren mayores destrezas académicas.
«El mindfulness se puede aplicar en cualquier situación, en momentos en que se exige concentración o cuando hay un conflicto en clase. Con ejercicios cortos es suficiente», expresa Arguís. «Si logramos que los niños, desde edades tempranas, aprendan a vivir de un modo más consciente, estaremos educando a personas libres y responsables, más capaces de ser dueñas de su propia vida y de ser felices».
Comparte su opinión Ausiàs Cebolla, profesor del Departamento de Psicología Básica, Clínica y Psicobiología de la Universidad Jaume I de Castellón e investigador en mindfulness en España. «Es una herramienta muy potente para que los niños empiecen a tomar consciencia de lo que les pasa. Ayuda a regular las emociones y a entrenar la atención. Una profesora me contó que hacía cinco minutos de mindfulness antes de empezar la clase. En una ocasión faltó al colegio y los niños, que ya habían cogido el hábito, tenían tantas ganas de hacerlo que se organizaron para que la meditación la dirigiera ese día una de las alumnas».
Pero, ¿por qué necesitan meditar los niños? ¿Tan estresados están? «Han cambiado mucho las expectativas que tienen los padres en relación a sus hijos. Valoran más que saquen buenas notas que el hecho de que aprendan a frustrarse, a resolver un conflicto o a saber disfrutar de lo que están haciendo. Los críos están hiperestimulados y estresados, son un reflejo de los padres. Estamos viendo que en las aulas se muestran muy inquietos y desmontan la clase. Hay que hacer cambios para que todos estemos mejor. Es importante introducir momentos de parada, enseñar a que se puede estar en silencio sin hacer nada», responde Marta Lasala, maestra logopeda que da clase en dos colegios públicos rurales de Navarra (San Veremundo, en Villatuerta, y San Salvador, en Oteiza) en los que se hace mindfulness.
Existe la opinión bastante extendida entre docentes y padres de que los niños de hoy en día, con tantos móviles y vídeojuegos, están expuestos a miles de estímulos que alteran su concentración. Tienen demasiada información y no aciertan a procesarla bien. Muchos son chicos multitarea que hacen varias cosas a la vez: desayunan mientras ven la tele; se lavan los dientes mientras chatean con sus amigos. Les falta disfrutar sin más del momento presente.
¿Y cómo se hace? El mindfulness es meditación, pero también más cosas. En el colegio Ramiro Soláns, por ejemplo, los niños se dan masajes por turnos para relajarse y para «aprender a respetar al otro». También llaman al guerrero: el alumno se pone las manos en la tripa y sopla fuerte hacia fuera, con los ojos cerrados. Así expulsa la rabia y es consciente de ella.
Está también el famoso saboreo, la actividad de mindfulness que más les gusta a los niños. La profesora Amparo Jiménez reparte monedas de chocolate en la clase de 4º de Primaria. Se trata de descubrir la textura, el olor y el sabor del dulce y no pensar en otra cosa más que en las sensaciones que transmite. Primero tocan la moneda con los ojos cerrados, aprecian la forma y la rugosidad del envoltorio. Después la huelen, se la acercan a la boca, retrasan el momento de probarla... Se concentran en lo que están haciendo. Mordisquean un trozo y notan cómo se va volviendo más blando. El proceso puede durar una eternidad: cinco minutos. Cuando la música cesa, estos niños de 10 años hablan de lo que han sentido. «Habéis comido chocolate miles de veces, pero ¿a que no habíais sido conscientes antes del sabor que tenía?», les pregunta la maestra.
Todos los alumnos coinciden en que es el mejor chocolate que han probado en su vida.
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Cuando los alumnos de 3º de Infantil del colegio público Ramiro Soláns de Zaragoza regresan del recreo, se sientan en el suelo del aula formando un círculo. Adoptan la postura del loto, cierran los ojos, respiran hondo y elevan las palmas de las manos al estilo hindú mientras cantan un mantra que dice: «Sa, re, sa, sa. Sa, re, sa, sa». Suena el sitar. En la pizarra digital, una flor abre y cierra sus pétalos desde YouTube. Nazaret, Rayan y Emilia tienen sólo cinco años, pero mantienen la concentración como yoguis experimentados.
- ¿A qué nos está ayudando esta canción? -La maestra, Noelia Pes, les pregunta con voz muy suave.
- A estar tranquilos y relajados -responde la pequeña Ainara.
- ¿Y, si estamos relajados, qué podemos hacer?
- Trabajar bien, estar calladitos, portarnos bien con la profe y con todos los demás, no pegar.
En esta escuela del humilde barrio de Oliver, todos y cada uno de los 200 niños practican mindfulness con los profesores durante 15 minutos cada día después de subir del patio. Llevan tres cursos utilizando esta herramienta que tiene su origen en la meditación budista, pero sin sus connotaciones religiosas. El mindfulness o atención plena va de tomar consciencia del tiempo presente, atendiendo a pensamientos, emociones y sensaciones corporales con una actitud de curiosidad, interés y aceptación. Sin juzgar. Disfrutando del aquí y ahora. Aceptando la realidad tal cual es.
Entre los adultos existe todo un boom en torno a esta práctica popularizada en Occidente por el médico Jon Kabat-Zinn, de la Universidad de Massachusetts, que en 1978 comenzó a aplicarla a pacientes con estrés crónico. Estudios científicos aseguran que los meditadores tienen mayor densidad neuronal, son más felices y menos propensos a sufrir depresión. Empresas como Google dan formación específica a sus empleados y hasta el director de cine David Lynch ha creado una fundación dedicada a la meditación.
Desde hace unos pocos años, el mindfulness también se pone en práctica en algunos colegios e institutos españoles, tanto públicos como privados. El Gobierno de Canarias ha sido pionero al implantar por primera vez este curso una asignatura obligatoria y evaluable que se llama Educación Emocional y que incluye un poco de mindfulness en el plan de estudios. Se da de forma integral en el instituto Arico y en el colegio público San Andrés, en Tenerife, y en el colegio Ciudad del Campo, en Gran Canaria.
En otras autonomías hay iniciativas como el Programa Aulas Felices en Aragón, el Programa Treva en Cataluña o Escuelas Conscientes en la Comunidad Valenciana. En Madrid, se han impartido talleres en algunos colegios públicos y está presente en centros privados que utilizan pedagogías alternativas. Hay también un par de escuelas rurales en Navarra que lo siguen.
Pero su grado de expansión en España es aún muy reducido. Los expertos calculan que se imparte de forma sistematizada en unos 200 centros públicos, lo que viene a suponer en torno al 1% del total. Aún estamos lejos de la expansión que ha experimentado el mindfulness en EEUU, en Holanda o Australia, donde el Gobierno quiere incluirlo en el currículo escolar para 2020.
En el colegio Ramiro Soláns de Zaragoza no forma parte del currículo, pero sí se ha introducido dentro de la jornada lectiva. Los 20 tutores han recibido formación específica y hasta hay madres y padres que lo practican en un centro en el que el 60% de las familias son de etnia gitana y el 35%, de origen inmigrante.
La directora, Rosa Llorente, cuenta que su objetivo es que «el colegio sea un espacio de calma, de sosiego» donde los críos dejen a la entrada los problemas que puedan traer de casa. Antes formaban un grupo «muy movido» en el que había niños con «un comportamiento muy difícil por sus circunstancias personales, familiares, sociales o económicas». Pero, tras la puesta en marcha de un proyecto de transformación en el que se ha introducido el mindfulness, entre otras herramientas, la situación se ha dado la vuelta de forma significativa.
Llorente muestra unas gráficas que indican que, si en el curso 2006/2007, un 30% de los críos presentaba problemas de conflictividad, en 2013/2014 el porcentaje ha caído hasta el 7%. El absentismo escolar se ha reducido en un 70%. Y la proporción de alumnos que pasa al instituto con todas las asignaturas aprobadas ha crecido del 5% al 70%.
«Los niños dicen que se sienten más a gusto y que, después de esta actividad, están más tranquilos para realizar el trabajo. El momento de la relajación se ha convertido en un momento de placidez y de mirarse a sí mismos. Aprenden a respetar al otro. Les ayuda a tomar los aspectos positivos del silencio y de la paz. Algunos trasladan lo aprendido a sus casas, y también a su vida», enumera Llorente.
Su colegio sigue el Programa Aulas Felices, un método basado en la psicología positiva que mezcla el mindfulness con la educación en las fortalezas de Peterson y Seligman. Su creador, el maestro de Pedagogía Terapéutica Ricardo Arguís, ha hecho una recopilación de la literatura científica existente acerca de los efectos cognitivos sociales y psicológicos que tiene el mindfulness en el alumnado de Primaria y Secundaria. Lo que dicen las investigaciones, en síntesis, es que los estudiantes mejoran su concentración y su atención; regulan sus emociones; disminuyen la ansiedad, el estrés y la fatiga; refuerzan su autoestima y sus habilidades sociales; potencian la empatía, y adquieren mayores destrezas académicas.
«El mindfulness se puede aplicar en cualquier situación, en momentos en que se exige concentración o cuando hay un conflicto en clase. Con ejercicios cortos es suficiente», expresa Arguís. «Si logramos que los niños, desde edades tempranas, aprendan a vivir de un modo más consciente, estaremos educando a personas libres y responsables, más capaces de ser dueñas de su propia vida y de ser felices».
Comparte su opinión Ausiàs Cebolla, profesor del Departamento de Psicología Básica, Clínica y Psicobiología de la Universidad Jaume I de Castellón e investigador en mindfulness en España. «Es una herramienta muy potente para que los niños empiecen a tomar consciencia de lo que les pasa. Ayuda a regular las emociones y a entrenar la atención. Una profesora me contó que hacía cinco minutos de mindfulness antes de empezar la clase. En una ocasión faltó al colegio y los niños, que ya habían cogido el hábito, tenían tantas ganas de hacerlo que se organizaron para que la meditación la dirigiera ese día una de las alumnas».
Pero, ¿por qué necesitan meditar los niños? ¿Tan estresados están? «Han cambiado mucho las expectativas que tienen los padres en relación a sus hijos. Valoran más que saquen buenas notas que el hecho de que aprendan a frustrarse, a resolver un conflicto o a saber disfrutar de lo que están haciendo. Los críos están hiperestimulados y estresados, son un reflejo de los padres. Estamos viendo que en las aulas se muestran muy inquietos y desmontan la clase. Hay que hacer cambios para que todos estemos mejor. Es importante introducir momentos de parada, enseñar a que se puede estar en silencio sin hacer nada», responde Marta Lasala, maestra logopeda que da clase en dos colegios públicos rurales de Navarra (San Veremundo, en Villatuerta, y San Salvador, en Oteiza) en los que se hace mindfulness.
Existe la opinión bastante extendida entre docentes y padres de que los niños de hoy en día, con tantos móviles y vídeojuegos, están expuestos a miles de estímulos que alteran su concentración. Tienen demasiada información y no aciertan a procesarla bien. Muchos son chicos multitarea que hacen varias cosas a la vez: desayunan mientras ven la tele; se lavan los dientes mientras chatean con sus amigos. Les falta disfrutar sin más del momento presente.
¿Y cómo se hace? El mindfulness es meditación, pero también más cosas. En el colegio Ramiro Soláns, por ejemplo, los niños se dan masajes por turnos para relajarse y para «aprender a respetar al otro». También llaman al guerrero: el alumno se pone las manos en la tripa y sopla fuerte hacia fuera, con los ojos cerrados. Así expulsa la rabia y es consciente de ella.
Está también el famoso saboreo, la actividad de mindfulness que más les gusta a los niños. La profesora Amparo Jiménez reparte monedas de chocolate en la clase de 4º de Primaria. Se trata de descubrir la textura, el olor y el sabor del dulce y no pensar en otra cosa más que en las sensaciones que transmite. Primero tocan la moneda con los ojos cerrados, aprecian la forma y la rugosidad del envoltorio. Después la huelen, se la acercan a la boca, retrasan el momento de probarla... Se concentran en lo que están haciendo. Mordisquean un trozo y notan cómo se va volviendo más blando. El proceso puede durar una eternidad: cinco minutos. Cuando la música cesa, estos niños de 10 años hablan de lo que han sentido. «Habéis comido chocolate miles de veces, pero ¿a que no habíais sido conscientes antes del sabor que tenía?», les pregunta la maestra.
Todos los alumnos coinciden en que es el mejor chocolate que han probado en su vida.
Suena el despertador. Son las siete de la mañana. De nuevo lunes, de nuevo las prisas. En casa de los padres de María y Pablo los últimos pitidos del contestador se unen a las voces altas que desde primera hora de la mañana dejan claro que no hay tiempo para nada. Hay que asearse y vestirse rápido, desayunar rápido, coger algo de almuerzo rápido y salir rápidamente hacia el colegio para que los papás no lleguen tarde al trabajo. Todo es rápido. Siempre es rápido.
Y, en el colegio, más de lo mismo. Materia tras materia, con un sinfín de deberes y con la agenda escolar siempre pendiente del próximo examen y con los dedos cruzados para que no coincida con el campeonato de fútbol, la exhibición de baile o la visita al dentista. Así es el día a día de miles de niños y miles de padres, eso en el mejor de los casos, claro está. Y es que aún peor sería que los papás no tuvieran trabajo o que los niños no tuvieran papás que les llevaran a golpe de reloj.
GESTIONAR LAS EMOCIONES
"Tenemos alumnos con una elevada formación en contenidos académicos pero que no saben cómo gestionar sus emociones, en su gran mayoría tienen las necesidades cubiertas y nadie les ha invitado a reflexionar, a pensar más allá, a ponerse en la piel del otro, más bien se fomenta la competitividad". Quien habla es Carolina Benedito, jefe de estudios de Secundaria del centro educativo Ramiro Izquierdo de Castellón, uno de los cientos de colegios de la Comunidad Valenciana y del resto de España que están tomando conciencia de la necesidad de fomentar la reflexión y la educación en valores para conseguir una educación de excelencia.
"Nuestro centro no es para nada conflictivo, todo lo contrario, pero se percibe esa mayor agresividad por parte de los alumnos, esa competencia que se traslada a todos los ámbitos y, sobre todo, esa prisa que prima en todas las acciones cotidianas de los niños y la falta de reflexión y de empatía con todo lo que ocurre a su alrededor", explica María Jesús Meseguer, también docente del centro Ramiro Izquierdo de Castellón.
Ambas son sólo dos ejemplos de los muchos que florecen en centros educativos de toda índole, públicos y privados. Maestros y profesores que se empeñan en llevar la contraria con ejemplos diarios a las críticas que en los últimos años se vierten contra los profesionales de la educación al calor de los efectos de una crisis económica que saca, en demasiadas ocasiones, lo peor de uno mismo.
CONGRESO DE EXCELENCIA
"Queríamos aportar algo nuevo, como muchísimos otros compañeros, y le comentamos al director del centro la posibilidad de asistir al Congreso de la Excelencia en Educación que se celebraba en Madrid", explica Benedito. "El director nos apoyó en todo, y en eso estamos trabajando el conjunto del colegio, en educar en contenidos, pero también en conciencia y en corazón", apunta la jefe de estudios de Secundaria.
De este modo, siguiendo los valores de consciencia y compromiso, los alumnos de 3 a 16 años del colegio Ramiro Izquierdo de Castellón se unieron también en la colaboración de un gran proyecto solidario basado en el cuento Tú también puedes de la escritora Anna Llauradó. Como el petirrojo que protagoniza esta historia, cada alumno ha participado, gota a gota, en este proyecto solidario.
La esencia de Tú también puedes se basa en la educación participativa. La comprensión del mundo que les rodea es clave para que los niños aprendan y conozcan que las desigualdades se pueden cambiar. "A través de este proyecto, los alumnos han contribuido en causas solidarias comprendiendo, sintiendo y conectando con otros niños que se encuentran en situación de desigualdad", explican las profesoras.
Con un euro al mes, los estudiantes han hecho posible proyectos solidarios. "Obviamente la aportación es totalmente voluntaria y debe provenir del propio niño, que es quien debe renunciar voluntariamente a las chuches o la revista del fin de semana", recalcan las profesoras. "Elegimos una ONG internacional, Save the Chidren, y otra que tuviera proyectos de ámbito local, en este caso ha sido Cruz Roja, y en el proyecto hemos contado con la participación de muchísimos voluntarios, desde el profesorado, a padres y madres de alumnos que han explicado su experiencia en primera persona como miembros de ONG, a gente externa del centro que ha intentado explicar sus experiencias en situaciones complejas actuales, como el día a día en un campo de refugiados sirios", indica Benedito.
VIVENCIAS DE BOSNIA O LESBOS
"Es reconfortante observar cómo se ha volcado todo el mundo, el ciclo de charlas se inició con la Asociación de la Lucha contra las Enfermedades Renales de Castellón (Alcer Castalia), ha sido impresionante conocer a Alicia Moreno Moreno, capitán enfermera que nos contó sus vivencias en acciones bélicas como en Bosnia, Kósovo, Somalia o Afganistán", narra Benedito. "También fue conmovedor para todos la presencia y las experiencias que nos transmitió un voluntario de Save the Children que ha prestado su ayuda en Lesbos, en el campo de refugiados de Moria con los niños, que transmitió que las pequeñas acciones que hacemos tienen grandes resultados y cómo no, de nuevo, la suerte que tenemos de vivir aquí y agradecer lo que tenemos", añade la jefe de estudios de Secundaria.
La reflexión es uno de los grandes pilares del proyecto. En este campo ha sido crucial las sesiones de mindfulness que ha impartido en todos los clases de 3 a 16 años la profesora del centro Lidón Blanch. Pero, ¿qué es el mindfulness? "Es la concentración de la atención y la conciencia plena, es prestar atención a lo que ocurre aquí y ahora, dentro y fuera de mí para poder elegir mi conducta", explica Blanch.
Díficil de entender qué es mindfulness para un niño de 3 años pero fácil de explicar. "Cerramos los ojos al tope para relajarnos, ponemos las manos en la tripita y te sientes como en casa", cuenta una niña de Primero de Infantil. "Es no pensar en el patio ni en la ficha de trabajo para ver si estás triste o alegre", añade otro compañero de mesa.
"Un bosque tranquilo es un libro escrito por Patricia Díaz-Caneja e ilustrado por Marta Navalgar que explica de la mano del hada Atención Plena y de un modo muy sencillo cómo se pueden gestionar las emociones y aprender a ser felices en un mundo demasiado rápido y estimulante", explica Lidón Blanch.
"Las reacciones de los niños han sido diversas y todas interesantísimas, desde los pequeñitos hasta los alumnos de Secundaria, que no se paran a reflexionar y pensar en sí mismos. Las emociones se palpan a flor de piel", cuenta Blanch.
Rabia, alegría, amor, calma, miedo y tristeza son emociones que entran en las aulas y que conviven día a día con las matemáticas, la historia o el inglés. "Los docentes también tenemos la llave para intentar enseñar a los niños cómo educar las emociones, cómo rebajar la creciente agresividad y falta de empatía, y no sólo enseñar contenidos académicos, resalta Lidón Blanch. Una educación con corazón.
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Y, en el colegio, más de lo mismo. Materia tras materia, con un sinfín de deberes y con la agenda escolar siempre pendiente del próximo examen y con los dedos cruzados para que no coincida con el campeonato de fútbol, la exhibición de baile o la visita al dentista. Así es el día a día de miles de niños y miles de padres, eso en el mejor de los casos, claro está. Y es que aún peor sería que los papás no tuvieran trabajo o que los niños no tuvieran papás que les llevaran a golpe de reloj.
GESTIONAR LAS EMOCIONES
"Tenemos alumnos con una elevada formación en contenidos académicos pero que no saben cómo gestionar sus emociones, en su gran mayoría tienen las necesidades cubiertas y nadie les ha invitado a reflexionar, a pensar más allá, a ponerse en la piel del otro, más bien se fomenta la competitividad". Quien habla es Carolina Benedito, jefe de estudios de Secundaria del centro educativo Ramiro Izquierdo de Castellón, uno de los cientos de colegios de la Comunidad Valenciana y del resto de España que están tomando conciencia de la necesidad de fomentar la reflexión y la educación en valores para conseguir una educación de excelencia.
"Nuestro centro no es para nada conflictivo, todo lo contrario, pero se percibe esa mayor agresividad por parte de los alumnos, esa competencia que se traslada a todos los ámbitos y, sobre todo, esa prisa que prima en todas las acciones cotidianas de los niños y la falta de reflexión y de empatía con todo lo que ocurre a su alrededor", explica María Jesús Meseguer, también docente del centro Ramiro Izquierdo de Castellón.
Ambas son sólo dos ejemplos de los muchos que florecen en centros educativos de toda índole, públicos y privados. Maestros y profesores que se empeñan en llevar la contraria con ejemplos diarios a las críticas que en los últimos años se vierten contra los profesionales de la educación al calor de los efectos de una crisis económica que saca, en demasiadas ocasiones, lo peor de uno mismo.
CONGRESO DE EXCELENCIA
"Queríamos aportar algo nuevo, como muchísimos otros compañeros, y le comentamos al director del centro la posibilidad de asistir al Congreso de la Excelencia en Educación que se celebraba en Madrid", explica Benedito. "El director nos apoyó en todo, y en eso estamos trabajando el conjunto del colegio, en educar en contenidos, pero también en conciencia y en corazón", apunta la jefe de estudios de Secundaria.
De este modo, siguiendo los valores de consciencia y compromiso, los alumnos de 3 a 16 años del colegio Ramiro Izquierdo de Castellón se unieron también en la colaboración de un gran proyecto solidario basado en el cuento Tú también puedes de la escritora Anna Llauradó. Como el petirrojo que protagoniza esta historia, cada alumno ha participado, gota a gota, en este proyecto solidario.
La esencia de Tú también puedes se basa en la educación participativa. La comprensión del mundo que les rodea es clave para que los niños aprendan y conozcan que las desigualdades se pueden cambiar. "A través de este proyecto, los alumnos han contribuido en causas solidarias comprendiendo, sintiendo y conectando con otros niños que se encuentran en situación de desigualdad", explican las profesoras.
Con un euro al mes, los estudiantes han hecho posible proyectos solidarios. "Obviamente la aportación es totalmente voluntaria y debe provenir del propio niño, que es quien debe renunciar voluntariamente a las chuches o la revista del fin de semana", recalcan las profesoras. "Elegimos una ONG internacional, Save the Chidren, y otra que tuviera proyectos de ámbito local, en este caso ha sido Cruz Roja, y en el proyecto hemos contado con la participación de muchísimos voluntarios, desde el profesorado, a padres y madres de alumnos que han explicado su experiencia en primera persona como miembros de ONG, a gente externa del centro que ha intentado explicar sus experiencias en situaciones complejas actuales, como el día a día en un campo de refugiados sirios", indica Benedito.
VIVENCIAS DE BOSNIA O LESBOS
"Es reconfortante observar cómo se ha volcado todo el mundo, el ciclo de charlas se inició con la Asociación de la Lucha contra las Enfermedades Renales de Castellón (Alcer Castalia), ha sido impresionante conocer a Alicia Moreno Moreno, capitán enfermera que nos contó sus vivencias en acciones bélicas como en Bosnia, Kósovo, Somalia o Afganistán", narra Benedito. "También fue conmovedor para todos la presencia y las experiencias que nos transmitió un voluntario de Save the Children que ha prestado su ayuda en Lesbos, en el campo de refugiados de Moria con los niños, que transmitió que las pequeñas acciones que hacemos tienen grandes resultados y cómo no, de nuevo, la suerte que tenemos de vivir aquí y agradecer lo que tenemos", añade la jefe de estudios de Secundaria.
La reflexión es uno de los grandes pilares del proyecto. En este campo ha sido crucial las sesiones de mindfulness que ha impartido en todos los clases de 3 a 16 años la profesora del centro Lidón Blanch. Pero, ¿qué es el mindfulness? "Es la concentración de la atención y la conciencia plena, es prestar atención a lo que ocurre aquí y ahora, dentro y fuera de mí para poder elegir mi conducta", explica Blanch.
Díficil de entender qué es mindfulness para un niño de 3 años pero fácil de explicar. "Cerramos los ojos al tope para relajarnos, ponemos las manos en la tripita y te sientes como en casa", cuenta una niña de Primero de Infantil. "Es no pensar en el patio ni en la ficha de trabajo para ver si estás triste o alegre", añade otro compañero de mesa.
"Un bosque tranquilo es un libro escrito por Patricia Díaz-Caneja e ilustrado por Marta Navalgar que explica de la mano del hada Atención Plena y de un modo muy sencillo cómo se pueden gestionar las emociones y aprender a ser felices en un mundo demasiado rápido y estimulante", explica Lidón Blanch.
"Las reacciones de los niños han sido diversas y todas interesantísimas, desde los pequeñitos hasta los alumnos de Secundaria, que no se paran a reflexionar y pensar en sí mismos. Las emociones se palpan a flor de piel", cuenta Blanch.
Rabia, alegría, amor, calma, miedo y tristeza son emociones que entran en las aulas y que conviven día a día con las matemáticas, la historia o el inglés. "Los docentes también tenemos la llave para intentar enseñar a los niños cómo educar las emociones, cómo rebajar la creciente agresividad y falta de empatía, y no sólo enseñar contenidos académicos, resalta Lidón Blanch. Una educación con corazón.
Da clase en el Padre Isla y ha sido seleccionado entre los diez más innovadores de España.
Los alumnos no son alumnos. Son hechiceros, guerreros o curanderos, porque cuando se sientan en sus pupitres del Padre Isla para empezar la clase de Filosofía se transforman. Se convierten en su personaje virtual y la motivación es tal que el origen del ser humano, el saber filosófico, la argumentación lógica o la realidad metafísica se vuelve algo sencillo, interesante y atractivo. Todo es gracias a su profesor, Marcos García, quien ha sido seleccionado por este proyecto entre los diez finalistas del Certamen Proyecta D+I que organizan las fundaciones Amancio Ortega y Santiago Rey Fernández-Latorre.
Marcos García defendió este año su tesis Aprendizaje basado en juegos serios como herramienta para la educación de todos. Entre sus argumentos, que el uso de la herramienta del juego es válida para todos los alumnos, pero «mejoran especialmente aquellos que tengan alguna necesidad educativa». A pesar de que comenzó a trabajar en su tesis hace más de cinco años —lo que antes se llamaban juegos serios ahora se denomina gamificación— mientras continuaba con su trabajo, no fue hasta finales del curso pasado cuando apareció el juego que llevaba esperando mucho tiempo: Classcraft, con él pudo hacer realizar el proyecto que rondaba en su cabeza, usar los juegos de rol para impartir Filosofía.
Todas las clases de los alumnos de primero de Bachillerato se basan en el juego. Ganan puntos de vida, que tienen un 50% del peso en la nota final y los estudiantes también dependen del azar. Cada día, al comenzar la clase, con el evento del día, pueden enfrentarse a preguntas sobre el tema que están dando o, simplemente, cantar una canción que ayude a entrar en materia. Otra de las metodologías que aplica este innovador profesor es "la clase invertida". «A los alumnos les doy mucho material para que trabajen en casa y la clase, aunque también vemos contenidos, la dedicamos principalmente a resolver tareas», comenta mientras explica que, al igual que el resto de los profesores e independientemente del método empleado, él tiene que cumplir con el currículo y con la programación marcada para su clase de Filosofía, impartiendo todo el temario. Sin embargo, la temática "se envuelve en la dinámica del juego", en el que los alumnos participan y aprenden individualmente y en grupo.
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Los alumnos no son alumnos. Son hechiceros, guerreros o curanderos, porque cuando se sientan en sus pupitres del Padre Isla para empezar la clase de Filosofía se transforman. Se convierten en su personaje virtual y la motivación es tal que el origen del ser humano, el saber filosófico, la argumentación lógica o la realidad metafísica se vuelve algo sencillo, interesante y atractivo. Todo es gracias a su profesor, Marcos García, quien ha sido seleccionado por este proyecto entre los diez finalistas del Certamen Proyecta D+I que organizan las fundaciones Amancio Ortega y Santiago Rey Fernández-Latorre.
Marcos García defendió este año su tesis Aprendizaje basado en juegos serios como herramienta para la educación de todos. Entre sus argumentos, que el uso de la herramienta del juego es válida para todos los alumnos, pero «mejoran especialmente aquellos que tengan alguna necesidad educativa». A pesar de que comenzó a trabajar en su tesis hace más de cinco años —lo que antes se llamaban juegos serios ahora se denomina gamificación— mientras continuaba con su trabajo, no fue hasta finales del curso pasado cuando apareció el juego que llevaba esperando mucho tiempo: Classcraft, con él pudo hacer realizar el proyecto que rondaba en su cabeza, usar los juegos de rol para impartir Filosofía.
Todas las clases de los alumnos de primero de Bachillerato se basan en el juego. Ganan puntos de vida, que tienen un 50% del peso en la nota final y los estudiantes también dependen del azar. Cada día, al comenzar la clase, con el evento del día, pueden enfrentarse a preguntas sobre el tema que están dando o, simplemente, cantar una canción que ayude a entrar en materia. Otra de las metodologías que aplica este innovador profesor es "la clase invertida". «A los alumnos les doy mucho material para que trabajen en casa y la clase, aunque también vemos contenidos, la dedicamos principalmente a resolver tareas», comenta mientras explica que, al igual que el resto de los profesores e independientemente del método empleado, él tiene que cumplir con el currículo y con la programación marcada para su clase de Filosofía, impartiendo todo el temario. Sin embargo, la temática "se envuelve en la dinámica del juego", en el que los alumnos participan y aprenden individualmente y en grupo.
Usualmente los educadores de párvulos aprovechan los comentarios espontáneos de los niños para crear importantes instancias de aprendizaje, más aún cuando se trata de un niño que presenta dificultades para comunicarse verbalmente. Las conversaciones no sólo son ideales para desarrollar el lenguaje expresivo de niños y niñas, sino también para ampliar sus conocimientos.
Parte de esta tarea se construye a partir de un elemento vital: las preguntas. Para muchos, este elemento tan cotidiano puede parecer sin importancia. Para un profesional de la educación inicial, jamás. ¡Al contrario! La pregunta es una herramienta fundamental. El “arma secreta” que utilizan para detonar aprendizajes en los niños. En la sala de un educador o educadora de párvulos ninguna pregunta es casual. Ellos realizan diversas interpelaciones a los niños pensadas “quirúrgicamente” que, en definitiva, pueden marcar la diferencia entre desarrollar una habilidad o no; entre aprender o no.
La evidencia demuestra que todas las interacciones entre educadores y niños importan. Manejar el difícil arte de la pregunta correcta puede ayudar a los niños a explicitar lo que piensan y profundizar en sus aprendizajes. Y nuestros educadores de párvulo lo saben. Y se forman y entrenan para ello.
LO QUE HAY DETRÁS DE UNA SIMPLE PREGUNTA
Actualmente, podemos identificar 4 tipos de preguntas y cada una de ellas son formuladas por estos profesionales para desarrollar distintas habilidades en los niños:
- Preguntas abiertas: Estimulan el uso de habilidades cognitivas, ya que los niños deben ser capaces de representar internamente la respuesta que quieren dar. Para construir respuesta a este tipo de preguntas los niños deben reflexionar, proyectar, preguntar, entre otros. Por ejemplo: Yo tenía un perro ¿Qué te gustaba de tu perro? Este tipo de preguntas permite al educador oír las respuestas de los niños y obtener más información de cómo ellos piensan.
- Preguntas cerradas: Sólo demandan un tipo de respuesta, la cual está implícita en la pregunta. Por ejemplo: Yo tenía un perro, ¿Cómo se llama tú perro? Con este tipo de preguntas, el educador o educadora lleva el control de la conversación y los niños deben adaptar su respuesta a la percepción de él.
- Preguntas efectivas: Son aquellas preguntas que obligan a los niños a estructurar sus propias respuestas. Por ejemplo: Yo tenía un perro ¿Qué podrías contarme de tu perro? Estas preguntas reflejan el interés por parte de los adultos en aquello que los niños dicen o hacen.
- Preguntas de reflejo verbal: Consiste en repetirle de vuelta al niño la última parte de su respuesta en forma de pregunta. Por ejemplo: Yo tenía un perro, ¿tenías un perro? Este tipo de preguntas produce más respuestas independientes del niño y valora lo que él acaba de decir. Con este tipo de preguntas el niño lleva el control de la conversación en sus respuestas, por lo que se fomenta el pensamiento divergente.
¿CUÁL ES EL MEJOR TIPO DE PREGUNTA?
En la sala de clases de un educador o educadora inicial no existe “la mejor pregunta”, puesto todas aportan al desarrollo de los niños. Además, es importante que toda interacción niño-adulto considere distintas formas de relación, ya que el uso exclusivo de un solo estilo puede llevarnos a interacciones artificiales. Sin embargo, a la hora de escoger las preguntas , la evidencia muestra que aquellas que son de carácter abierto suelen promover mejores espacios de aprendizaje y, por ende, son intencionadas con mayor frecuencia por estos profesionales, manteniendo siempre presente que toda interacción debe considerar los intereses y necesidades de los niños y niñas.
¿Quién dijo que enseñar en un jardín era algo fácil? Como ves, los educadores jamás dejan un detalle al azar.
Referencias: Mark Allerton, Institute of Education, University of London. En: Revista Internacional Journal Of Early Childhood. OMEP, Vol. 25 N°1. Traducción Mónica Varas
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Parte de esta tarea se construye a partir de un elemento vital: las preguntas. Para muchos, este elemento tan cotidiano puede parecer sin importancia. Para un profesional de la educación inicial, jamás. ¡Al contrario! La pregunta es una herramienta fundamental. El “arma secreta” que utilizan para detonar aprendizajes en los niños. En la sala de un educador o educadora de párvulos ninguna pregunta es casual. Ellos realizan diversas interpelaciones a los niños pensadas “quirúrgicamente” que, en definitiva, pueden marcar la diferencia entre desarrollar una habilidad o no; entre aprender o no.
La evidencia demuestra que todas las interacciones entre educadores y niños importan. Manejar el difícil arte de la pregunta correcta puede ayudar a los niños a explicitar lo que piensan y profundizar en sus aprendizajes. Y nuestros educadores de párvulo lo saben. Y se forman y entrenan para ello.
LO QUE HAY DETRÁS DE UNA SIMPLE PREGUNTA
Actualmente, podemos identificar 4 tipos de preguntas y cada una de ellas son formuladas por estos profesionales para desarrollar distintas habilidades en los niños:
- Preguntas abiertas: Estimulan el uso de habilidades cognitivas, ya que los niños deben ser capaces de representar internamente la respuesta que quieren dar. Para construir respuesta a este tipo de preguntas los niños deben reflexionar, proyectar, preguntar, entre otros. Por ejemplo: Yo tenía un perro ¿Qué te gustaba de tu perro? Este tipo de preguntas permite al educador oír las respuestas de los niños y obtener más información de cómo ellos piensan.
- Preguntas cerradas: Sólo demandan un tipo de respuesta, la cual está implícita en la pregunta. Por ejemplo: Yo tenía un perro, ¿Cómo se llama tú perro? Con este tipo de preguntas, el educador o educadora lleva el control de la conversación y los niños deben adaptar su respuesta a la percepción de él.
- Preguntas efectivas: Son aquellas preguntas que obligan a los niños a estructurar sus propias respuestas. Por ejemplo: Yo tenía un perro ¿Qué podrías contarme de tu perro? Estas preguntas reflejan el interés por parte de los adultos en aquello que los niños dicen o hacen.
- Preguntas de reflejo verbal: Consiste en repetirle de vuelta al niño la última parte de su respuesta en forma de pregunta. Por ejemplo: Yo tenía un perro, ¿tenías un perro? Este tipo de preguntas produce más respuestas independientes del niño y valora lo que él acaba de decir. Con este tipo de preguntas el niño lleva el control de la conversación en sus respuestas, por lo que se fomenta el pensamiento divergente.
¿CUÁL ES EL MEJOR TIPO DE PREGUNTA?
En la sala de clases de un educador o educadora inicial no existe “la mejor pregunta”, puesto todas aportan al desarrollo de los niños. Además, es importante que toda interacción niño-adulto considere distintas formas de relación, ya que el uso exclusivo de un solo estilo puede llevarnos a interacciones artificiales. Sin embargo, a la hora de escoger las preguntas , la evidencia muestra que aquellas que son de carácter abierto suelen promover mejores espacios de aprendizaje y, por ende, son intencionadas con mayor frecuencia por estos profesionales, manteniendo siempre presente que toda interacción debe considerar los intereses y necesidades de los niños y niñas.
¿Quién dijo que enseñar en un jardín era algo fácil? Como ves, los educadores jamás dejan un detalle al azar.
Referencias: Mark Allerton, Institute of Education, University of London. En: Revista Internacional Journal Of Early Childhood. OMEP, Vol. 25 N°1. Traducción Mónica Varas
Un artículo escrito por Paulina.
La última cosa que los padres de un niño de altas capacidades podrían imaginar, es que éstos tendrían problemas con los deberes. Después de todo, se supone que un niño con altas capacidades es cognitivamente avanzado y aprende más rápido. Sin embargo, para muchos padres con niños de altas capacidades, conseguir que hagan los deberes se convierte en todo un reto, y se pueden encontrar con cualquiera de estas situaciones:
* Hacen los deberes, pero no los entregan.
* Dicen que los han hecho en el colegio, pero no es cierto.
* Los posponen continuamente.
* Los hace con prisa y comete errores por falta de atención.
Cuando nos encontramos con estas situaciones, es difícil conseguir que estos niños hagan los deberes, especialmente si esta intrínsicamente desmotivado. El primer paso para resolver este problema, es entender las causas:
1.- Dificultades de aprendizaje
Un niño con altas capacidades que además presente dificultades de aprendizaje como dislexia, algún problema auditivo, u otras puede tener dificultades para mostrarse tan bien como debería, tanto en la escuela como en la ejecución de los deberes. Los niños con altas capacidades no son inmunes a estas dificultades y su efecto se refleja en su aprendizaje. Si además, estas dificultades de aprendizaje no estan identificadas o diagnosticadas, pueden sentirse confundidos y avergonzados por los problemas que tienen para entender algunos conceptos o al hacer sus deberes. Para ellos, es mucho menos amenazante psicológica y emocionalmente evitar hacer sus deberes de lo que sería hacerlos y fallar. Si el niño no lo intenta, puede convencerse a si mismo fácilmente de que lo haría mal.
2.- Desorganización.
Muchos niños con Altas Capacidades son desorganizados y tienen problemas para hacer sus deberes porque olvidan lo que tenían que hacer, se han dejado el libro o cuaderno en clase, u olvidan entregarlos en la fecha debida. Las agendas no parecen ayudarles porque tienen a perder, extraviar u olvidarlas también. Si han conseguido acordarse de traer todo el material necesario, entonces pueden olvidar llevar los deberes al colegio o los llevan al colegio pero no se acuerdan de sacarlos de su mochila, o los sacan y los olvidan en su taquilla o pupitre hasta el fin del semestre.
3.- Perfeccionismo.
Los niños que son perfeccionistas a menudo son reacios a completar sus deberes porque nunca les parecen lo suficientemente buenos. Si no alcanzan sus propios estándares, que tienden a ser muy altos, se frustran. Pueden también posponer su ejecución para evitar esta frustración, o completar sus deberes pero no entregarlos porque no están satisfechos con ellos o porque piensan que no reflejan su verdadera habilidad y no quieren que su maestra los vea y los evalúe. Algunos niños perfeccionistas también pueden decidir esforzarse poco con sus deberes, de forma que ésto les sirva de excusa para justificar lo que ellos creen no es tan perfecto como les gustaría que fuera.
4.- Falta de Reto.
El trabajo que no es estimulante o no les supone un desafío es un trabajo tedioso que los niños de altas capacidades evitarán hacer a toda costa. Las tareas, para cualquier niño deben ser óptimamente estimulantes. Esto significa que no deberían ser muy fáciles ni muy difíciles. Las tareas que resultan muy difíciles pueden generar ansiedad y las que son muy fáciles llevan al aburrimiento. En ambos casos los niños encontrarán difícil concentrarse en la tarea, y evitarán hacerla para así evitar los sentimientos desagradables – ansiedad o aburrimiento- que les generan. Cuando los niños tienen que realizar tareas que les resultan muy difíciles pueden buscar ayuda que les ayude a entender los conceptos o a acabar el trabajo. Sin embargo, cuando las tareas son muy fáciles, no requieren ayuda, simplemente se espera que los niños completen sus deberes a pesar de que el aburrimiento hace tan difícil concentrarse en lo que deben hacer como lo hace la ansiedad. Algunas veces los niños conseguirán completar sus deberes, pero pasarán tan rápido por encima de ellos que cometerán varios errores de falta de atención.
EN ESTAS CIRCUNSTANCIAS, ¿QUÉ PODEMOS HACER?
1.- Buscar ayuda para las dificultades de aprendizaje.
Como cualquier otro niño, los niños con altas capacidades necesitan aprender a gestionar su dificultad y necesitan desarrollar estrategias de aprendizaje para trabajar estas dificultades, asi mismo necesitan adaptaciones en el aula que les permita mostar el máximo potencial de sus habilidades. Sin embargo, es importante reconocer que los niños con altas capacidades a menudo son diágnosticados erróneamente con dificultades de aprendizaje como TDAH, trastorno bipolar, trastorno desafiante, etc.
Algunas dificultades de aprendizaje pueden ser identificadas a través de los test de inteligencia y rendimiento. Estos test y los screenings para identificar desórdenes de aprendizaje deben ser realizados por psicólogos con formación y experiencia con niños de altas capacidades, familiarizado con los aspectos que son frecuentes en este colectivo y asi evitar el riesgo de falso diagnostico.
También es importante entender que los problemas con los deberes pueden tener diversas causas. Buscar una dificultad de aprendizaje no debe ser, necesariamente, la primera consideración.
2.- Ayuda a tu hijo a ser más organizado.
Eileen Bailey, propone excelentes sugerencias para ayudar a los niños a ser más organizados : Una de ellas es la “bandeja de preparación”. Los niños deben dejan los libros y deberes en una bandeja habilitada en casa cuando llegan del cole, los cogen de allí en el momento de hacerlos, y de nuevo en la bandeja cuando están acabados. Por las mañanas, todo lo que necesitan está junto en un solo lugar, listo para ser llevado a la escuela.
Pero esto no garantiza que tu hijo presente los deberes. Una carpeta con separadores es una buena forma de separar los trabajos de forma que tu hijo pueda fácilmente chequear los deberes que debe entregar en cada asignatura. Para los adolescentes, puedes ayudarte por un organizador electrónico, que añadiría una motivación extra (siempre que no lo pierda también).
3.- Establecer un tiempo de deberes fijo.
Los niños con altas capacidades con frecuencia hacen sus deberes deprisa y sin prestar atención cuando son tan fáciles para ellos. Están ansiosos por acabarlos para poder dedicarse a actividades más interesantes y estimulantes para ellos. Una solución para este problema es fijar un tiempo para hacer los deberes cada día. Este tiempo debe ser usado para estudiar, tanto si el niño tiene deberes como si no. Cuando los niños tienen deberes, saben que tienen que hacerlos en ese tiempo. Si acaban los deberes en 15 minutos, pero su tiempo fijado para estudiar es de, por ejemplo, 1 hora, deben rellenar el resto del tiempo con algún otro estudio. Este tiempo adicional puede consistir en actividades de enriquecimiento. Por ejemplo si la tarea consistía en dibujar un mapa de la expansión del Imperio Romano, pueden escribir una historia sobre un soldado romano imaginario.
Una vez los niños asimilan que deben rellenar este tiempo de estudio, tendrán menos prisa por hacer sus deberes sin la debida atención, sabiendo que no podrán dedicarse a otras tareas hasta que no acabe el tiempo de estudio.
El tiempo de estudio debe ser el mismo cada día y debe ser negociado con los niños, pero mantenerse igual y no depender de las ganas o el “humor” de cada momento. De esta forma, no sólo aprenderán que dedicar tiempo a sus estudios es importante, sino que también desarrollaran habilidades para gestionar este tiempo.
4.- Gestionar el ideal de Perfeccionismo
Ser perfeccionista para muchos de ellos, es inevitable. Cuando este perfeccionismo les impide cumplir o avanzar debemos ayudarles a entender los objetivos de su trabajo. Su cabeza funciona aplicando siempre la lógica. Hacer las cosas “porque hay que hacerlas” no suele ser un argumento que acepten.
Entender que el objetivo de los deberes no es otro que adquirir hábitos de estudio, trabajar la autonomía, completar el aprendizaje, practicar para mejorar o, en todo caso, cumplir un protocolo escolar, les puede ayudar a entender que no se espera que todo su potencial quede plasmado en cada ejercicio.
Es importante que comprendan que sus habilidades no siempre estarán trabajando al máximo. Igual que un deportista -ni tan siquiera los de élite- rinde siempre al máximo y también pierde partidos, no siempre sus ejercicios seran tan perfectos como él mismo espera, pero deben mostrar su esfuerzo y dedicación. Igual que un deportista entrena a diario y trabaja su potencial para que éste se mantenga, del mismo modo debemos hacerles comprender que sus habilidades no significan que tengan que ser perfectos siempre, en todo y también necesitan “entrenamiento”.
5.- Evitar el trabajo monótono y repetitivo.
Los niños con altas capacidades tienen menos capacidad para adaptarse y entender las tareas repetitivas que no le aportan valor. Si ellos asumen que se esta indiciendo en un conocimiento que ya tienen asimilado, dificilmente entenderán y aceptarán la necesidad de seguir demostrando que saben hacer algo. Su avanzada lógica les hace rechazar tareas absurdas o sin una utilidad visible. Si el maestro entiende que el alumno si requiere practicar más estos conocimientos, es interesante que dialogue con él y aporte sus justificaciones. Si no es así, debe proponerle tareas alternativas que si le supongan un reto intelectual y sean diversas y variadas. Entender la lógica y utilidad de los conceptos que se estan aprendiendo es importante para conseguir la implicación del alumno en su aprendizaje, generan un aprendizaje más interiorizado y es más estimulante.
5.- Hablar con los profesores.
Idealmente, los profesores deberían reconocer la necesidad de adaptar los deberes de forma que éstos resulten siempre una tarea estimulante para cada niño. El objetivo de los deberes no debería ser simplemente repetir las tareas o conceptos aprendidos en clase, sino servir para:
- Trabajar dificultades de aprendizaje o desarrollar determinadas habilidades del estudiante.
- Dar la oportunidad de profundizar en el contenido de una materia concreta relacionada con el trabajo de clase.
- Desarrollar las habilidades individuales del niño, creando un espacio dónde éste pueda desarrollar competencias de indagación, innovación y creatividad.
- Proponer un trabajo que signifique la relación de los conceptos aprendidos con otras asignaturas o su aplicación práctica.
Es decir:
* Usar los deberes para que un talento matemático desarrolle sus habilidades narrativas o de resumen, y mantenga asi un desarrollo más armonioso.
* Proponer problemas matemáticos para resolver en casa que supongan un ejercicio creativo y de reflexión, y fomenten la curiosidad y el razonamiento.
* Aprovechar los intereses del niño para que prepare material en casa que será expuesto posteriormente en el aula o se aprovechen para generar un debate enriquecedor para todo el alumnado.
* Aprovechar aquellas áreas donde el niño destaca para proponerle un trabajo diferente que le permita expresar sus destrezas (presentar un video, grabaciones, apps, dibujos, pinturas, poemas, canciones, construcciones, narraciones, etc..)
* Hacer un ejercicio de reflexión y proponer al estudiante un trabajo práctico e interrelacionado con el resto de asignaturas, para comentar, por ejemplo.. ¿Para qué nos sirve estudiar la historia de civilizaciones antiguas?, etc.. de forma que será el propio alumno el que busque la lógica y la utilidad de los conceptos que se estan trabajando, consiguiendo así su implicación con el aprendizaje.
Si además, un niño ha tenido problemas para hacer sus deberes y presentarlos y esto se ha convertido en un hábito, deben al mismo tiempo abordarse otras estrategias que corrijan estos hábitos. Las Tics pueden también ayudarnos a trabajar estos aspectos y conseguir una mayor implicación del alumno: algunas escuelas ofrecen un asesor on line para solventar cualquier duda sobre los deberes o páginas web/blogs donde se cuelgan las tareas a realizar de forma que alumnos y padres las pueden consultar desde casa. Son soluciones sencillas que pueden dar un toque de innovación y motivación para el alumno.
Lo importante, siempre, es entender que los deberes, de existir, deben tener un objetivo más allá de la repetición de trabajos y sobre todo deben ser diversos, huir de la monotonía, individualizados para cada niño y trabajar por el desarrollo de sus habilidades y el refuerzo de sus dificultades.
Bibliografía:
http://giftedkids.about.com/od/schoolissues/a/homework.htm
Ver más
La última cosa que los padres de un niño de altas capacidades podrían imaginar, es que éstos tendrían problemas con los deberes. Después de todo, se supone que un niño con altas capacidades es cognitivamente avanzado y aprende más rápido. Sin embargo, para muchos padres con niños de altas capacidades, conseguir que hagan los deberes se convierte en todo un reto, y se pueden encontrar con cualquiera de estas situaciones:
* Hacen los deberes, pero no los entregan.
* Dicen que los han hecho en el colegio, pero no es cierto.
* Los posponen continuamente.
* Los hace con prisa y comete errores por falta de atención.
Cuando nos encontramos con estas situaciones, es difícil conseguir que estos niños hagan los deberes, especialmente si esta intrínsicamente desmotivado. El primer paso para resolver este problema, es entender las causas:
1.- Dificultades de aprendizaje
Un niño con altas capacidades que además presente dificultades de aprendizaje como dislexia, algún problema auditivo, u otras puede tener dificultades para mostrarse tan bien como debería, tanto en la escuela como en la ejecución de los deberes. Los niños con altas capacidades no son inmunes a estas dificultades y su efecto se refleja en su aprendizaje. Si además, estas dificultades de aprendizaje no estan identificadas o diagnosticadas, pueden sentirse confundidos y avergonzados por los problemas que tienen para entender algunos conceptos o al hacer sus deberes. Para ellos, es mucho menos amenazante psicológica y emocionalmente evitar hacer sus deberes de lo que sería hacerlos y fallar. Si el niño no lo intenta, puede convencerse a si mismo fácilmente de que lo haría mal.
2.- Desorganización.
Muchos niños con Altas Capacidades son desorganizados y tienen problemas para hacer sus deberes porque olvidan lo que tenían que hacer, se han dejado el libro o cuaderno en clase, u olvidan entregarlos en la fecha debida. Las agendas no parecen ayudarles porque tienen a perder, extraviar u olvidarlas también. Si han conseguido acordarse de traer todo el material necesario, entonces pueden olvidar llevar los deberes al colegio o los llevan al colegio pero no se acuerdan de sacarlos de su mochila, o los sacan y los olvidan en su taquilla o pupitre hasta el fin del semestre.
3.- Perfeccionismo.
Los niños que son perfeccionistas a menudo son reacios a completar sus deberes porque nunca les parecen lo suficientemente buenos. Si no alcanzan sus propios estándares, que tienden a ser muy altos, se frustran. Pueden también posponer su ejecución para evitar esta frustración, o completar sus deberes pero no entregarlos porque no están satisfechos con ellos o porque piensan que no reflejan su verdadera habilidad y no quieren que su maestra los vea y los evalúe. Algunos niños perfeccionistas también pueden decidir esforzarse poco con sus deberes, de forma que ésto les sirva de excusa para justificar lo que ellos creen no es tan perfecto como les gustaría que fuera.
4.- Falta de Reto.
El trabajo que no es estimulante o no les supone un desafío es un trabajo tedioso que los niños de altas capacidades evitarán hacer a toda costa. Las tareas, para cualquier niño deben ser óptimamente estimulantes. Esto significa que no deberían ser muy fáciles ni muy difíciles. Las tareas que resultan muy difíciles pueden generar ansiedad y las que son muy fáciles llevan al aburrimiento. En ambos casos los niños encontrarán difícil concentrarse en la tarea, y evitarán hacerla para así evitar los sentimientos desagradables – ansiedad o aburrimiento- que les generan. Cuando los niños tienen que realizar tareas que les resultan muy difíciles pueden buscar ayuda que les ayude a entender los conceptos o a acabar el trabajo. Sin embargo, cuando las tareas son muy fáciles, no requieren ayuda, simplemente se espera que los niños completen sus deberes a pesar de que el aburrimiento hace tan difícil concentrarse en lo que deben hacer como lo hace la ansiedad. Algunas veces los niños conseguirán completar sus deberes, pero pasarán tan rápido por encima de ellos que cometerán varios errores de falta de atención.
EN ESTAS CIRCUNSTANCIAS, ¿QUÉ PODEMOS HACER?
1.- Buscar ayuda para las dificultades de aprendizaje.
Como cualquier otro niño, los niños con altas capacidades necesitan aprender a gestionar su dificultad y necesitan desarrollar estrategias de aprendizaje para trabajar estas dificultades, asi mismo necesitan adaptaciones en el aula que les permita mostar el máximo potencial de sus habilidades. Sin embargo, es importante reconocer que los niños con altas capacidades a menudo son diágnosticados erróneamente con dificultades de aprendizaje como TDAH, trastorno bipolar, trastorno desafiante, etc.
Algunas dificultades de aprendizaje pueden ser identificadas a través de los test de inteligencia y rendimiento. Estos test y los screenings para identificar desórdenes de aprendizaje deben ser realizados por psicólogos con formación y experiencia con niños de altas capacidades, familiarizado con los aspectos que son frecuentes en este colectivo y asi evitar el riesgo de falso diagnostico.
También es importante entender que los problemas con los deberes pueden tener diversas causas. Buscar una dificultad de aprendizaje no debe ser, necesariamente, la primera consideración.
2.- Ayuda a tu hijo a ser más organizado.
Eileen Bailey, propone excelentes sugerencias para ayudar a los niños a ser más organizados : Una de ellas es la “bandeja de preparación”. Los niños deben dejan los libros y deberes en una bandeja habilitada en casa cuando llegan del cole, los cogen de allí en el momento de hacerlos, y de nuevo en la bandeja cuando están acabados. Por las mañanas, todo lo que necesitan está junto en un solo lugar, listo para ser llevado a la escuela.
Pero esto no garantiza que tu hijo presente los deberes. Una carpeta con separadores es una buena forma de separar los trabajos de forma que tu hijo pueda fácilmente chequear los deberes que debe entregar en cada asignatura. Para los adolescentes, puedes ayudarte por un organizador electrónico, que añadiría una motivación extra (siempre que no lo pierda también).
3.- Establecer un tiempo de deberes fijo.
Los niños con altas capacidades con frecuencia hacen sus deberes deprisa y sin prestar atención cuando son tan fáciles para ellos. Están ansiosos por acabarlos para poder dedicarse a actividades más interesantes y estimulantes para ellos. Una solución para este problema es fijar un tiempo para hacer los deberes cada día. Este tiempo debe ser usado para estudiar, tanto si el niño tiene deberes como si no. Cuando los niños tienen deberes, saben que tienen que hacerlos en ese tiempo. Si acaban los deberes en 15 minutos, pero su tiempo fijado para estudiar es de, por ejemplo, 1 hora, deben rellenar el resto del tiempo con algún otro estudio. Este tiempo adicional puede consistir en actividades de enriquecimiento. Por ejemplo si la tarea consistía en dibujar un mapa de la expansión del Imperio Romano, pueden escribir una historia sobre un soldado romano imaginario.
Una vez los niños asimilan que deben rellenar este tiempo de estudio, tendrán menos prisa por hacer sus deberes sin la debida atención, sabiendo que no podrán dedicarse a otras tareas hasta que no acabe el tiempo de estudio.
El tiempo de estudio debe ser el mismo cada día y debe ser negociado con los niños, pero mantenerse igual y no depender de las ganas o el “humor” de cada momento. De esta forma, no sólo aprenderán que dedicar tiempo a sus estudios es importante, sino que también desarrollaran habilidades para gestionar este tiempo.
4.- Gestionar el ideal de Perfeccionismo
Ser perfeccionista para muchos de ellos, es inevitable. Cuando este perfeccionismo les impide cumplir o avanzar debemos ayudarles a entender los objetivos de su trabajo. Su cabeza funciona aplicando siempre la lógica. Hacer las cosas “porque hay que hacerlas” no suele ser un argumento que acepten.
Entender que el objetivo de los deberes no es otro que adquirir hábitos de estudio, trabajar la autonomía, completar el aprendizaje, practicar para mejorar o, en todo caso, cumplir un protocolo escolar, les puede ayudar a entender que no se espera que todo su potencial quede plasmado en cada ejercicio.
Es importante que comprendan que sus habilidades no siempre estarán trabajando al máximo. Igual que un deportista -ni tan siquiera los de élite- rinde siempre al máximo y también pierde partidos, no siempre sus ejercicios seran tan perfectos como él mismo espera, pero deben mostrar su esfuerzo y dedicación. Igual que un deportista entrena a diario y trabaja su potencial para que éste se mantenga, del mismo modo debemos hacerles comprender que sus habilidades no significan que tengan que ser perfectos siempre, en todo y también necesitan “entrenamiento”.
5.- Evitar el trabajo monótono y repetitivo.
Los niños con altas capacidades tienen menos capacidad para adaptarse y entender las tareas repetitivas que no le aportan valor. Si ellos asumen que se esta indiciendo en un conocimiento que ya tienen asimilado, dificilmente entenderán y aceptarán la necesidad de seguir demostrando que saben hacer algo. Su avanzada lógica les hace rechazar tareas absurdas o sin una utilidad visible. Si el maestro entiende que el alumno si requiere practicar más estos conocimientos, es interesante que dialogue con él y aporte sus justificaciones. Si no es así, debe proponerle tareas alternativas que si le supongan un reto intelectual y sean diversas y variadas. Entender la lógica y utilidad de los conceptos que se estan aprendiendo es importante para conseguir la implicación del alumno en su aprendizaje, generan un aprendizaje más interiorizado y es más estimulante.
5.- Hablar con los profesores.
Idealmente, los profesores deberían reconocer la necesidad de adaptar los deberes de forma que éstos resulten siempre una tarea estimulante para cada niño. El objetivo de los deberes no debería ser simplemente repetir las tareas o conceptos aprendidos en clase, sino servir para:
- Trabajar dificultades de aprendizaje o desarrollar determinadas habilidades del estudiante.
- Dar la oportunidad de profundizar en el contenido de una materia concreta relacionada con el trabajo de clase.
- Desarrollar las habilidades individuales del niño, creando un espacio dónde éste pueda desarrollar competencias de indagación, innovación y creatividad.
- Proponer un trabajo que signifique la relación de los conceptos aprendidos con otras asignaturas o su aplicación práctica.
Es decir:
* Usar los deberes para que un talento matemático desarrolle sus habilidades narrativas o de resumen, y mantenga asi un desarrollo más armonioso.
* Proponer problemas matemáticos para resolver en casa que supongan un ejercicio creativo y de reflexión, y fomenten la curiosidad y el razonamiento.
* Aprovechar los intereses del niño para que prepare material en casa que será expuesto posteriormente en el aula o se aprovechen para generar un debate enriquecedor para todo el alumnado.
* Aprovechar aquellas áreas donde el niño destaca para proponerle un trabajo diferente que le permita expresar sus destrezas (presentar un video, grabaciones, apps, dibujos, pinturas, poemas, canciones, construcciones, narraciones, etc..)
* Hacer un ejercicio de reflexión y proponer al estudiante un trabajo práctico e interrelacionado con el resto de asignaturas, para comentar, por ejemplo.. ¿Para qué nos sirve estudiar la historia de civilizaciones antiguas?, etc.. de forma que será el propio alumno el que busque la lógica y la utilidad de los conceptos que se estan trabajando, consiguiendo así su implicación con el aprendizaje.
Si además, un niño ha tenido problemas para hacer sus deberes y presentarlos y esto se ha convertido en un hábito, deben al mismo tiempo abordarse otras estrategias que corrijan estos hábitos. Las Tics pueden también ayudarnos a trabajar estos aspectos y conseguir una mayor implicación del alumno: algunas escuelas ofrecen un asesor on line para solventar cualquier duda sobre los deberes o páginas web/blogs donde se cuelgan las tareas a realizar de forma que alumnos y padres las pueden consultar desde casa. Son soluciones sencillas que pueden dar un toque de innovación y motivación para el alumno.
Lo importante, siempre, es entender que los deberes, de existir, deben tener un objetivo más allá de la repetición de trabajos y sobre todo deben ser diversos, huir de la monotonía, individualizados para cada niño y trabajar por el desarrollo de sus habilidades y el refuerzo de sus dificultades.
Bibliografía:
http://giftedkids.about.com/od/schoolissues/a/homework.htm
Procesos cognitivos
UN ESTUDIO CONFIRMA QUE EL ARTE HACE A LOS NIÑOS MEJORES PERSONAS Y MEJORES ESTUDIANTES
Algunos están de acuerdo en que el arte es una parte importante de la educación básica. Debido a que la tendencia en los planes de educación de varios países se inclina hacia las ciencias exactas y la lengua, científicos sociales de la Universidad de Arkansas hicieron un experimento para comprobar los beneficios de impartir arte en las escuelas.
En un estudio publicado en Education Next y Educational Researcher, se afirmó que los alumnos expuestos a las instituciones culturales como museos y centros de artes escénicas, no sólo tienen niveles altos de compromiso con las artes sino este acercamiento genera más tolerancia, empatía histórica, mejor memoria educativa y pensamiento crítico.
“Los cambios fueron significativos” dijo Jay P. Greene, profesor de la reforma educativa e investigador del estudio. En particular un solo tour a museo tiene una impresión definitiva en los estudiantes. De acuerdo con Greene, los estudiantes de este tour recordaron lo que habían aprendido “incluso sin una razón externa para hacerlo, como un grado o un examen.
Cuando el Crystal Bridges Museum of American Art abrió en Betonville, Arkansas, hace dos años, el museo ofreció a 11 mil estudiantes paseos. Cada grupo visitante (escogido por sorteo) vio 5 pinturas en una hora. Los paseos estaban dirigidos especialmente a los estudiantes, esto significa que los curadores no les dieron cátedra, sino que se les proporcionó la información mínima acerca de cada pintura y pasaron la mayor parte del tiempo facilitando discusión.
Tres semanas después, los estudiantes llenaron un cuestionario acerca de su experiencia en el museo. Aparte de recordar información sobre las pinturas que vieron, se les pidió responder preguntas sobre tolerancia hacia los otros y sobre empatía. Al final se les pidió escribir un ensayo corto acerca de una nueva pintura: The Box de Bo Bartlet, la cual no estuvo expuesta en el museo. Los estudiantes que ganaron el sorteo pero que no fueron en paseos de grupo, fueron el grupo de control. Los estudiantes también tuvieron que escribir sobre The Box relacionando la empatía y la tolerancia con dicha obra. Varios jueces revisaron los ensayos.
El equipo de Greene se sorprendió por lo académico que resultó la información y por lo mucho que aprendieron los alumnos, pues fueron capaces de recordar que la pintura hacía referencia a los apoyos de los precios durante la Gran Crisis de 1929 y también que otra pintura hacía referencia los abolicionistas que boicotearon la compra de azúcar.
“Estos detalles históricos no estaban incluidos en la introducción del curador” explica Green. Esto significa que el formato basado en la discusión alentó a los estudiantes a hacer preguntas importantes acerca de las pinturas. Pero algo acerca de la experiencia del museo también permitió a los pupilos recordar la información de la pintura un mes después. Eso es destacable considerando que los chicos olvidan rápidamente lo que han aprendido para los exámenes.
Cuando se les pidió a los estudiantes analizar una pintura no conocida “hubo un gran incremento en qué tan observadores eran los estudiantes si iban al museo de arte. Fueron mucho mejores notando detalles en la nueva pintura que aquellos que no fueron.” Los alumnos también fueron capaces de empatizar con las personas y los casos referidos de una forma en la que el grupo de control no pudo hacerlo.
“Antes del estudio, muchas personas nos dijeron que los chicos sólo mirarían hacia fuera de las ventanas.” dijo Greene, “Pues no, no lo hicieron. Prestaron atención y absorbieron información.” En parte esto se debe al formato de experiencia que no es cátedra. Pero Green sospecha que la razón también está vinculada a quitar a los estudiantes de su ambiente usual de escuela y ponerlos en uno cultural.”
“Puedes darle a los estudiantes una reproducción de gran calidad de una pintura pero no es lo mismo” dice Greene “ es como ver a un televangelista en lugar de ir a la iglesia. Tanto las iglesias como los museos invierten en arquitectura. El acto de ir pone la mente de las personas en otra experiencia receptiva”.
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En un estudio publicado en Education Next y Educational Researcher, se afirmó que los alumnos expuestos a las instituciones culturales como museos y centros de artes escénicas, no sólo tienen niveles altos de compromiso con las artes sino este acercamiento genera más tolerancia, empatía histórica, mejor memoria educativa y pensamiento crítico.
“Los cambios fueron significativos” dijo Jay P. Greene, profesor de la reforma educativa e investigador del estudio. En particular un solo tour a museo tiene una impresión definitiva en los estudiantes. De acuerdo con Greene, los estudiantes de este tour recordaron lo que habían aprendido “incluso sin una razón externa para hacerlo, como un grado o un examen.
Cuando el Crystal Bridges Museum of American Art abrió en Betonville, Arkansas, hace dos años, el museo ofreció a 11 mil estudiantes paseos. Cada grupo visitante (escogido por sorteo) vio 5 pinturas en una hora. Los paseos estaban dirigidos especialmente a los estudiantes, esto significa que los curadores no les dieron cátedra, sino que se les proporcionó la información mínima acerca de cada pintura y pasaron la mayor parte del tiempo facilitando discusión.
Tres semanas después, los estudiantes llenaron un cuestionario acerca de su experiencia en el museo. Aparte de recordar información sobre las pinturas que vieron, se les pidió responder preguntas sobre tolerancia hacia los otros y sobre empatía. Al final se les pidió escribir un ensayo corto acerca de una nueva pintura: The Box de Bo Bartlet, la cual no estuvo expuesta en el museo. Los estudiantes que ganaron el sorteo pero que no fueron en paseos de grupo, fueron el grupo de control. Los estudiantes también tuvieron que escribir sobre The Box relacionando la empatía y la tolerancia con dicha obra. Varios jueces revisaron los ensayos.
El equipo de Greene se sorprendió por lo académico que resultó la información y por lo mucho que aprendieron los alumnos, pues fueron capaces de recordar que la pintura hacía referencia a los apoyos de los precios durante la Gran Crisis de 1929 y también que otra pintura hacía referencia los abolicionistas que boicotearon la compra de azúcar.
“Estos detalles históricos no estaban incluidos en la introducción del curador” explica Green. Esto significa que el formato basado en la discusión alentó a los estudiantes a hacer preguntas importantes acerca de las pinturas. Pero algo acerca de la experiencia del museo también permitió a los pupilos recordar la información de la pintura un mes después. Eso es destacable considerando que los chicos olvidan rápidamente lo que han aprendido para los exámenes.
Cuando se les pidió a los estudiantes analizar una pintura no conocida “hubo un gran incremento en qué tan observadores eran los estudiantes si iban al museo de arte. Fueron mucho mejores notando detalles en la nueva pintura que aquellos que no fueron.” Los alumnos también fueron capaces de empatizar con las personas y los casos referidos de una forma en la que el grupo de control no pudo hacerlo.
“Antes del estudio, muchas personas nos dijeron que los chicos sólo mirarían hacia fuera de las ventanas.” dijo Greene, “Pues no, no lo hicieron. Prestaron atención y absorbieron información.” En parte esto se debe al formato de experiencia que no es cátedra. Pero Green sospecha que la razón también está vinculada a quitar a los estudiantes de su ambiente usual de escuela y ponerlos en uno cultural.”
“Puedes darle a los estudiantes una reproducción de gran calidad de una pintura pero no es lo mismo” dice Greene “ es como ver a un televangelista en lugar de ir a la iglesia. Tanto las iglesias como los museos invierten en arquitectura. El acto de ir pone la mente de las personas en otra experiencia receptiva”.
Un entrevista de Nicolás Bustamante Hernández a María Acaso.
La reconocida educadora española propone aulas creativas y estimulantes para niños y maestros.
La opinión de María Acaso sobre las facultades de educación es contundente: “Tirémoslas todas y hagámoslas de nuevo”. De esta forma, sin un asomo de duda, se expresó la artista y pedagoga española durante el taller creativo NC-Arte, que se desarrolló hace poco en Bogotá.
Reconocida como una gurú de las nuevas metodologías de aula, Acaso recuerda que cambió su forma de ver la educación cuando salió al extranjero y tuvo la oportunidad de trabajar en investigación con universidades como Harvard y Stanford. “Dejar mi estado de confort me hizo dar cuenta de que la pedagogía no funcionaba de esa manera, que había que cambiar las cosas”, explica en diálogo con EL TIEMPO esta educadora con más de 20 años de experiencia, autora de libros y una reputada bloguera.
¿En qué consiste su revolución educativa?
En una sucesión de microrrevoluciones y en hacer el cambio de paradigma de la educación, pero no de forma violenta y de golpe. Es hacerlo poco a poco, por reblandecimiento de sistemas. Si todos los profesores llegan a sus aulas un día y empiezan a cambiarlas poquito a poquito, entre todos crearemos esa macrorrevolución.
¿Qué características tiene ese cambio de paradigma?
Son cinco: el primer cambio es tener claro que lo que los profesores enseñan no es lo que los alumnos aprenden; el segundo punto es revisar las dinámicas de poder y emigrar de un estado en el que el profesor está por encima del estudiante. Tenemos que generar una comunidad de aprendizaje donde todo el mundo aprende de todo el mundo. El tercer punto es la importancia del cuerpo, aspecto en el que Colombia está muy avanzada, y que consiste en considerar al cuerpo como parte importantísima en el aula. En cuarto lugar está la experiencia, y lo que propongo es que abandonemos el simulacro pedagógico donde los profesores sabemos qué enseñamos y los alumnos saben lo que aprenden, pero nadie aprende de verdad. El último, y más conflictivo, es cambiar la evaluación, para pensar en una educación donde el centro sea el aprendizaje y no las mediciones y las comparaciones del desempeño.
¿Cómo reemplazar esa evaluación tan arraigada?
Tenemos que empezar a graduar a partir de modelos que no sean solamente numéricos, sino más cualitativos y creativos. Hay que descentrar la evaluación del profesor, pues tendemos a creer que siempre debemos dar una nota. Esto, al final, debe ser algo secundario, lo primario debe ser el aprendizaje.
¿Qué papel ocupa hoy el arte en la educación?
Ocupa uno central, pero más que hablar del arte, creo que es más interesante enfocarnos en la cultura visual. Tenemos un mundo lleno de imágenes en el cual la publicidad, las series y el cine educan a los jóvenes y, por lo tanto, es muy importante desarrollar asignaturas que enseñen a analizar esas imágenes, a ir más allá de lo que ellas nos muestran, puesto que esconden cosas que tienen que ver con asuntos tan vitales como cambiar nuestro cuerpo o generarnos afanes consumistas. Si enseñamos a los niños a analizar las imágenes, estos serán más libres y capaces de vivir por ellos mismos.
¿Quién es ese 'arteducador' del que habla en su blog?
Es un profesor que se considera artista o viceversa, pero que sobre todo es un agente y productor cultural. Para mí es igual hacer una obra de arte que diseñar una clase. Tengo la inquietud de por qué se reconoce tanto crear una pieza de arte y, en cambio, diseñar una clase parece una tontería. Hay que reivindicar la figura del profesor como un intelectual transformativo, alguien muy importante en el engranaje social, porque es capaz de cambiar la sociedad. Una profesora de kínder no es cuidadora de niños. Educar a niños de 3 a 6 años es una tarea que hay que reivindicar.
¿Cuáles son los requisitos de este ‘arteducador’?
La clave de la ‘rEDUvolution’ es la formación del profesional. Debemos renovar de arriba abajo las facultades de educación, que tienen que tener asignaturas de creatividad, porque un profesor creativo es capaz de hacerlo todo, y la creatividad es una competencia que, de manera equivocada, solemos relacionar más con los alumnos y no con el profesor. Un maestro tiene que tener pensamiento crítico, ser capaz de ir más allá de todas las cosas y entenderse como un productor cultural, como alguien que no reproduce lo que dicen los demás.
Entonces, ¿cómo deben ser las clases en los colegios?
Deben ser flexibles, maleables, no iguales. Deben tener elementos contemporáneos, con colores que hagan a los alumnos vibrar. Para todas las clases deberíamos tener un espacio diáfano que podamos partimentar, quitar y adicionarle cosas, como los alimentos. Esto es aplicable a todas las asignaturas. Se debería poder mezclar las clases, por ejemplo, combinando una clase de matemáticas con una de música.
EL ARTE VS. LA TECNOLOGÍA
Para María Acaso, hoy se habla mucho de la innovación y de la brecha tecnológica, como si lo importante fuera que los estudiantes tengan computadores y los profesores, herramientas tecnológicas. “Lo realmente importante ahora es saber cómo vamos a desarrollar metodologías diferentes para que los niños aprendan, haciendo que la tecnología sea una herramienta, pero no el fin. Hay que ver por qué están interesados en los dispositivos y aprovecharlo en la educación, que es lo que se ha llamado la ‘gamificación’, que viene del inglés ‘game’ (juego).
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La reconocida educadora española propone aulas creativas y estimulantes para niños y maestros.
La opinión de María Acaso sobre las facultades de educación es contundente: “Tirémoslas todas y hagámoslas de nuevo”. De esta forma, sin un asomo de duda, se expresó la artista y pedagoga española durante el taller creativo NC-Arte, que se desarrolló hace poco en Bogotá.
Reconocida como una gurú de las nuevas metodologías de aula, Acaso recuerda que cambió su forma de ver la educación cuando salió al extranjero y tuvo la oportunidad de trabajar en investigación con universidades como Harvard y Stanford. “Dejar mi estado de confort me hizo dar cuenta de que la pedagogía no funcionaba de esa manera, que había que cambiar las cosas”, explica en diálogo con EL TIEMPO esta educadora con más de 20 años de experiencia, autora de libros y una reputada bloguera.
¿En qué consiste su revolución educativa?
En una sucesión de microrrevoluciones y en hacer el cambio de paradigma de la educación, pero no de forma violenta y de golpe. Es hacerlo poco a poco, por reblandecimiento de sistemas. Si todos los profesores llegan a sus aulas un día y empiezan a cambiarlas poquito a poquito, entre todos crearemos esa macrorrevolución.
¿Qué características tiene ese cambio de paradigma?
Son cinco: el primer cambio es tener claro que lo que los profesores enseñan no es lo que los alumnos aprenden; el segundo punto es revisar las dinámicas de poder y emigrar de un estado en el que el profesor está por encima del estudiante. Tenemos que generar una comunidad de aprendizaje donde todo el mundo aprende de todo el mundo. El tercer punto es la importancia del cuerpo, aspecto en el que Colombia está muy avanzada, y que consiste en considerar al cuerpo como parte importantísima en el aula. En cuarto lugar está la experiencia, y lo que propongo es que abandonemos el simulacro pedagógico donde los profesores sabemos qué enseñamos y los alumnos saben lo que aprenden, pero nadie aprende de verdad. El último, y más conflictivo, es cambiar la evaluación, para pensar en una educación donde el centro sea el aprendizaje y no las mediciones y las comparaciones del desempeño.
¿Cómo reemplazar esa evaluación tan arraigada?
Tenemos que empezar a graduar a partir de modelos que no sean solamente numéricos, sino más cualitativos y creativos. Hay que descentrar la evaluación del profesor, pues tendemos a creer que siempre debemos dar una nota. Esto, al final, debe ser algo secundario, lo primario debe ser el aprendizaje.
¿Qué papel ocupa hoy el arte en la educación?
Ocupa uno central, pero más que hablar del arte, creo que es más interesante enfocarnos en la cultura visual. Tenemos un mundo lleno de imágenes en el cual la publicidad, las series y el cine educan a los jóvenes y, por lo tanto, es muy importante desarrollar asignaturas que enseñen a analizar esas imágenes, a ir más allá de lo que ellas nos muestran, puesto que esconden cosas que tienen que ver con asuntos tan vitales como cambiar nuestro cuerpo o generarnos afanes consumistas. Si enseñamos a los niños a analizar las imágenes, estos serán más libres y capaces de vivir por ellos mismos.
¿Quién es ese 'arteducador' del que habla en su blog?
Es un profesor que se considera artista o viceversa, pero que sobre todo es un agente y productor cultural. Para mí es igual hacer una obra de arte que diseñar una clase. Tengo la inquietud de por qué se reconoce tanto crear una pieza de arte y, en cambio, diseñar una clase parece una tontería. Hay que reivindicar la figura del profesor como un intelectual transformativo, alguien muy importante en el engranaje social, porque es capaz de cambiar la sociedad. Una profesora de kínder no es cuidadora de niños. Educar a niños de 3 a 6 años es una tarea que hay que reivindicar.
¿Cuáles son los requisitos de este ‘arteducador’?
La clave de la ‘rEDUvolution’ es la formación del profesional. Debemos renovar de arriba abajo las facultades de educación, que tienen que tener asignaturas de creatividad, porque un profesor creativo es capaz de hacerlo todo, y la creatividad es una competencia que, de manera equivocada, solemos relacionar más con los alumnos y no con el profesor. Un maestro tiene que tener pensamiento crítico, ser capaz de ir más allá de todas las cosas y entenderse como un productor cultural, como alguien que no reproduce lo que dicen los demás.
Entonces, ¿cómo deben ser las clases en los colegios?
Deben ser flexibles, maleables, no iguales. Deben tener elementos contemporáneos, con colores que hagan a los alumnos vibrar. Para todas las clases deberíamos tener un espacio diáfano que podamos partimentar, quitar y adicionarle cosas, como los alimentos. Esto es aplicable a todas las asignaturas. Se debería poder mezclar las clases, por ejemplo, combinando una clase de matemáticas con una de música.
EL ARTE VS. LA TECNOLOGÍA
Para María Acaso, hoy se habla mucho de la innovación y de la brecha tecnológica, como si lo importante fuera que los estudiantes tengan computadores y los profesores, herramientas tecnológicas. “Lo realmente importante ahora es saber cómo vamos a desarrollar metodologías diferentes para que los niños aprendan, haciendo que la tecnología sea una herramienta, pero no el fin. Hay que ver por qué están interesados en los dispositivos y aprovecharlo en la educación, que es lo que se ha llamado la ‘gamificación’, que viene del inglés ‘game’ (juego).
¿Los centros educativos de barrios empobrecidos también pueden innovar? Algunos de ellos lo hacen, pero a veces para lidiar con urgencias como la conflictividad o el absentismo. La escuela Mas Masó ha transformado su hora de recreo para reducir la conflictividad: "Hay pequeños cambios, buenas prácticas educativas que pueden provocar grandes consecuencias".
Mohammed es otro, dicen sus maestros, desde que la escuela Mas Masó ha transformado su hora de recreo en un espacio organizado de juegos y deportes. Hoy le toca a él ponerse el peto naranja fosforescente que lo convierte en responsable de que la actividad transcurra de forma agradable: "Es muy importante que nos respetemos, a mí me gusta mucho ser responsable y siempre pongo felicitaciones a todo el mundo en la hoja de incidencias, porque no hay muchos problemas", explica el alumno de esta escuela de Salt (Girona). Desde que en Mas Masó cambiaron el recreo por un espacio de actividades lúdicas supervisadas de forma autónoma por los propios alumnos, los altos niveles de conflicto y peleas que padecían, y que inevitablemente terminaban afectando a las clases posteriores, cayeron en picado. "Antes perdíamos casi toda la clase de después de la hora del patio resolviendo los problemas, ahora los alumnos suben calmados, un ambiente imprescindible para que aprendan", explica Gerard Ros, director del centro.
Hace unos años, en la escuela El Prat 1, de El Prat de Llobregat (Barcelona), uno de cada cuatro alumnos no iba a clase. Unos datos alarmantes de absentismo escolar que hoy es casi inexistente "porque los niños piden a sus padres venir a la escuela", explica su directora, Sandra Gallardo. Un proyecto educativo con la expresión artística como hilo conductor, sumado a un equipo de profesores "que cree profundamente en sus alumnos", ha transformado de arriba abajo la que hasta entonces era la escuela más estigmatizada de la ciudad.
Si innovar es encontrar soluciones nuevas para problemas antiguos –la conflictividad en Salt, el absentismo en El Prat– nadie puede discutir que estas dos escuelas han innovado. Ahora que este concepto inunda debates y congresos educativos, las escuelas que sufren más las consecuencias de las desigualdades y la pobreza se preguntan cuál debe ser su papel en el cambio educativo. Reconocen la necesidad de transformar las formas de enseñar, pero a la vez alertan de que esta no es la única urgencia a la que deben hacer frente, y que en este camino el viento sopla en su contra y necesitan más apoyo.
El orden de prioridades educativas se trastoca, por ejemplo, cuando todos los alumnos de un colegio son de origen extranjero. En Mas Masó el catalán es la lengua extranjera; el castellano, la comuna en el recreo, y el árabe y el suajili, las lenguas maternas. Algunos de sus pupilos viven en un bloque de pisos ocupados por la PAH. "Nuestra prioridades para garantizar un clima de aprendizaje ha sido hasta ahora favorecer la cohesión social y reducir la conflictividad", sostiene Ros. El proyecto Juego en el Patio, vinculado al currículo de Educación Física del centro, ha impactado con fuerza en la autoestima de sus alumnos, ya que los capacita para ser responsables de las actividades deportivas y de enseñar a los más pequeños.
Otro acierto de este equipo docente desde hace años ha sido sacar el máximo partido de las actividades extraescolares, para conseguir que por la tarde los niños tengan espacios de ocio educativo. Las puertas de la escuela están abiertas hasta el anochecer y se realizan en ella actividades de ocio –con monitores pagados por el centro– y talleres de deberes con los padres y madres. "Hay pequeños cambios, buenas prácticas educativas que pueden provocar grandes consecuencias: nosotros lo hemos vivido con el proyecto de patios o el taller de deberes", dice Ros.
"La historia de la pedagogía nos recuerda que hay grandes innovaciones, desde Piaget hasta Paulo Freire, que han surgido de entornos desfavorecidos", expone Valtencir Mendes, jefe de proyectos internacionales de la Fundación Jaume Bofill. "Hoy muchas escuelas de entornos difíciles llevan a cabo buenas prácticas, pero no lucen tanto", explica, y añade: "No podemos ser ingenuos y pensar que con innovaciones acabaremos con las desigualdades educativas, pero sí ayudan, sobre todo a abrir la escuela a su entorno", argumenta.
Mendes coordinó el pasado jueves en Barcelona el simposio Pedagogías innovadoras: un motor para la equidad y la calidad educativas, en el que participaron expertos internacionales y decenas de profesionales de centros educativos catalanes inmersos en entornos de pobreza. "Tenemos que capacitar al alumno para ser ciudadano de primera, como cualquier otro", proclamaba Laia Bou, directora del instituto Mont Perdut de Terrassa, un centro con muchos alumnos en el umbral de la exclusión social y que forma parte del proyecto Escola Nova 21. "Para ello necesitamos reforzar el trabajo emocional con los alumnos, porque la carga que llevan de casa es pesadísima", valoraba.
"¿La escuela puede ayudar a superar las diferencias que vienen de casa?", se preguntaba Hannah Dumond, psicóloga en el Instituto Alemán de Investigación Educativa Internacional, evocando uno de los interrogantes que mayor preocupación genera entre los docentes. "La poca investigación que tenemos sobre esto nos demuestra que hay que dotar a estas escuelas de más recursos, pero a la vez ser conscientes de que el dinero en sí mismo no va a solucionar nada: es la docencia, es el papel del maestro, el principal factor de cambio", argumentaba. "Ya sé que esto es poner mucha presión a unos docentes a menudo desbordados, pero la parte positiva es que está en nuestras manos", concluía.
Es en la capacidad de los maestros de adaptarse a las necesidades diversas de sus alumnos donde radica una de las claves de la equidad, añadía Dumond. En este sentido existe el compromiso de la Generalitat de garantizar que los llamados centros de alta complejidad tengan una ratio máxima de 22 alumnos por aula.
ATRAER A LAS FAMILIAS POCO A POCO
No todas las escuelas salen adelante con ello. Las hay que consiguen mejorar los resultados de sus alumnos, pero en su particular carrera de obstáculos aún no han logrado romper la barrera de segregación que las condena a tener una concentración elevada de alumnado de familias en situación de vulnerabilidad. En este sentido, son relevantes los primeros datos a partir del programa magnet (impulsado por la Fundación Jaume Bofill, el departamento de Enseñanza y el Instituto de Ciencias de la Educación de la UAB) de transformación de escuelas que se alien con entidades e instituciones de su entorno para romper la segregación social que sufren. Poco a poco la demanda familiar aflora en algunos de estos centros.
Un caso exitoso –no todos lo son– es el de la escuela Josep Maria de Sagarra de Barcelona. El curso 2012-2013 tenían un 44% de alumno de origen inmigrante –en su barrio, Vallcarca, este porcentaje es del 13%–, tenían plazas vacantes en general en todas las etapas y, en P-3, ese año las inscripciones fueron en un 70% de alumnos con los dos padres de origen extranjero. Cuatro años después, con un programa magnet de colaboración con el museo MACBA, la escuela ha recibido para el curso 2016-2017 más demanda de plazas (35) de las que puede ofrecer (25). Además, ahora ya sólo el 40% de quienes se preinscriben en P-3 tienen familia de origen extranjero.
Los impulsores de este programa, inspirado en las Magnet Schools de Estados Unidos, reconocen que aún es pronto para extraer conclusiones contundentes, pero sí han detectado que en los centros donde se implanta este plan se detecta un aumento de motivación del alumnado, un aumento de la implicación de las familias y una mejora de la percepción social de la escuela.
INNOVACIÓN EDUCATIVA Y DESIGUALDADES
La innovación educativa –o, si se prefiere, la capacidad de los maestros de lograr aprendizajes valiosos y perdurables para sus alumnos– es un factor que atrae cada vez a más familias. Y no precisamente en escuelas e institutos con el estigma de la alta complejidad, sino sobre todo en el resto de centros. La semana pasada unas 300 familias se concentraron en Barcelona para denunciar que sus hijos se han quedado sin plaza en centros públicos que aplican metodologías activas y participativas. ¿Puede el fenómeno de la innovación ensanchar la distancia que separa los centros más demandados del resto?
"Si se quiere avanzar hacia una escuela y un sistema educativo al servicio de la equidad es necesario que el debate sobre innovación vaya de la mano del debate sobre la segregación escolar", sostiene la socióloga Aina Tarabini en un artículo en El Diari de l'Educació. "Para innovar se necesitan ciertas condiciones y la segregación no hace más que jugar en contra de este proceso. Es por ello que la primera acción de la Administración educativa debe ser la acción preferente sobre las escuelas que no llenan plaza en primera opción", añade. "No estamos diciendo que no se pueda o no se deba innovar hasta que no se resuelva la segregación del sistema, pero son aspectos que no se pueden separar y sobre los que hay que actuar en paralelo o, más bien, de forma articulada", sentencia esta socióloga.
Mendes coincide en que deben ser procesos que avancen en paralelo. "No podemos decir a las escuelas que detengan su mejora, sino que tenemos que conseguir que estas contagien los centros de su entorno", expone.
EL MÉTODO, AL SERVICIO DE LA NECESIDAD
Cuando en la escuela Mas Masó preguntamos si se consideran innovadores por los cambios que han afrontado, su director encoge los hombros. Han recibido algunos premios, eso sí: hace unas semanas por el proyecto del taller de deberes en familia. Tal ha sido el éxito de este programa, implementado en colaboración con la Fundación Ser.Gi, que desde el actual curso se ha constituido un grupo flexible de padres y madres que entra en clase también en horario lectivo con sus hijos para "reforzar el vínculo" entre familias, escuela y alumnos.
"Nuestros objetivos son fortalecer la cohesión social y el logro de las competencias básicas entre el alumnado, y para ello hacemos los cambios que sean necesarios", apunta. Ros tiene la sensación de que escuelas como la suya no se pueden permitir el nivel de incertidumbre que generan ciertos procesos innovadores. "Tenemos momentos de trabajo por proyectos, o por rincones, pero no debemos perder de vista que nuestros alumnos necesitan mucho refuerzo en competencias básicas de lectura, escritura y matemáticas, y debemos asegurarnos de que esto se consigue", puntualiza. "La metodología tiene que ir al servicio de las necesidades", argumenta.
Estos días se realizan en el Mas Masó, como en la práctica totalidad de los centros escolares catalanes, las pruebas externalizadas de competencias básicas de Primaria (las que prevé la LOMCE, pero que la Generalitat aplica a su manera desde hace ocho años). Sus alumnos han mejorado con el tiempo. "Pero quizás lo harían más si las preguntas tuvieran que ver con lo que ellos conocen: un año les pedían que escribieran una redacción sobre dónde habían ido de vacaciones", se lamenta. La triste realidad es que pocos se pueden permitir salir de Salt en verano.
Este es un artículo publicado en El Diari de l'Educació
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Mohammed es otro, dicen sus maestros, desde que la escuela Mas Masó ha transformado su hora de recreo en un espacio organizado de juegos y deportes. Hoy le toca a él ponerse el peto naranja fosforescente que lo convierte en responsable de que la actividad transcurra de forma agradable: "Es muy importante que nos respetemos, a mí me gusta mucho ser responsable y siempre pongo felicitaciones a todo el mundo en la hoja de incidencias, porque no hay muchos problemas", explica el alumno de esta escuela de Salt (Girona). Desde que en Mas Masó cambiaron el recreo por un espacio de actividades lúdicas supervisadas de forma autónoma por los propios alumnos, los altos niveles de conflicto y peleas que padecían, y que inevitablemente terminaban afectando a las clases posteriores, cayeron en picado. "Antes perdíamos casi toda la clase de después de la hora del patio resolviendo los problemas, ahora los alumnos suben calmados, un ambiente imprescindible para que aprendan", explica Gerard Ros, director del centro.
Hace unos años, en la escuela El Prat 1, de El Prat de Llobregat (Barcelona), uno de cada cuatro alumnos no iba a clase. Unos datos alarmantes de absentismo escolar que hoy es casi inexistente "porque los niños piden a sus padres venir a la escuela", explica su directora, Sandra Gallardo. Un proyecto educativo con la expresión artística como hilo conductor, sumado a un equipo de profesores "que cree profundamente en sus alumnos", ha transformado de arriba abajo la que hasta entonces era la escuela más estigmatizada de la ciudad.
Si innovar es encontrar soluciones nuevas para problemas antiguos –la conflictividad en Salt, el absentismo en El Prat– nadie puede discutir que estas dos escuelas han innovado. Ahora que este concepto inunda debates y congresos educativos, las escuelas que sufren más las consecuencias de las desigualdades y la pobreza se preguntan cuál debe ser su papel en el cambio educativo. Reconocen la necesidad de transformar las formas de enseñar, pero a la vez alertan de que esta no es la única urgencia a la que deben hacer frente, y que en este camino el viento sopla en su contra y necesitan más apoyo.
El orden de prioridades educativas se trastoca, por ejemplo, cuando todos los alumnos de un colegio son de origen extranjero. En Mas Masó el catalán es la lengua extranjera; el castellano, la comuna en el recreo, y el árabe y el suajili, las lenguas maternas. Algunos de sus pupilos viven en un bloque de pisos ocupados por la PAH. "Nuestra prioridades para garantizar un clima de aprendizaje ha sido hasta ahora favorecer la cohesión social y reducir la conflictividad", sostiene Ros. El proyecto Juego en el Patio, vinculado al currículo de Educación Física del centro, ha impactado con fuerza en la autoestima de sus alumnos, ya que los capacita para ser responsables de las actividades deportivas y de enseñar a los más pequeños.
Otro acierto de este equipo docente desde hace años ha sido sacar el máximo partido de las actividades extraescolares, para conseguir que por la tarde los niños tengan espacios de ocio educativo. Las puertas de la escuela están abiertas hasta el anochecer y se realizan en ella actividades de ocio –con monitores pagados por el centro– y talleres de deberes con los padres y madres. "Hay pequeños cambios, buenas prácticas educativas que pueden provocar grandes consecuencias: nosotros lo hemos vivido con el proyecto de patios o el taller de deberes", dice Ros.
"La historia de la pedagogía nos recuerda que hay grandes innovaciones, desde Piaget hasta Paulo Freire, que han surgido de entornos desfavorecidos", expone Valtencir Mendes, jefe de proyectos internacionales de la Fundación Jaume Bofill. "Hoy muchas escuelas de entornos difíciles llevan a cabo buenas prácticas, pero no lucen tanto", explica, y añade: "No podemos ser ingenuos y pensar que con innovaciones acabaremos con las desigualdades educativas, pero sí ayudan, sobre todo a abrir la escuela a su entorno", argumenta.
Mendes coordinó el pasado jueves en Barcelona el simposio Pedagogías innovadoras: un motor para la equidad y la calidad educativas, en el que participaron expertos internacionales y decenas de profesionales de centros educativos catalanes inmersos en entornos de pobreza. "Tenemos que capacitar al alumno para ser ciudadano de primera, como cualquier otro", proclamaba Laia Bou, directora del instituto Mont Perdut de Terrassa, un centro con muchos alumnos en el umbral de la exclusión social y que forma parte del proyecto Escola Nova 21. "Para ello necesitamos reforzar el trabajo emocional con los alumnos, porque la carga que llevan de casa es pesadísima", valoraba.
"¿La escuela puede ayudar a superar las diferencias que vienen de casa?", se preguntaba Hannah Dumond, psicóloga en el Instituto Alemán de Investigación Educativa Internacional, evocando uno de los interrogantes que mayor preocupación genera entre los docentes. "La poca investigación que tenemos sobre esto nos demuestra que hay que dotar a estas escuelas de más recursos, pero a la vez ser conscientes de que el dinero en sí mismo no va a solucionar nada: es la docencia, es el papel del maestro, el principal factor de cambio", argumentaba. "Ya sé que esto es poner mucha presión a unos docentes a menudo desbordados, pero la parte positiva es que está en nuestras manos", concluía.
Es en la capacidad de los maestros de adaptarse a las necesidades diversas de sus alumnos donde radica una de las claves de la equidad, añadía Dumond. En este sentido existe el compromiso de la Generalitat de garantizar que los llamados centros de alta complejidad tengan una ratio máxima de 22 alumnos por aula.
ATRAER A LAS FAMILIAS POCO A POCO
No todas las escuelas salen adelante con ello. Las hay que consiguen mejorar los resultados de sus alumnos, pero en su particular carrera de obstáculos aún no han logrado romper la barrera de segregación que las condena a tener una concentración elevada de alumnado de familias en situación de vulnerabilidad. En este sentido, son relevantes los primeros datos a partir del programa magnet (impulsado por la Fundación Jaume Bofill, el departamento de Enseñanza y el Instituto de Ciencias de la Educación de la UAB) de transformación de escuelas que se alien con entidades e instituciones de su entorno para romper la segregación social que sufren. Poco a poco la demanda familiar aflora en algunos de estos centros.
Un caso exitoso –no todos lo son– es el de la escuela Josep Maria de Sagarra de Barcelona. El curso 2012-2013 tenían un 44% de alumno de origen inmigrante –en su barrio, Vallcarca, este porcentaje es del 13%–, tenían plazas vacantes en general en todas las etapas y, en P-3, ese año las inscripciones fueron en un 70% de alumnos con los dos padres de origen extranjero. Cuatro años después, con un programa magnet de colaboración con el museo MACBA, la escuela ha recibido para el curso 2016-2017 más demanda de plazas (35) de las que puede ofrecer (25). Además, ahora ya sólo el 40% de quienes se preinscriben en P-3 tienen familia de origen extranjero.
Los impulsores de este programa, inspirado en las Magnet Schools de Estados Unidos, reconocen que aún es pronto para extraer conclusiones contundentes, pero sí han detectado que en los centros donde se implanta este plan se detecta un aumento de motivación del alumnado, un aumento de la implicación de las familias y una mejora de la percepción social de la escuela.
INNOVACIÓN EDUCATIVA Y DESIGUALDADES
La innovación educativa –o, si se prefiere, la capacidad de los maestros de lograr aprendizajes valiosos y perdurables para sus alumnos– es un factor que atrae cada vez a más familias. Y no precisamente en escuelas e institutos con el estigma de la alta complejidad, sino sobre todo en el resto de centros. La semana pasada unas 300 familias se concentraron en Barcelona para denunciar que sus hijos se han quedado sin plaza en centros públicos que aplican metodologías activas y participativas. ¿Puede el fenómeno de la innovación ensanchar la distancia que separa los centros más demandados del resto?
"Si se quiere avanzar hacia una escuela y un sistema educativo al servicio de la equidad es necesario que el debate sobre innovación vaya de la mano del debate sobre la segregación escolar", sostiene la socióloga Aina Tarabini en un artículo en El Diari de l'Educació. "Para innovar se necesitan ciertas condiciones y la segregación no hace más que jugar en contra de este proceso. Es por ello que la primera acción de la Administración educativa debe ser la acción preferente sobre las escuelas que no llenan plaza en primera opción", añade. "No estamos diciendo que no se pueda o no se deba innovar hasta que no se resuelva la segregación del sistema, pero son aspectos que no se pueden separar y sobre los que hay que actuar en paralelo o, más bien, de forma articulada", sentencia esta socióloga.
Mendes coincide en que deben ser procesos que avancen en paralelo. "No podemos decir a las escuelas que detengan su mejora, sino que tenemos que conseguir que estas contagien los centros de su entorno", expone.
EL MÉTODO, AL SERVICIO DE LA NECESIDAD
Cuando en la escuela Mas Masó preguntamos si se consideran innovadores por los cambios que han afrontado, su director encoge los hombros. Han recibido algunos premios, eso sí: hace unas semanas por el proyecto del taller de deberes en familia. Tal ha sido el éxito de este programa, implementado en colaboración con la Fundación Ser.Gi, que desde el actual curso se ha constituido un grupo flexible de padres y madres que entra en clase también en horario lectivo con sus hijos para "reforzar el vínculo" entre familias, escuela y alumnos.
"Nuestros objetivos son fortalecer la cohesión social y el logro de las competencias básicas entre el alumnado, y para ello hacemos los cambios que sean necesarios", apunta. Ros tiene la sensación de que escuelas como la suya no se pueden permitir el nivel de incertidumbre que generan ciertos procesos innovadores. "Tenemos momentos de trabajo por proyectos, o por rincones, pero no debemos perder de vista que nuestros alumnos necesitan mucho refuerzo en competencias básicas de lectura, escritura y matemáticas, y debemos asegurarnos de que esto se consigue", puntualiza. "La metodología tiene que ir al servicio de las necesidades", argumenta.
Estos días se realizan en el Mas Masó, como en la práctica totalidad de los centros escolares catalanes, las pruebas externalizadas de competencias básicas de Primaria (las que prevé la LOMCE, pero que la Generalitat aplica a su manera desde hace ocho años). Sus alumnos han mejorado con el tiempo. "Pero quizás lo harían más si las preguntas tuvieran que ver con lo que ellos conocen: un año les pedían que escribieran una redacción sobre dónde habían ido de vacaciones", se lamenta. La triste realidad es que pocos se pueden permitir salir de Salt en verano.
Este es un artículo publicado en El Diari de l'Educació
Te invitamos a la 6ª proyección del Ciclo de Cine-Debate sobre Educación Alternativa, organizado por Reevo Madrid, esta vez con la proyección del documental 'Entre Maestros'.
Un ciclo que, como ya sabes, se realiza en la Facultad de Educación de la Universidad Complutense de Madrid, con una proyección mensual y cuya intención es promover la reflexión y generar espacios de comunicación y conocimiento que nos permitan intercambiar la enorme diversidad de experiencias alternativas, innovadoras y transformadoras que existen en este campo.
• Fecha: Jueves 19 de mayo
• Hora: 18:30
• Lugar: Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Educación. C/ Rector Royo Villanova s/n. Sala de Conferencias (Planta 2º, Ala I, Aula 2501).
• Detalles: Evento gratuito con inscripción previa.
Datos del film:
• Título: Entre Maestros
• Dirección: Pablo Usón
• Año: 2007
• Duración: 87’
• Producción: España
• Sinopsis: Once alumnos. Un maestro. Doce días. Otra forma de hacer, de estar, de ser y compartir. Unas clases diferentes en las que Carlos Gonzalez nos demuestra que hay otros métodos que permiten un mejor desarrollo personal, conocernos a nosotros mismos, descubrir el potencial que llevamos dentro, encontrar la motivación, confiar y respetarnos. Un documental apasionante, cercano, vital, divertido y provocador basado en una experiencia real.
Para cualquier consulta o duda, contacta con nosotros en madrid@reevo.org.
¡Te esperamos!
Equipo de Reevo, la Red de Educación Alternativa, Nodo Madrid
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Un ciclo que, como ya sabes, se realiza en la Facultad de Educación de la Universidad Complutense de Madrid, con una proyección mensual y cuya intención es promover la reflexión y generar espacios de comunicación y conocimiento que nos permitan intercambiar la enorme diversidad de experiencias alternativas, innovadoras y transformadoras que existen en este campo.
• Fecha: Jueves 19 de mayo
• Hora: 18:30
• Lugar: Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Educación. C/ Rector Royo Villanova s/n. Sala de Conferencias (Planta 2º, Ala I, Aula 2501).
• Detalles: Evento gratuito con inscripción previa.
Datos del film:
• Título: Entre Maestros
• Dirección: Pablo Usón
• Año: 2007
• Duración: 87’
• Producción: España
• Sinopsis: Once alumnos. Un maestro. Doce días. Otra forma de hacer, de estar, de ser y compartir. Unas clases diferentes en las que Carlos Gonzalez nos demuestra que hay otros métodos que permiten un mejor desarrollo personal, conocernos a nosotros mismos, descubrir el potencial que llevamos dentro, encontrar la motivación, confiar y respetarnos. Un documental apasionante, cercano, vital, divertido y provocador basado en una experiencia real.
Para cualquier consulta o duda, contacta con nosotros en madrid@reevo.org.
¡Te esperamos!
Equipo de Reevo, la Red de Educación Alternativa, Nodo Madrid